Extracto Libro 2_Animación Misionera

LA MISIÓN
renueva
la pastoral

Elaborado por:
Comisión Nacional
de Animación Misionera
Eva Caballero Segarra
Xabier Camino Sáez
Juan Linares Muñoz
Azucena Monge Alonso
Pilar Ponce Velasco
Camino Rivero Pérez
José A. San Martín Pérez
David Villalobos Pérez
Fco. Javier Zudaire Echávarri
Edita
Centro Nacional Salesiano de Pastoral Juvenil
C/ Alcalá, 164 - 28028 Madrid
www.pastoraljuvenil.es
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© de la edición
ARTIA comunicación S.L.
C/ Andrés Mellado 31, local 1 PB
28015 Madrid
Centro Nacional Salesiano de Pastoral Juvenil
Salesianos España
Primera edición: enero 2020
Algunos derechos reservados: Licencia Creative Commons:
Reconocimiento-Sin Obras Derivadas-No Comercial.

índice
Presentación
Introducción
La Animación Misionera en el nuevo paradigma de la misión
1. El nuevo paradigma de la misión
2. Nuevas formas y nuevos caminos
de la cooperación y la animación misioneras
3. Conclusión: el Espíritu que hace joven a la Iglesia por la misión
Pasado, presente y futuro
de la Animación Misionera en la Congregación Salesiana
1. Pasado
2. Presente
3. Futuro
Una pastoral juvenil que se renueva desde la misión:
La Animación Misionera en la Pastoral Juvenil Salesiana
1. Cuestión de foco: “misión” y “evangelización”
2. Carácter misionero de la Congregación
3. Construir y amueblar una evangelización “salesiana”
4. La Animación Misionera en el Proyecto Educativo-Pastoral
5. “El efecto mariposa”: la animación misionera en la pastoral ordinaria
6. Voluntariado misionero, ¿corazón viajero?
Inicio de una reflexión compartida
La actual Animación Misionera de los Salesianos en España
Claves para que la misión renueve la pastoral
Niveles de nuestra Animación Misionera
Reconocer, interpretar y elegir:
Una propuesta de líneas de acción para la Animación Misionera
Nos queda un desafío
pág. 4
pág. 6
pág. 9
pág. 33
pág. 47
pág. 63
pág. 65
pág. 73
pág. 85
pág. 93
pág. 100

pres
“La salida misionera
es el paradigma de toda obra de la Iglesia” (EG 15)
4
En este sentido, podemos decir que la misión renueva la pastoral. Esta afirmación
está presente en este libro de principio a fin, centra el contenido de su
reflexión y marca el horizonte de futuro.
Decir que la misión renueva la pastoral es lo mismo que decir que la misión necesita
de la pastoral y la pastoral necesita de la misión. Si la pastoral quiere ser
nueva tiene que dejarse iluminar por el espíritu misionero y si la misión quiere
dar respuestas a lo nuevo debe tener una concreción pastoral.
Nos necesitamos. Esta convicción recorre todas las páginas de este libro. El
Sínodo de 2018, que ha puesto a los jóvenes en el centro de su reflexión, ha
hablado de caminar juntos, de sinodalidad. No es posible otra manera de hacer.
La llamada a la sinodalidad propone ejercitarnos en el trabajo compartido.
Queremos caminar juntos.
Para el papa Francisco la pastoral juvenil debe ser siempre misionera. Necesitamos
misioneros valientes. “No tengan miedo de ir y llevar a Cristo a cualquier
ambiente, hasta las periferias existenciales, también a quien parece más lejano,
más indiferente. El Señor busca a todos, quiere que todos sientan el calor de
su misericordia y de su amor. Y nos invita a ir sin miedo con el anuncio misionero,
allí donde nos encontremos y con quien estemos, en el barrio, en el estudio,
en el deporte, en las salidas con los amigos, en el voluntariado o en el trabajo,
siempre es bueno y oportuno compartir la alegría del Evangelio” (ChV 177).

