El principe Lestat - Anne Rice
22 Gregory TRINITY GATE HEREDARÁS EL VIENTO Gregory no podía por menos de admirar al enigmático Lestat. Dejando aparte que estaba enamorado de él. ¿Quién no iba a admirar a una criatura con un porte tan perfecto, con un sentido tan depurado de lo que debía decirle a cada bebedor de sangre que se le acercaba: una criatura que podía demostrar una infinita ternura mientras
abrazaba a Rose, su protegida humana, y, acto seguido, interpelar con furia a Seth, al poderoso Seth, exigiendo que le explicara cómo y por qué había expuesto a aquellos «niños mortales» a semejante desastre? Y luego, con qué facilidad había llorado al saludar a Louis y Armand, y a su neófito, Antoine, a quien había dado por perdido hacía mucho, y que estaba viviendo y triunfando aquí con Benji y Sybelle. Con qué consideración había cogido a Antoine de la mano mientras este tartamudeaba y temblaba y trataba de expresarle su amor; con qué paciencia lo había besado y le había asegurado que tenían muchas noches por
- Page 1412 and 1413: había borrado en su fuero interno
- Page 1414 and 1415: Rose sabía que Viktor tenía razó
- Page 1416 and 1417: nacimiento y la muerte. —La alegr
- Page 1418 and 1419: Viktor. Se habían acurrucado de la
- Page 1420 and 1421: con el paso de los años. Miró a L
- Page 1422 and 1423: la vida misma bullía a su alrededo
- Page 1424 and 1425: iba al suelo, Rose notó que caía
- Page 1426 and 1427: hacia Rose y se acercó a ella, per
- Page 1428 and 1429: dormitorio y la depositaba con sumo
- Page 1430 and 1431: en voz baja. Notó que Louis le pon
- Page 1432 and 1433: 21 Rhoshamandes LA ESTRATAGEMA DEL
- Page 1434 and 1435: inmediatamente a través de las ond
- Page 1436 and 1437: secuestrado a uno de los nuestros.
- Page 1438 and 1439: de hundir el machete en el cráneo
- Page 1440 and 1441: varias mantas mullidas, y una almoh
- Page 1442 and 1443: paranormales. Rhoshamandes no creí
- Page 1444 and 1445: jirones sus despojos. Y lo haré de
- Page 1446 and 1447: abrumador y la había depositado so
- Page 1448 and 1449: que no le molestaba el pañuelo de
- Page 1450 and 1451: Maharet. Rhosh ya se había cansado
- Page 1452 and 1453: como los vientos de los mares del n
- Page 1454 and 1455: tu energía giran dentro de ti con
- Page 1456 and 1457: nunca he torturado a un ser humano.
- Page 1458 and 1459: a arrojarse con su hermana en el vo
- Page 1460 and 1461: tumba de escasa profundidad; la cas
- Page 1464 and 1465: delante para estar juntos, ellos y
- Page 1466 and 1467: duda. ¿Cómo se las había arregla
- Page 1468 and 1469: estaban junto a Gregory, daban mues
- Page 1470 and 1471: Rose, la tierna y aterrorizada Rose
- Page 1472 and 1473: semejante entusiasmo. Desafiando la
- Page 1474 and 1475: tuvieran paciencia. En torno a Greg
- Page 1476 and 1477: años que había sido cuando recibi
- Page 1478 and 1479: hacía falta para salir allí y hab
- Page 1480 and 1481: estadios deportivos. ¡Uuuh, uuuh,
- Page 1482 and 1483: derecha, Lestat retrocedió poco a
- Page 1484 and 1485: Arjun con tono educado, acercándos
- Page 1486 and 1487: 23 Lestat UNA MULTITUD DE CONSEJERO
- Page 1488 and 1489: esperando sin decir palabra. Daniel
- Page 1490 and 1491: seguir lo que ocurra aquí. Tú des
- Page 1492 and 1493: permanecían en un lado, junto a la
- Page 1494 and 1495: similar, estaba Daniel, ahora total
- Page 1496 and 1497: esto —dijo Sevraine. Otra bebedor
- Page 1498 and 1499: —No saldrá de aquí nada efectiv
- Page 1500 and 1501: En el fondo de mi mente, surgió fu
- Page 1502 and 1503: elegido para ejercer la voluntad de
- Page 1504 and 1505: —Es un bebedor de sangre que nunc
- Page 1506 and 1507: noches oscuras de los comienzos, al
- Page 1508 and 1509: los jóvenes y los débiles, y que
- Page 1510 and 1511: altos y ceñidos y una larga ringle
abrazaba a Rose, su protegida humana,<br />
y, acto seguido, interpelar con furia a<br />
Seth, al poderoso Seth, exigiendo que le<br />
explicara cómo y por qué había expuesto<br />
a aquellos «niños mortales» a semejante<br />
desastre?<br />
Y luego, con qué facilidad había<br />
llorado al saludar a Louis y Armand, y a<br />
su neófito, Antoine, a quien había dado<br />
por perdido hacía mucho, y que estaba<br />
viviendo y triunfando aquí con Benji y<br />
Sybelle. Con qué consideración había<br />
cogido a Antoine de la mano mientras<br />
este tartamudeaba y temblaba y trataba<br />
de expresarle su amor; con qué<br />
paciencia lo había besado y le había<br />
asegurado que tenían muchas noches por