El principe Lestat - Anne Rice

09.12.2015 Views

—Muy bien —dije—. He venido a ayudar. He venido a averiguar lo que pudiera. —¡Ni una palabra más! Sé por qué has venido —dijo—. Debes irte. Te entiendo. Yo habría hecho lo mismo en tu lugar. Pero debes decirles a los demás que no vengan a buscarnos nunca más. Nunca. ¿Acaso crees que yo trataría de hacerte daño, a ti o a cualquiera de los demás? Mi hermana jamás haría algo así. Ella nunca dañaría a nadie. Vete ya. —¿Y qué hay de Pacaya, del volcán? —pregunté—. No puedes hacer eso, Maharet. No podéis arrojaros al volcán, tú y Mekare. No nos puedes hacer eso. —¡Lo sé! —dijo ella. Casi era un

gemido. Un gemido terrible de angustia. Un profundo gemido salió también de la garganta de Mekare, un gemido horroroso, como si su única voz la tuviera en el pecho. Se volvió de repente hacia su hermana, alzando las manos, aunque solo un poco, y enseguida las dejó caer, como si no supiera bien cómo manejarlas. —Déjame hablar contigo —le supliqué. Jayman venía hacia nosotros, y Mekare se giró bruscamente, fue a su encuentro y apoyó la cabeza en su pecho; él la envolvió en sus brazos. Maharet me miraba fijamente. Le temblaba la cabeza; gemía como si sus

—Muy bien —dije—. He venido a<br />

ayudar. He venido a averiguar lo que<br />

pudiera.<br />

—¡Ni una palabra más! Sé por qué<br />

has venido —dijo—. Debes irte. Te<br />

entiendo. Yo habría hecho lo mismo en<br />

tu lugar. Pero debes decirles a los demás<br />

que no vengan a buscarnos nunca más.<br />

Nunca. ¿Acaso crees que yo trataría de<br />

hacerte daño, a ti o a cualquiera de los<br />

demás? Mi hermana jamás haría algo<br />

así. <strong>El</strong>la nunca dañaría a nadie. Vete ya.<br />

—¿Y qué hay de Pacaya, del volcán?<br />

—pregunté—. No puedes hacer eso,<br />

Maharet. No podéis arrojaros al volcán,<br />

tú y Mekare. No nos puedes hacer eso.<br />

—¡Lo sé! —dijo ella. Casi era un

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!