entación
presentación
Este tiempo de la historia es misionero, como ha sido misionera cada época
la historia de la Iglesia. La llamada a la misión ha estado muy presente en el
proceso de discernimiento que los Salesianos de España hemos tenido, preguntándonos
cómo plantear la Animación Misionera. Un proceso de discernimiento
es un camino. Ya hemos recorrido algunas etapas de este camino:
la etapa de preparación del Seminario y la celebración del mismo. El Seminario
ha sido un momento muy significativo en este proceso. Lo ha sido por la
escucha mutua, por la oración compartida, por la búsqueda de los mejores
caminos iluminados por la Palabra de Dios, el camino de la Iglesia y el de la
Congregación, por la alegría y la esperanza que vivimos al participar de una
causa grande. Todo esto se ve reflejado en este libro.
5
Pero el camino de discernimiento no está concluido. Iniciamos una etapa nueva
que se va a caracterizar por la acogida de esta reflexión y su puesta en
práctica. La Animación Misionera dibujada en estas páginas debe concretarse
en acciones pastorales claras. La etapa que ahora iniciamos hará que nuestra
pastoral sea más rica. Ojalá podamos seguir la ruta de alegría y de esperanza
que en el Seminario hemos vivido.
Juan Carlos Pérez Godoy y Ángel Asurmendi Martínez
Provinciales de las Inspectorías salesianas de España

• Proponer caminos de futuro:
1. Concretando iniciativas para una animación misionera integral.
2. Impulsando el carácter vocacional y misionero de cada cristiano.
3. Proponiendo procesos formativos misioneros.
4. Dejando ver una organización pastoral que integre la Animación Misionera
y la Dimensión Vocacional.
5. Teniendo una incidencia socio-política en nuestro mundo.
Como parte de la iluminación se plantearon tres ponencias. La primera, “La
Animación Misionera en el nuevo paradigma de la misión” (Roberto Calvo). La
segunda, “Pasado, presente y futuro de la Animación Misionera en la Congregación
Salesiana” (Gianni Rolandi). La tercera, “Una pastoral juvenil que se
renueva desde la misión. La Animación Misionera en la Pastoral Juvenil Salesiana”
(Miguel Ángel García Morcuende).
8
Cabe destacar la rica participación a nivel de las dos inspectorías de España.
Las reflexiones y propuestas que aquí recopilamos provienen del trabajo de
dichos participantes.
Siempre consideramos que el Seminario era “el comienzo” de una reflexión
para poder formular un buen programa de animación misionera que queremos
realizar a nivel nacional, muy unido a la reflexión hecha en el Seminario de
Animación Vocacional de octubre de 2017.
Asumimos el reto que el Seminario nos ha planteado: “La misión renueva la
pastoral”. Es el camino que nos corresponde hacer ahora.
la misión renueva la pastoral

PONENCIA
«La Animación
Misionera en el nuevo
paradigma de la
misión»
ROBERTO CALVO PÉREZ
Facultad de Teología del Norte de España (Burgos)
9
Una reflexión teológica sobre la misión debe arrancar de los datos de la revelación
y debe tener en cuenta las aportaciones del magisterio de la Iglesia,
pero a la vez debe realizarse desde la experiencia real de la Iglesia y desde las
circunstancias e interpelaciones de la historia.
A lo largo de los siglos la misión de la Iglesia ha ido adquiriendo figuras, paradigmas
o configuraciones diversas, por lo que hay que saber distinguir el
elemento permanente y la diversidad de sus manifestaciones históricas. El
discernimiento teológico debe poner de relieve el aliento de fondo, la motivación
fundamental, que es la que debe conservarse y mantenerse dentro de las
modalidades que ha de adoptar en la actualidad y en el futuro 1 .
Debe tenerse presente la peculiar relación que existe entre la “figura de la misión”
y la “figura de la Iglesia”: según sea la concepción y la articulación de la
Iglesia así será el modo de misión que se lleve adelante; del mismo modo se puede
afirmar que el modo (y las exigencias) de la misión va marcando con su peculiar
impronta el modo de vivirse y presentarse la Iglesia en cada momento histórico.
1. Cf. E. BUENO DE LA FUENTE, La Iglesia en la encrucijada de la misión, Verbo Divino, Estella 1999.

