Irak-bush-bajo-la-lupa

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22.03.2013 Views

al respecto un mes antes -que incluían a "cuatro de los secuestradores sin ser ninguno de ellos molestado". Los planes existían desde 1996 y un reporte de inteligencia había sido más explícito sobre el operativo de Al-Qaeda. Durante la guerra de la URSS en Afganistán, la Agencia Central de Inteligencia (CÍA) había otorgado facilidades a los mujaidines para conceder visas en Arabia Saudita. Quince de los 19 secuestradores las obtuvieron sin mucha restricción. Un dato estrujante: "cinco secuestradores recibieron entrenamiento en instalaciones militares seguras en la década de los 90". Maecher ausculta las circunstancias laxas de seguridad: no solamente pasaron dos horas 40 minutos entre un avionazo y otro, sino que llama la atención que ningún aeroplano cazabombardero haya sido enviado a investigar, pues "existe un requisito legal en EU de que al momento de que un avión comercial o cualquiera se haya movido significativamente de su plan de vuelo, los cazabombarderos son enviados de inmediato a investigar". Vienen las preguntas inquisitoriales de Maecher: "¿La falta de acción fue simplemente el resultado de importante gente negligente o ignorante de las evidencias? ¿Las operaciones de seguridad aérea de Estados Unidos fueron deliberadamente detenidas el 11 de septiembre?" Cita al anterior procurador penal federal, John Loftus, quien afirma que la extensa información brindada por los servicios secretos de Europa desechan cualquier acusación de incompetencia de la CÍA y la FBI. La bomba Maecher no cesa de explotar: "la respuesta de EU después del 11 de septiembre no fue tampoco mejor. Ningún intento serio por capturar a Bin Laden se ha hecho", y destruye en forma contundente "el montaje de la guerra contra el terrorismo global, usada ampliamente como falsa cobertura para conseguir los objetivos geopolíticos estratégicos más profundos de Washington". Ni más ni menos que la tesis de Bajo la Lupa desde hace bastante tiempo. Trae a colación que el Instituto Baker de Política Pública, con sede en Texas, había preparado desde abril de 2001 un reporte para el gobierno estadunidense, que "se encuentra prisionero de su dilema energético. Irak representa una influencia desestabilizadora para el flujo del petróleo de Medio Oriente a los mercados internacionales". ¿A poco mejoraron los flujos y los precios con la presencia seudo estabilizadora de la biocupación anglosajona? No se debe soslayar que el texano James Baker III representa una de las figuras relevantes del Grupo Carlyle. Con empleo magistral de fuentes bibliográficas, Maecher sustenta sus asertos, que demuestran la hambruna energética de EU y Gran Bretaña. Así, detrás del derrocamiento del régimen talibán en Afganistán, se encuentra toda la política energética de Centro Asia y su control por medio de oleoductos "construidos desde los yacimientos petroleros de Turkeminstán, Uzbekistán y Kazajstán a través de Afganistán y Pakistán hasta el océano Indico". Cuando el régimen talibán fue confrontado por los enviados estadunidenses, el mensaje fue

perentorio: "aceptan nuestra oferta de una alfombra de oro o los enterraremos bajo una alfombra de bombas" {ínter Press Service, 15/11/01). ¡Qué persuasivos! Queda claro el pretexto del 11 de septiembre para hacer avanzar la agenda energética de Estados Unidos y Gran Bretaña por medio de una guerra planificada antes de los atentados. Se necesitan coartadas que ultrajen a la opinión pública, como sucedió con Pearl Harbor, para librar las guerras: "la aplastante motivación para la cortina política de humo es que esas naciones empezaron a quedarse cortas en el abastecimiento de petróleo seguro. En 2010, el mundo musulmán controlará alrededor de 60 por ciento de la producción mundial de petróleo y, lo más relevante, 95 por ciento de la capacidad exportadora". El ex ministro de Medio Ambiente inglés, tras enfatizar la carencia energética de Estados Unidos, señala los datos que exhiben la hambruna energética de Gran Bretaña, que enfrentará severas carencias de gas en 2005, es decir, en dos años: "El gobierno británico ha confirmado que 70 por ciento de nuestra electricidad provendrá del gas en 2020, cuyo 90 por ciento será importado". Hace notar que Irak posee 110 billones de pies cúbicos de reservas de gas, además de sus pletóricos yacimientos petroleros. ¡La rapiña anglosajona en todo su esplendor! Comenta lo archisabido sobre el mar Caspio, que en forma implícita da por hecho su control parcial a través del oleoducto Bakú (capital y puerto de Azerbaiyán, en el mar Caspio) -Tblisi (capital de Georgia)- Ceyhán (puerto turco del mar Mediterráneo), lo cual disminuiría la dependencia estadunidense del petróleo de Arabia Saudita. En las guerras que libran la gasocracia texana y la petrocracia anglosajona en Afganistán e Irak (por el momento), después de haber involucrado a la gasera texana Halliburton y a la constructora Bechtel (ambas protegidas por el Grupo Carlyle), no podía dejar paralizada a la gasera texana Enron (nota: quebrada en EU, pero funcionando en México e India), gracias a "un oleoducto de Afganistán y Pakistán que alcanza los límites de India: lo que rescataría a la atribulada planta eléctrica de Enron en Dabhol, donde Enron invirtió 3 mil millones de dólares y cuya supervivencia económica dependía del acceso a gas barato". Después de advertir sobre las andanzas en Irak y Libia de lord Browne, jerarca de la compañía British Petroleum para consolidar el abastecimiento de gas y petróleo de Gran Bretaña, concluye que la "guerra contra el terrorismo global lleva el sello de un mito político propagado para abrir el paso a una agenda totalmente diferente: el objetivo de EU de hegemonía mundial, construido sobre la captura por la fuerza de las fuentes de abastecimiento de petróleo". Los neoconservadores equipo Bush y del PNAC (conocidos como los straussianos por los lectores de Bajo la Lupa) se han vuelto el tiro al blanco del momento. El representante David Obey le recomendó a Baby Bush que "el secretario del Pentágono y su subsecretario regresen al sector privado" (Al Jazeera, 6/9/03). Se trata del

