ORKIWAN - The Field Museum
ORKIWAN - The Field Museum
ORKIWAN - The Field Museum
- No tags were found...
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
nacional, Dureno recibió finalmente un título de 9,500<br />
hectáreas en 1977. Incluyó sólo un lado del beneficioso<br />
río, el cual comprendía únicamente un tramo de menos<br />
de 10 km (ver mapa en Borman et al. 2007). También<br />
incluyó, por descuido, un pozo petrolero (el cual fue<br />
conectado en 1976, y para 1992 ya había extraído más<br />
de un millón de barriles de crudo) que contaminó el<br />
Pisorie, el único río pequeño dentro del territorio Cofan,<br />
con numerosos derrames y un flujo continuo de residuos<br />
tóxicos de producción. Los Cofan nunca vieron un<br />
solo centavo de compensación en alguna forma por la<br />
presencia de este pozo y su grado de destrucción.<br />
Más allá del petróleo<br />
Para 1979, un pequeño grupo de residentes de Dureno<br />
se involucró en actividades de turismo, lo que representó<br />
una forma no destructiva de ganarse la vida, utilizando<br />
así sus conocimientos tradicionales del bosque. Sin<br />
embargo, para encontrar bosques “buenos” que los<br />
turistas podrían apreciar, el grupo se encontró de pronto<br />
a sí mismo lejos, aguas abajo, cerca de la frontera de<br />
Ecuador con Perú. Esto significó el comienzo de la<br />
comunidad de Zábalo.<br />
Hacia 1984, el grupo involucrado en lo que hoy se<br />
conoce como “ecoturismo” estaba firmemente establecido<br />
en el nuevo centro poblado de Zábalo. Originalmente<br />
con sólo tres familias y algunos adolescentes, creció<br />
durante los siguientes diez años hasta alcanzar las 20<br />
familias y más de 100 personas. Envuelto fuertemente en<br />
ecoturismo, el grupo de Zábalo estaba también al tanto<br />
de la fragilidad del medioambiente y del impacto que<br />
la explotación petrolera podría tener en el área. Varias<br />
iniciativas locales—incluyendo las primeras leyes de caza<br />
del país, prácticas y bien obedecidas, un programa de<br />
recuperación de charapas y un sistema de zonificación<br />
para reconocer y apoyar los métodos tradicionales del<br />
uso de la tierra—fueron pioneros y eventualmente se<br />
volvieron populares en otras comunidades. Zábalo fue<br />
declarado parte de una nueva extensión de la Reserva<br />
de Producción Faunística (R.P.F.) Cuyabeno en 1991<br />
(ver Fig. 2C en el presente reporte). Los líderes de Zábalo<br />
protestaron porque ellos nunca habían sido incluidos<br />
en el planeamiento de esta extensión, y demandaron<br />
el reconocimiento legal del derecho de la comunidad<br />
a tener sus propias reglas y tierras dentro del marco<br />
de la Reserva. El reconocimiento provisional no fue<br />
otorgado antes del surgimiento de una nueva amenaza<br />
en forma de una intromisión por parte de una compañía<br />
de sísmica (sin autorización de la administración de la<br />
R.P.F. Cuyabeno).<br />
SeisComDelta obtuvo un contrato para operar una red<br />
sísmica sobre la zona que incluía el territorio reclamado<br />
por los Cofan de Zábalo. No se solicitaron permisos para<br />
el ámbito gubernamental local ni para el nacional, debido<br />
a que nunca antes lo habían necesitado. Las compañías<br />
petroleras y sus subsidiarias siempre tuvieron prioridad<br />
sobre los intereses locales, y los escasos roces que se<br />
presentaron con nativos furiosos por las invasiones de<br />
sus territorios se resolvían siempre con sobornos menores<br />
y pagos. Si la situación se les complicaba seriamente,<br />
la compañía podía siempre recurrir al gobierno para<br />
que respalde sus intereses: después de todo, contrario<br />
a la razón, como el petróleo paga las cuentas siempre<br />
debe tener derecho sobre todo lo demás. Sin embargo,<br />
SeisComDelta no había sido reconocida como una nueva<br />
fuerza dentro del escenario político. Los Cofan de Zábalo<br />
habían vivido a través del auge del petróleo que circundó<br />
a Dureno, y sabían exactamente lo que significaban las<br />
exploraciones y explotaciones petroleras sin control.<br />
También estaban penosamente concientes del peligro de<br />
una carretera, con sus colonos y madereros. Ellos estaban<br />
preparados para luchar contra una posible réplica de las<br />
actividades desenfrenadas que habían condenado su hogar<br />
en Dureno.<br />
De esta manera, en 1991 empezó la primera<br />
escaramuza entre la diminuta banda de los Cofan<br />
de Zábalo y el monstruo petrolero. Un grupo de<br />
trabajadores de sísmica arribó para hacer un helipuerto.<br />
La gente de Zábalo los arrestó, demandando que ellos<br />
mismos redactaban su autorización de gobierno para<br />
trabajar en la Reserva. Los trabajadores vociferaban<br />
y se hacían las víctimas, pero al día siguiente sus jefes<br />
los sacaron del área, instantes antes que los periodistas<br />
llegaran para cubrir la historia. La compañía petrolera<br />
envió a sus negociadores habituales para calmar las<br />
aguas turbulentas mediante baratijas, pero para su<br />
sorpresa y disgusto, los Cofan siguieron demandando la<br />
autorización, y se burlaron de los sobornos ofrecidos.<br />
ECuADOR, PERú: CuyABENO-GüEPPí JUlIO/JUly 2008 125