El ejercicio de la misión es por ello íntimamente dinámico. Es lo que mantiene
la vitalidad y la permanente juventud de la Iglesia: es la que de modo más directo
la enraíza en la historia de los hombres y a la vez la que en mayor medida
muestra su capacidad de ser fiel al designio de Dios sobre la historia. La misión
por ello es siempre una instancia profética e interpelante en el seno de las
diversas comunidades eclesiales, como exigencia permanente de fidelidad a la
tarea para la que ha sido llamada a la existencia.
En la actualidad deben ser tenidas en cuenta fundamentalmente dos perspectivas
para comprender la misión y el sentido que la misión juega en la identidad
de la Iglesia. Desde esta doble coordenada la Iglesia actual puede y debe
recoger la aportación de su pasado histórico y a la vez la frescura de su identidad
teológica:
10
• El proceso actual de globalización sintetiza una nueva experiencia de la
universalidad y a la vez un desafío o interpelación que no puede ser afrontado
más que de modo global: la humanidad en su conjunto está en proyecto
de escribir de modo unitario su historia (al menos desde el punto de
vista de los vencedores): ¿cómo hacer presente la semilla del evangelio y
sus exigencias de fraternidad y de solidaridad? La actual experiencia de
una “Iglesia mundial” y la realidad de una Iglesia como comunión de iglesias,
resultado de la historia misionera de la Iglesia, ofrece un presupuesto
y una plataforma.
• La reconfiguración religiosa de la humanidad, que va haciendo cada vez
más difícil la identificación de una religión con un área cultural o geográfica.
Por un lado las religiones están más cercanas y se mezclan en muchos
lugares del mundo. Por otro lado, a nivel de las iglesias occidentales, se
produce un proceso de descristianización o de paganización que resitúa a
las comunidades eclesiales en una situación marcadamente distinta. Para
ello ha de identificar su testimonio peculiar entre los pueblos y ante los no
cristianos, y descubrir que cada comunidad eclesial existe en la dinámica
de la evangelización.
A fin de profundizar en nuestro tema presentamos dos grandes apartados: I.
El nuevo paradigma de la misión, y II. Nuevos caminos y nuevas formas de la
cooperación y animación misioneras, porque no puede olvidarse que cada vez
van más unidas cooperación y animación misioneras, como veremos y ambas
se han ir modulando desde el nuevo paradigma misionero que está surgiendo.
la misión renueva la pastoral

La Animación Misionera en el nuevo paradigma de la misión
1. El nuevo paradigma de la misión
1.1. La época de las misiones extranjeras
Como contrapunto y punto de partida para comprender el sentido de nuestra
reflexión ha de servirnos la “figura” de las misiones extranjeras. Es importante
fijarse en el significado y en la novedad de las dos palabras, pues es la que
subyace a la comprensión de una gran mayoría de cristianos 2 .
El término “misión” o “misiones” en el sentido que lo usamos es un fenómeno
relativamente reciente (inicios del siglo XVI). Hasta ese momento, para
designar la expansión de la Iglesia y el anuncio del evangelio, se hablaba de
propagación de la fe, conversión de los gentiles, promulgación del Evangelio…
Los jesuitas introdujeron el “voto de misiones” para expresar la disposición a
aceptar cualquier destino (misión) que el Papa les encomendara. Podía designar
también al trabajo entre herejes o cismáticos. Por eso se fue aplicando
también a una actividad que en aquellos momentos estaba adquiriendo gran
importancia: la acción evangelizadora entre los no cristianos que se encuentran
en tierras lejanas y distantes.
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Efectivamente en aquellos años se estaba realizando la gran ampliación geográfica,
a raíz de los viajes de españoles y portugueses. Era una encrucijada
de la historia humana. La Iglesia, a través de los cristianos, supo estar presente
en la dinámica dominante en aquella circunstancia. Por eso esa “misión
evangelizadora” va a quedar marcada por la lejanía, la distancia, el exotismo, el
riesgo, la aventura.
En la teología subyacente se pueden destacar los siguientes aspectos fundamentales:
• el cristianismo, como única religión verdadera, es el único camino de salvación:
hay una visión muy negativa de las posibilidades de salvación de los
miembros de otras religiones, y por ello resultaba tan urgente el bautismo;
• se identifica Iglesia y Reino de Dios, de modo que las misiones adquieren
un tono fuertemente eclesiocéntrico;
2. Cf. E. BUENO DE LA FUENTE, La misión hoy: las tensiones del cambio de paradigma, en M.
REUS CANALS s.j., (ed.), Evangelización y misión. Retos actuales del sueño inacabado de San
Francisco Javier, Universidad de Deusto, Bilbao 2006, 13-38.