al respecto un mes antes -que incluían a "cuatro de los secuestradores sin ser ninguno de<br />

ellos molestado". Los p<strong>la</strong>nes existían desde 1996 y un reporte de inteligencia había sido<br />

más explícito sobre el operativo de Al-Qaeda. Durante <strong>la</strong> guerra de <strong>la</strong> URSS en Afganistán,<br />

<strong>la</strong> Agencia Central de Inteligencia (CÍA) había otorgado facilidades a los mujaidines<br />

para conceder visas en Arabia Saudita. Quince de los 19 secuestradores <strong>la</strong>s obtuvieron<br />

sin mucha restricción. Un dato estrujante: "cinco secuestradores recibieron entrenamiento<br />

en insta<strong>la</strong>ciones militares seguras en <strong>la</strong> década de los 90". Maecher ausculta <strong>la</strong>s<br />

circunstancias <strong>la</strong>xas de seguridad: no so<strong>la</strong>mente pasaron dos horas 40 minutos entre un<br />

avionazo y otro, sino que l<strong>la</strong>ma <strong>la</strong> atención que ningún aerop<strong>la</strong>no cazabombardero haya<br />

sido enviado a investigar, pues "existe un requisito legal en EU de que al momento de que<br />

un avión comercial o cualquiera se haya movido significativamente de su p<strong>la</strong>n de vuelo,<br />

los cazabombarderos son enviados de inmediato a investigar".<br />

Vienen <strong>la</strong>s preguntas inquisitoriales de Maecher: "¿La falta de acción fue<br />

simplemente el resultado de importante gente negligente o ignorante de <strong>la</strong>s evidencias?<br />

¿Las operaciones de seguridad aérea de Estados Unidos fueron deliberadamente detenidas<br />

el 11 de septiembre?" Cita al anterior procurador penal federal, John Loftus, quien afirma<br />

que <strong>la</strong> extensa información brindada por los servicios secretos de Europa desechan<br />

cualquier acusación de incompetencia de <strong>la</strong> CÍA y <strong>la</strong> FBI. La bomba Maecher no cesa<br />

de explotar: "<strong>la</strong> respuesta de EU después del 11 de septiembre no fue tampoco mejor.<br />

Ningún intento serio por capturar a Bin Laden se ha hecho", y destruye en forma<br />

contundente "el montaje de <strong>la</strong> guerra contra el terrorismo global, usada ampliamente<br />

como falsa cobertura para conseguir los objetivos geopolíticos estratégicos más profundos<br />

de Washington". Ni más ni menos que <strong>la</strong> tesis de Bajo <strong>la</strong> Lupa desde hace bastante tiempo.<br />

Trae a co<strong>la</strong>ción que el Instituto Baker de Política Pública, con sede en Texas,<br />

había preparado desde abril de 2001 un reporte para el gobierno estadunidense, que "se<br />

encuentra prisionero de su dilema energético. <strong>Irak</strong> representa una influencia<br />

desestabilizadora para el flujo del petróleo de Medio Oriente a los mercados<br />

internacionales". ¿A poco mejoraron los flujos y los precios con <strong>la</strong> presencia seudo<br />

estabilizadora de <strong>la</strong> biocupación anglosajona? No se debe sos<strong>la</strong>yar que el texano James<br />

Baker III representa una de <strong>la</strong>s figuras relevantes del Grupo Carlyle. Con empleo<br />

magistral de fuentes bibliográficas, Maecher sustenta sus asertos, que demuestran <strong>la</strong><br />

hambruna energética de EU y Gran Bretaña. Así, detrás del derrocamiento del régimen<br />

talibán en Afganistán, se encuentra toda <strong>la</strong> política energética de Centro Asia y su control<br />

por medio de oleoductos "construidos desde los yacimientos petroleros de Turkeminstán,<br />

Uzbekistán y Kazajstán a través de Afganistán y Pakistán hasta el océano Indico". Cuando<br />

el régimen talibán fue confrontado por los enviados estadunidenses, el mensaje fue

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