Descargar PDF adjunto Usuario: (Email) Contraseña - AAA Colegio ...

El Domingo asistimos a Misa en la Catedral de
Sighisoara. Coincidimos con la primera
Comunión de doce niños. Todo precioso pero en
idioma húngaro, no en rumano, ininteligible.
La ciudad que más impresiona es SIBIU con un espectacular
centro urbano.
Allí está el Museo Brukenthal, parecido al Thyssen madrileño,
noble que tanto hizo por el arte.
Compiten en interés tres catedrales: La Católica en la Plaza
Mayor. Pasando el Puente de los Mentirosos, con la leyenda
de que se hundirá al no decir la verdad, una pareja de
enamorados, se llega a la Catedral Evangélica. Con un gran
fresco los protestantes borraron a María y los Apóstoles,
pero por salvar completa la Cruz quedaron los brazos de la
Magdalena que abrazaba los pies de Jesús.
Por últlimo la catedral ortodoxa, una joya del arte bizantino.
Al margen de las ciudades visitamos Monasterios como el
de Ghighiu centro de peregrinaciones por su milagroso
icono y el de Tiganesti donde las monjas bordan en unos
viejos telares las casullas doradas. Usan unas fichas perforadas
análogas a las de las viejas pianolas.
Para el final dejamos la mención de los Castillos.
La Iglesia fortificada de Biertam patrimonio de la Humanidad,
sede de la Iglesia Protestante en el siglo XVIII. Muy curiosa
la puerta de la Sacristía con 19 cerraduras que
accionan con una sola llave.
El Castillo de Bran, el de Drácula. Lo inició en
1400 el rey Mircea, el Sabio que se incorporó a
la Orden de los Dragones para luchar contra los
otomanos.
La bellísima reina María de Saxo-Coburgo es
quien lo ocupó durante 40 años y hoy está a
la venta por su actual propietario en plena
burbuja inmobiliaria.
Muy diferente es el Castillo de Peles donde
veraneaban los Reyes en Sinaia.
Al margen de su arquitectura y de su decoración muy
recargada sorprende encontrar el primer ascensor eléctrico
de 1833, un sistema fijo de tubos aspiradores para la limpieza
y una sala de cine de 1906.
En cuanto a folklore tuvimos una cena con bailes típicos en
el Cervul Carpatin. Más insólita la visita a Siebel donde nos
recibieron dos mozos a caballo para llevarnos hasta el Alcalde
que nos dió la bienvenida con una banda de música. Confía
en el futuro turístico en un país todavía ajeno al turismo de
masas. Estaban asombrados con nuestra visita y se volcaron
con nosotros.
Como colofón el último dia, mientras cenábamos en una
cabaña en el bosque, aparecío una osa de 100 Kilos de peso
buscando comida en la basura.
Actuaron los policías de bosque, durmiéndola con un disparo
e introduciéndola finalmente en una jaula, para transportarla
a lugar más apropiado. Mucha emoción.
Viajes ECO se lució en la organización. Rumanía ofrece una
excursión diferente.
TWO VIKINGS
9