porque ésta es la tarea primordial de la Iglesia, que ha sido enviada a todos
los pueblos, hasta los confines de la tierra. Sin la misión ad gentes la misma dimensión
misionera de la Iglesia estaría privada de su significado fundamental
y de su actuación ejemplar” (RMi 34).
El papa Francisco se pregunta: “¿Qué sucedería si nos tomáramos realmente
en serio estas palabras? Simplemente reconoceríamos que la salida misionera
es el paradigma de toda obra de la Iglesia” (EG 15). La misión en su sentido
específico, como “paradigma por excelencia”, es el modo/praxis que nos proporciona
una nueva forma de pensar la realidad y la Iglesia, que nos exige
discernirla desde la misión del Hijo y la misión del Espíritu y que ha de llevar a
cada iglesia local (y a todos sus miembros, comunidades e instituciones) a actuar
en consecuencia: tomarse en serio la conversión pastoral desde la lógica
misionera.
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La misión es el dinamismo de la fecundidad permanente del cuerpo eclesial y,
a su vez, la Iglesia es fecunda porque en ella ha irrumpido misteriosamente la
fecundidad misma de Dios en su Trinidad. Esto quiere decir que la Iglesia goza
de la perenne fecundidad de Dios y Dios es perennemente joven. Él es la Vida y
el Amor que jamás puede mostrar los signos de la esterilidad, la decrepitud o la
muerte. Esta misteriosa y profunda juventud, que procede de Dios, hace que
la Iglesia sea siempre joven. Y, por eso, es también siempre misionera, dotada
de una perenne fecundidad.
La misión es, por tanto, la manifestación de la juventud esencial de la Iglesia. Y,
a pesar de que en determinados tiempos y circunstancias parece obscurecerse
o frenarse el dinamismo misionero, siempre, de una y otra forma, aquí o allá,
vuelve a brotar el ímpetu de la misión, porque el Espíritu Santo “rejuvenece a
la Iglesia con la fuerza del Evangelio, la renueva incesantemente y la conduce
a la unión consumada con su Esposo” (LG 4).
Y esa juventud sólo se recobrará de forma adecuada cuando se desarrolle
una animación misionera específica y ministerial que haga posible y real esa
co-operación misionera que buscamos como respuesta a lo que el Espíritu
pide a nuestras iglesias en los albores de este nuevo milenio. Así, la misión se
verá alentada y las iglesias adquirirán el ánimo pentecostal del que cada una
ha surgido.
la misión renueva la pastoral

