Irak-bush-bajo-la-lupa

Irak-bush-bajo-la-lupa Irak-bush-bajo-la-lupa

22.03.2013 Views

Como que se está creando toda una coreografía para otro "11 de septiembre" desde Indonesia pasando por Filipinas (¡han reaparecido hasta piratas posmodernos en el superestratégico estrecho de Malaca!) hasta la región del TLCAN: la infiltración de la mafia rusa en México, según un artículo en el Miami Herald, y las andanzas de Rafi Eytan (asesor de contraterrorismo de Sharon) por Estados Unidos, la ciudad de México, Monterrey y una isla del Caribe. El presunto montaje de pánico de los straussianos ha ocasionado alertas de terror en tres países anglosajones aliados (Gran Bretaña, Estados Unidos y Australia), así como en Israel y Arabia Saudita. Uno de los periódicos portavoces de los straussianos, The Daily Telegraph (14 de agosto), contribuye a la coreografía del pánico, esta vez con dedicatoria para Australia que, calladamente bajo la cobertura del "combate al terrorismo", se ha posicionado en varios territorios en el Pacífico (en Aceh, desprendida de Indonesia, y en las superestratégicas islas Salomón): "Otro ataque terrorista catastrófico es inevitable en muy poco tiempo". Dennis Richardson, jefe de la Organización de Seguridad de Inteligencia Australiana, predijo que "próximamente ocurriría un devastador ataque con armas nucleares, biológicas y químicas". ¡Dios Santo! A sabiendas de sus actos terroristas y sus alcances, ¿cómo no logran detener a los autores, y menos prevenir sus delitos a tiempo? Lo real es que todo el montaje hollywoodense del terrorismo global ha cobrado "profundidad estratégica" con la inclusión de Australia, el aliado anglosajón de Estados Unidos y Gran Bretaña. Ahora Jeffrey Sachs se ha sumado a la ofensiva de los centros de pensamiento israelíes para derrocar al régimen "wahabita", por medio del artículo "Arabia Saudita era el verdadero objetivo de la guerra en Irak" (The Financial Times, 13 de agosto). Sachs, quien descuartizó las economías de Bolivia y Rusia con sus alocadas "terapias de choque", basa sus asertos en la "seguridad energética" de Estados Unidos y aduce que "la conspiración se consolidó con la divulgación de la investigación del Congreso sobre el 11 de septiembre. Parece muy probable que Irak haya sido atacada porque Arabia Saudita se encontraba profundamente implicada en los ataques terroristas". Recuerda que el embargo petrolero de 1973 se escenificó durante la presidencia de Gerald Ford, cuando Rumsfeld era por primera vez secretario de Defensa, y Cheney, jefe del gabinete: 28 años antes del 11 de septiembre, "el Pentágono y los planificadores académicos comenzaron a realizar planes de contingencia para la captura militar de los campos petroleros del Medio Oriente". ¡Vaya, vaya: qué novedad! Sachs reconoce, como si no se supiera, que: "Arabia Saudita había constituido la llave para la riqueza privada de figuras relevantes, y para la extensa familia Bush en particular. La familia real Saudita carece de legitimidad política, por lo que compra la protección de Estados Unidos", y benefició con suculentos contratos a toda una pléyade de contratistas adscritos al Grupo Carlyle. Como que salió muy caro, ¿no? Argumenta

que el 11 de septiembre puso en tela de juicio dicha colusión corporativa con la revelación de que 15 de los 19 involucrados habían sido sauditas: "amplios sectores de la extensa familia real eran no solamente corruptos, sino profundamente entrelazados con el terror antiestadunidense y el fundamentalismo extremista". Para edulcorar sus asertos, Sachs se basa en el libro Durmiendo con el diablo: Cómo Washington vendió nuestra alma por el crudo saudita, del ex agente de la CÍA Robert Baer, que exhibe cómo el gobierno estadunidense hizo caso omiso de la creciente evidencia de la complicidad saudita en el terrorismo fundamentalista, lo que frustró consecuentemente las investigaciones sobre el 11 de septiembre. Sachs sustenta "cuatro canales plausibles": 1) La estabilidad del petróleo saudita estaba en peligro. El régimen era inestable y aun constituía una amenaza letal para Estados Unidos; "desde el punto de vista cuantitativo, la única alternativa significativa al petróleo saudita era el petróleo iraquí"'. 2) "Se tenía que buscar un sustituto para las bases militares de Estados Unidos en Arabia Saudita que se encontraban bajo al amenaza de Al-Qaeda. Irak sería la nueva base de las operaciones militares de Estados Unidos. Paul Wolfowitz, el subsecretario de Defensa, ya lo explicó en su entrevista a Vanity Fair". 3) "La Casa Blanca de Bush necesitaba expedir una amenaza poderosa al liderazgo saudita: un paso más en falso y están acabados". 4) "Hussein era el objetivo perfecto, un verdadero déspota, un enemigo público de Estados Unidos y un despilfarrador de los recursos energéticos que necesitaban los consumidores de Estados Unidos". ¿Significa, entonces, que el género humano le debe estar eternamente agradecido al equipo Bush, aliado de los sauditas, no se diga de Al-Qaeda durante la guerra fría, por haber eliminado a Hussein, un despilfarrador (sic) de los energéticos, para que Estados Unidos siga siendo el mayor derrochador de gas y petróleo, así como el superlativo depredador ambiental a escala global? Se desprende de los asertos de Sachs que el equipo Bush busca capturar por la puerta trasera los yacimientos petroleros de Arabia Saudita. ¿Será mediante la balcanización de la región chifla de Dhahran, al este del reino "wahabita", como prevé el "plan Wolfowitz"? Sachs pertenece al Centro de Desarrollo Global (CGD, por sus siglas en inglés), brazo influyente del Instituto Internacional de Economía (HE, por sus siglas en inglés), con sede en Washington, en el que colaboran Ernesto Zedillo y el megaespeculador y criminal convicto George Soros. En el CGD aparece Ángel Gurría Treviño, como "presidente del cuerpo externo de asesoría" del BID, quien debería estar en la cárcel por sus fechorías en el Fobaproa/IPAB (no se diga en Nafín), como revela la Auditoría Superior de la Federación. Pero tal parece que los antecedentes criminales o el haber despedazado (o descuartizar en el futuro) a los países en vías desarrollo, son los requisitos para ingresar al HE, o a su apéndice, el CGD: los piratas con "antifaz académico" del petróleo y recursos financieros ajenos.

