El principe Lestat - Anne Rice
lo sabía. Me llamo Amel».
27 Lestat ESPEJITO, ESPEJITO En cuanto cayó el crepúsculo, salí a las ondas con Benji. La Voz me había susurrado palabras furibundas cuando yo había despertado, pero ahora permanecía en completo silencio. Estábamos en el estudio del cuarto piso, lleno de micrófonos, centralitas y ordenadores, en compañía de Antoine y Sybelle. Este se ocupaba de los teléfonos.
- Page 1602 and 1603: pero no vi sino expresiones comunes
- Page 1604 and 1605: y su propio pellejo. Rhoshamandes n
- Page 1606 and 1607: lentamente, desvió la mirada. —H
- Page 1608 and 1609: por el césped que ardían con llam
- Page 1610 and 1611: embriagadora. El cielo brillaba en
- Page 1612 and 1613: en los días espantosos de revoluci
- Page 1614 and 1615: —Padre —susurró. Asentí, sin
- Page 1616 and 1617: Entonces vi a Mekare muy cerca. Ros
- Page 1618 and 1619: ninguno, tenía ya. —¡Una tumba!
- Page 1620 and 1621: orden. —Bueno, yo todavía no he
- Page 1622 and 1623: 26 Lestat REHENES DE LA FORTUNA Hab
- Page 1624 and 1625: la pintura reciente. Como es habitu
- Page 1626 and 1627: escuchar, porque lo cierto es que p
- Page 1628 and 1629: empezado a recibir clases de Histor
- Page 1630 and 1631: los siglos. En fin, Benedict es cr
- Page 1632 and 1633: aparecido en el descansillo de la e
- Page 1634 and 1635: que ella me ha confundido contigo.
- Page 1636 and 1637: ienintencionados pueden matar a los
- Page 1638 and 1639: sospecho que la mayoría de bebedor
- Page 1640 and 1641: agudizado la atracción que Viktor
- Page 1642 and 1643: le hacía falta descansar. Pero aú
- Page 1644 and 1645: sentido. No: debía pensar en nosot
- Page 1646 and 1647: sobrellevado los acontecimientos de
- Page 1648 and 1649: decisión, si quieres, y luego ya s
- Page 1650 and 1651: Estaba convencido de que la Voz emp
- Page 1654 and 1655: Yo me sentía muy orgulloso de mi a
- Page 1656 and 1657: era el espíritu que animaba a todo
- Page 1658 and 1659: malhechores, nunca a los inocentes.
- Page 1660 and 1661: destruirnos unos a otros. Eso nunca
- Page 1662 and 1663: —Esto es el principio —dije—.
- Page 1664 and 1665: Benedict iban a ser liberados. Hab
- Page 1666 and 1667: ofendía esta reunión tan civiliza
- Page 1668 and 1669: esos pensamientos. Así que este ne
- Page 1670 and 1671: desordenado, en el edificio central
- Page 1672 and 1673: dispuesto. Y así se lo he comunica
- Page 1674 and 1675: ahora también noto cuándo está a
- Page 1676 and 1677: —Pero ¿él lo desea? —pregunt
- Page 1678 and 1679: —¿Y si lo hago con un poco de ce
- Page 1680 and 1681: entrada —dijo—: llevaré a cabo
- Page 1682 and 1683: Se levantó de la mesa y me exhort
- Page 1684 and 1685: pero lo noto cuando no soy yo mismo
- Page 1686 and 1687: la chimenea. Estaba pensando en las
- Page 1688 and 1689: volvía a expandirse sin adquirir u
- Page 1690 and 1691: Adquirió ante mis ojos el tamaño
- Page 1692 and 1693: labios. Ahora el espejo entero esta
- Page 1694 and 1695: en las hojas, en los arbustos. —
- Page 1696 and 1697: fibra mi ser, presionando el crista
- Page 1698 and 1699: con las manos entrelazadas bajo el
- Page 1700 and 1701: —¿Qué otra posibilidad puede ha
27<br />
<strong>Lestat</strong><br />
ESPEJITO, ESPEJITO<br />
En cuanto cayó el crepúsculo, salí a<br />
las ondas con Benji. La Voz me había<br />
susurrado palabras furibundas cuando yo<br />
había despertado, pero ahora<br />
permanecía en completo silencio.<br />
Estábamos en el estudio del cuarto<br />
piso, lleno de micrófonos, centralitas y<br />
ordenadores, en compañía de Antoine y<br />
Sybelle. Este se ocupaba de los<br />
teléfonos.