PONENCIA
Pasado, presente
y futuro de la
Animación Misionera
en la Congregación
Salesiana
Gianni Rolandi, SDB
Miembro del Dicasterio de Misiones de los Salesianos de Don Bosco
33
Hablando hoy de “misión”, “misiones” y “animación misionera”, somos muy
conscientes de que estamos en un momento de transición.
Venimos de una época en la que pensábamos que todos estos términos tenían
un significado unívoco muy claro y estamos avanzando hacia un cambio,
aunque no todos estén de acuerdo, en lo que realmente resultará ser el
nuevo escenario.
Una cosa está clara: quienquiera que piense que la “missio ad gentes” ha terminado
no ha entendido realmente lo que somos los Salesianos de Don Bosco.
1. Pasado
En el pasado, hablábamos claramente de “misiones salesianas”. El Manual del
Delegado Inspectorial para la Animación Misionera (DIAM) de 1997 fue elaborado
por el Dicasterio de Misiones Salesianas. Ofrece un interesante trasfondo
para entender la tradición misionera de nuestra Congregación.

4. Conclusión
Missio ad gentes, ad exteros, ad vitam es parte integral del carisma salesiano
desde el principio, y brotan de la mente y el corazón de Don Bosco. Si bien
la animación misionera salesiana en el contexto de hoy está indudablemente
adquiriendo una variedad de matices, en relación con la misión salesiana en su
conjunto, este aspecto específico nunca puede estar ausente, ya que es “la
expresión más viva y generosa de la vocación de todos” (Viganò E., “Llamada
del Papa en favor de las misiones” en ACG 336 [1991], pp. 5-12).
A modo de comparación, diría que, al igual que en la Congregación Salesiana,
las dos formas de la misma vocación – el coadjutor y el sacerdote – son recíprocas
y se recuerdan la una a la otra un aspecto específico que es esencial
para la vocación salesiana en su totalidad; de la misma manera, los hermanos
que descubrieron que están llamados a ser misioneros ad gentes, ad exteros,
ad vitam recuerdan a todos los demás lo que es ser salesiano de Don Bosco,
sin importar en qué parte del mundo se viva ni en qué apostolado se esté
comprometido en la práctica diaria.
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Puede que no seamos una de las “Congregaciones típicamente misioneras” en
la Iglesia, pero este específico aspecto misionero define quiénes somos en la
profundidad de nuestro carisma.
la misión renueva la pastoral

PONENCIA
La Animación
Misionera en la
Pastoral Juvenil
Salesiana
Miguel Ángel García Morcuende, SDB
Miembro del Dicasterio de Pastoral Juvenil (2010-2017)
47
El título que viene propuesto para esta reflexión me sugiere dos estímulos.
Por una parte, se nos pide profundizar una pastoral pensada y vivida en clave
misionera donde la misión de la iglesia es la razón de ser de toda acción pastoral;
la conciencia de que somos misioneros por el hecho de ser cristianos. Y
es que la actuación de la misión no es proselitismo o mera estrategia; es parte
de la “gramática” de la fe: quien sigue a Cristo se convierte necesariamente en
misionero, y sabe que Jesús “camina con él, habla con él, respira con él. Percibe
a Jesús vivo con él en medio de la tarea misionera” (Evangelii gaudium, 266).
Toda pastoral, por tanto, es misionera, siempre y en todo lugar. Cada Comunidad
Educativo-Pastoral se halla en misión, sin distinción de colocación geográfica,
situación religiosa o contexto cultural. Todo cristiano, doquiera esté o
trabaje, es enviado al mundo, a los que lo rodean para anunciar el Evangelio.
Signo y concentración de esta dimensión de la Iglesia es la vocación y el servicio
de aquellos que dejan su tierra para dedicarse a anunciar a Jesucristo a
los pueblos que aún no lo conocen o donde la comunidad cristiana necesita
ser sostenida. Por eso, las misiones se dan en todo el mundo. Países de misión
los hay en Europa y lo son casi todos. Verdaderas misiones, hicieron y hacen