Como que se está creando toda una coreografía para otro "11 de septiembre" desde<br />

Indonesia pasando por Filipinas (¡han reaparecido hasta piratas posmodernos en el<br />

superestratégico estrecho de Ma<strong>la</strong>ca!) hasta <strong>la</strong> región del TLCAN: <strong>la</strong> infiltración de <strong>la</strong><br />

mafia rusa en México, según un artículo en el Miami Herald, y <strong>la</strong>s andanzas de Rafi<br />

Eytan (asesor de contraterrorismo de Sharon) por Estados Unidos, <strong>la</strong> ciudad de México,<br />

Monterrey y una is<strong>la</strong> del Caribe. El presunto montaje de pánico de los straussianos ha<br />

ocasionado alertas de terror en tres países anglosajones aliados (Gran Bretaña, Estados<br />

Unidos y Australia), así como en Israel y Arabia Saudita. Uno de los periódicos portavoces<br />

de los straussianos, The Daily Telegraph (14 de agosto), contribuye a <strong>la</strong> coreografía del<br />

pánico, esta vez con dedicatoria para Australia que, cal<strong>la</strong>damente <strong>bajo</strong> <strong>la</strong> cobertura del<br />

"combate al terrorismo", se ha posicionado en varios territorios en el Pacífico (en Aceh,<br />

desprendida de Indonesia, y en <strong>la</strong>s superestratégicas is<strong>la</strong>s Salomón): "Otro ataque terrorista<br />

catastrófico es inevitable en muy poco tiempo". Dennis Richardson, jefe de <strong>la</strong> Organización<br />

de Seguridad de Inteligencia Australiana, predijo que "próximamente ocurriría un<br />

devastador ataque con armas nucleares, biológicas y químicas". ¡Dios Santo! A sabiendas<br />

de sus actos terroristas y sus alcances, ¿cómo no logran detener a los autores, y menos<br />

prevenir sus delitos a tiempo? Lo real es que todo el montaje hollywoodense del terrorismo<br />

global ha cobrado "profundidad estratégica" con <strong>la</strong> inclusión de Australia, el aliado<br />

anglosajón de Estados Unidos y Gran Bretaña.<br />

Ahora Jeffrey Sachs se ha sumado a <strong>la</strong> ofensiva de los centros de pensamiento<br />

israelíes para derrocar al régimen "wahabita", por medio del artículo "Arabia Saudita era<br />

el verdadero objetivo de <strong>la</strong> guerra en <strong>Irak</strong>" (The Financial Times, 13 de agosto). Sachs,<br />

quien descuartizó <strong>la</strong>s economías de Bolivia y Rusia con sus alocadas "terapias de choque",<br />

basa sus asertos en <strong>la</strong> "seguridad energética" de Estados Unidos y aduce que "<strong>la</strong><br />

conspiración se consolidó con <strong>la</strong> divulgación de <strong>la</strong> investigación del Congreso sobre el 11<br />

de septiembre. Parece muy probable que <strong>Irak</strong> haya sido atacada porque Arabia Saudita<br />

se encontraba profundamente implicada en los ataques terroristas". Recuerda que el<br />

embargo petrolero de 1973 se escenificó durante <strong>la</strong> presidencia de Gerald Ford, cuando<br />

Rumsfeld era por primera vez secretario de Defensa, y Cheney, jefe del gabinete: 28<br />

años antes del 11 de septiembre, "el Pentágono y los p<strong>la</strong>nificadores académicos<br />

comenzaron a realizar p<strong>la</strong>nes de contingencia para <strong>la</strong> captura militar de los campos<br />

petroleros del Medio Oriente". ¡Vaya, vaya: qué novedad!<br />

Sachs reconoce, como si no se supiera, que: "Arabia Saudita había constituido <strong>la</strong><br />

l<strong>la</strong>ve para <strong>la</strong> riqueza privada de figuras relevantes, y para <strong>la</strong> extensa familia Bush en<br />

particu<strong>la</strong>r. La familia real Saudita carece de legitimidad política, por lo que compra <strong>la</strong><br />

protección de Estados Unidos", y benefició con suculentos contratos a toda una pléyade<br />

de contratistas adscritos al Grupo Carlyle. Como que salió muy caro, ¿no? Argumenta

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!