La cooperación en la misión universal por parte de los jóvenes incluye ineludiblemente
las acciones positivas para transformar eficaz y radicalmente el
mundo y construir la nueva civilización del amor, de la verdad y de la justicia
que Cristo nos ha traído. En el seno de la Iglesia se realiza otra cooperación
misionera de gran alcance: la oración. Su valor se explica fácilmente; es un
medio de cooperación asequible a todos los creyentes, de cualquier edad y
condición. En verdadero diálogo con Dios, el joven se implica con indiscutible
eficacia en la misión de la Iglesia, explicitando y elevando al cielo los deseos
propios de su condición de creyente, de su afán evangelizador y de su deseo
de lograr un mundo más justo y solidario.
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Sentimos gran responsabilidad respecto al ministerio que se nos ha confiado
como Salesianos de Don Bosco y nos mueve un gran deseo de responder con
empeño y creatividad, con la alegría de las mujeres del Evangelio que corren
para dar el anuncio de la Resurrección, personas portadoras de Esperanza en
una realidad empapada de miedos; voz profética en muchos países. Poner por
escrito estas líneas ha requerido un gran esfuerzo, pero ha sido gratificante
sentir que es una pequeña contribución para el crecimiento del Reino de Dios
y para la misión salesiana hoy.
la misión renueva la pastoral

REFLEXIÓN
Inicio de una
reflexión compartida
Tal como estaba programado en el Seminario, después de la iluminación recibida
con las tres ponencias, se inicia una serie de trabajos tanto en grupos
como en asamblea con la finalidad de enriquecer el concepto de Animación
Misionera que hemos de tener hoy, y con la idea de vislumbrar un camino
a seguir para que esta dimensión de nuestra pastoral sea hecha realidad en
nuestros ambientes con la fuerza que le corresponde.
En primer lugar, fue presentada la realidad de la Animación Misionera en los
niveles inspectorial y nacional. Así éramos conocedores de los programas y
de las acciones que en los diferentes niveles de nuestra pastoral se estaban
realizando.
63
Conocedores ya de las ponencias presentadas, conscientes de toda la riqueza
que contienen, fue necesario descubrir las ideas fuerza que había en ellas para
que iluminasen el camino que nos íbamos a proponer a seguir. Y, conociendo
también nuestra actual realidad de animación misionera, fue preciso detectar
tanto nuestras fortalezas como nuestras debilidades en la praxis actual.
Metidos ya en materia entramos de lleno en la temática del seminario y mediante
una dinámica en cuatro “stands” se fueron compartiendo las inquietudes
de los participantes desde el nivel local, inspectorial, nacional y congregacional.
Finalmente, mediante la metodología del “reconocer, interpretar y elegir”, los
participantes en el seminario ofrecieron una propuesta de líneas de acción
para la Animación Misionera que nos pueden ser de gran utilidad.
En el Seminario fuimos conscientes, en todo tiempo, que la aportación que
se pretende dar es simplemente un inicio y una provocación para continuar
tanto la reflexión como la praxis del eje transversal de nuestra pastoral tan
importante como es su dimensión misionera.

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REFLEXIÓN
La actual Animación
Misionera de los
Salesianos
en España
65
Para tomar conciencia de cuál es la realidad de la actual Animación Misionera
a nivel nacional se presentó, de una manera sencilla, la situación de la animación
misionera en las Inspectorías de España. Siguiendo un mismo esquema,
cada inspectoría ofreció los resultados obtenidos de un formulario ofrecido a
nuestras Casas.
En esta presentación se indica cuál es la presencia de animación misionera
y su coordinación, su implicación en la CEP, su vinculación con los diferentes
ambientes y su papel en el PEPS local. Se manifiestan los retos que nos
plantea la animación misionera hoy y cada inspectoría, llega a sus propias
conclusiones.
A nivel nacional, la Procura manifiesta que desde sus dos secciones, Misiones
Salesianas y Jóvenes y Desarrollo, realiza una serie de programas como es la
acogida de misioneros, la implementación de proyectos de desarrollo, programas
de cooperación para el desarrollo y ciudadanía global, experiencias de
voluntariado, comunicación y campañas sensibilización de marketing.

1. Animación Misionera en SMX
FCO. JAVIER ZUDAIRE ECHÁVARRI, SDB
Delegado Inspectorial de Animación Misionera SMX
Vista la respuesta de los directores de comunidad a la encuesta enviada entre
febrero y primeros días de marzo de este año, sobre la situación de la Animación
Misionera (AM) en nuestras casas y teniendo en cuenta que han respondido
poco más de la mitad, presentamos la realidad de la AM en nuestra
inspectoría.
La AM existe en general en nuestras casas como tal, y en las pocas que no, señalan
que participan en algunas campañas de recogida de fondos como las del
DOMUND, Manos Unidas o las campañas de VOLS, la ONG salesiana del lugar.
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Normalmente es la Pastoral Juvenil a, a través del Coordinador Local Pastoral
o de la Pastoral Escolar quien se encarga de su coordinación a nivel local. En
algunos casos son los directores quienes se ocupan de la misma, o alguna de
las ONGD salesianas. Con una buena implicación de la Comunidad Educativo-Pastoral
en esta tarea de AM.
Al hablar de los ambientes pastorales de la Casa a los que está vinculada la
AM, destacan las escuelas y la parroquia. En un tercio de las Casas aparece en
los cuatro ambientes (Escuelas, Parroquias, CC.JJ., Plataformas Sociales). Aquí
en ningún caso se mencionan las ONGD. Cierto es, que no están consideradas
como un ambiente propiamente dicho, si no como una opción transversal.
Al ser planteada como una opción transversal, la AM no aparece como tal,
reflejada en el PEPS de la Casa. Esta transversalidad hace que la AM sea algo
que “está ahí” de manera difusa, sin concretarse en el PEPS, excepto en tres
Casas. Varias comunidades señalan que falta ser conscientes de la prioridad
misionera.
La AM está más asociada a la Solidaridad. En los PEPS de las casas está reflejada
la sensibilidad solidaria. Pero falta el aspecto misionero - evangelizadorapostólico.
Se reduce a alguna campaña solidaria y alguna exposición puntual.
Traemos aquí la aportación de una Casa, porque nos parece un buen ejemplo
de lo que debería ser: “Tras aparecer en el PEPS de toda la Obra, la Animación
la misión renueva la pastoral

Seminario de Animación Misionera
Misionera se concreta luego a su vez en los Planes de los diferentes Ambientes
presentes en la Obra y los grupos a su vez planifican objetivos y actividades
para desarrollarlos”.
Además de las distintas campañas solidarias la AM se concreta también en el
voluntariado y Educación para el Desarrollo, sin ser actividades exclusivas en
ningún caso, siempre llevadas a cabo junto a las campañas.
Volvemos a traer la aportación de la Casa anterior, que explica como concreta
la AM: “En el caso de la Pastoral del Ambiente escuela se dedican varias Campañas
Solidarias a lo largo del curso, siendo la del Primer Trimestre donde
además se hace un trabajo más explícito de animación misionera, llevando 3
cursos invitando a algún misionero/a a través de la Delegación Diocesana de
Misiones que comparte con todas las etapas educativas su testimonio (en el
marco de la celebración del 24 de octubre y en torno al Domund). En el caso
del Ambiente Plataformas, tanto Fundación como especialmente la ONGd,
trabajan esa línea de forma más directa si cabe. En nuestra Casa existe Sede
de Solidaridad Don Bosco que participa de la Coordinadora Malagueña de
ONG, que colabora con muchas de las Campañas Solidarias y con las actividades
de la Casa y además anima un grupo de Espiral Solidaria”.
Retos que nos plantea la Animación Misionera hoy
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Según todo lo anterior, los retos que nos plantea hoy la Animación Misionera
a la Inspectoría de María Auxiliadora son múltiples y variados. Pasamos a
enumerarlos:
• Dar una perspectiva más religiosa, desde la fe a la AM, que no se reduzca
al aspecto solidario. Que las ONG “no se coman” esta dimensión.
• Más coordinada con la Pastoral Juvenil y que esté dentro de este ambiente,
(de hecho ya lo está), concretamente con los grupos de fe.
• La sensibilización, de distintas formas. “Dar una respuesta aquí a la gente
y la realidad de allí”.
• Sentir la misionariedad como algo propio y ser testigos entusiasmados de
la misma. También poder contar con testimonios de misioneros convencidos,
que vengan a las casas y hablen a y con los chicos y los educadores.
• No se puede ceñir a trabajar con los misioneros, especialmente en la Campaña
del Domund. Debe estar impregnando toda la Acción Pastoral.
• Integrar la Dimensión misionera en Países del Sur con la dimensión misionera
aquí.

• Implicar a la Comunidad Educativo Pastoral para que la conciencia misionera
vaya más allá de las ONG y de las campañas solidarias.
Conclusiones
La AM está presente en nuestras Casas, vinculada principalmente a la Pastoral
Juvenil.
En las comunidades en las que hay implicación, suele ser principalmente en
campañas, que sería la parte más asistencialista de la AM. También hay un
número creciente de comunidades en las que cada vez se llevan a cabo más
actividades de AM.
Existe una preocupación generalizada por la deriva, más solidaria que religiosa
que está teniendo la AM y se ve, mayoritariamente como un reto que la AM
esté dentro de esa dimensión de fe, de envío y de misión que nos pide Jesús.
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Seminario de Animación Misionera
2. Animación Misionera en SSM
Xabier Camino sáez, SDB
Delegado Inspectorial de Animación Misionera SSM
El formulario preparado por la Comisión Nacional de Animación Misionera se
hizo llegar a las 54 Casas salesianas de la Inspectoría Santiago el Mayor (SSM).
Fueron 46 Casas las que cumplimentaron el cuestionario: el 83,6% de la Inspectoría.
Sabiendo que algunas Casas de SSM tienen una función y un servicio pastoral
singular (Casa Inspectorial, Casa Don Bosco, Comunidad del Teologado,
Residencia La Pagoda…), detectamos que había existido un interés generalizado
por el tema y que no se había visto como algo extraño sobre lo que no
saber qué decir.
Presencia de la Animación Misionera en las Casas.
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Una vez estudiados los datos recogidos en el formulario, se confirmaba que
todas las Casas salesianas tienen alguna vinculación o realizan actividades
vinculadas a la Animación Misionera. Sin embargo, sólo el 57% lo entienden
como Animación Misionera. Todas las Casas son críticas con respecto a dicha
vinculación o actividades, y además muestran ambiciones, entendiendo que
aún se puede hacer mucho más.
Coordinación local de la Animación Misionera.
En 18 de las 46 Casas la coordinación local de este ámbito depende del Coordinador
de Pastoral Juvenil. En un total de 25 Casas existe una clara implicación
de la Pastoral Juvenil (a través del propio Coordinador, del Equipo de Pastoral
Juvenil, del Consejo de la CEP…).
Valoración de la implicación de la CEP en la Animación Misionera.
En resumen, las respuestas arrojan un empate técnico que nos hace pensar
que queda mucho por mejorar si queremos que exista una buena implicación
en todas las CEP de la Inspectoría.

Nos queda
un
desafío
Estas aportaciones del Seminario de Animación Misionera son,
sencillamente, un material que la Comisión Nacional de Animación Misionera
ofrece a todos los agentes de pastoral de la presencia salesiana en España.
Son, ciertamente, unas aportaciones consensuadas, fruto del trabajo
realizado por un grupo muy significativo de nuestras inspectorías que
fuimos los que participamos en dicho Seminario.
Cada cual puede utilizar este folleto y este material como lo crea
conveniente. Está concebido como un aporte que enriquezca los niveles
local, inspectorial, nacional y congregacional de este eje transversal de
nuestra pastoral.
El desafío que proponemos va dirigido a toda nuestra pastoral y viene
expresado en el título de nuestro Seminario “La misión renueva la pastoral”.
Animamos a todos a dar continuidad a este primer paso dado con el
seminario, pues nos queda un largo camino por recorrer.
¡Somos apóstoles misioneros!