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—¡Bandida, hija de mala madre, te voy a desquiciar la dentadura<br />
por pérfida y calumniadora! –vocifera Rosa de Fuego, el marico<br />
más feo que ha inventado Dios, con ese pelo colorado de barbas de<br />
maíz y esa nariz papuda de zanahoria.<br />
—¡Atrévete conmigo y te sacaré las pupilas, malparida!<br />
–responde el alarido de Niña Isabel, el otro parguete, y le dispara<br />
un arañazo a la cara que va de veras y le escupe un salivazo verdoso<br />
que le deshonra la frente.<br />
El guardia vacila dos segundos, inicia el ademán de cerrar<br />
nuevamente el candado, se lo obstruye el cuerpo a Victorino<br />
caído entre convulsiones, la mitad fuera del calabozo, las piernas<br />
pataleando allá adentro como émbolos enloquecidos. El guardia<br />
lo deja morir de mengua y acude hecho un basilisco a reprimir<br />
el zipizape de los sodomitas. Lleva enarbolado un retaco garrote<br />
blanco, presto a descargarlo sin contemplaciones sobre las cabezas<br />
entigrecidas de ambos gladiadores<br />
Ahora le toca a ellas, estalla en las tinieblas del trasfondo el<br />
zafarrancho de las prostitutas, un contrapunto a cuatro voces,<br />
indescifrable porque las cuatro eructan al unísono el interminable<br />
catálogo de insolencias que han atesorado en su accidentada<br />
carrera, los nombres y sobrenombres de aquellas partes del cuerpo<br />
humano y de aquellas secreciones que intervienen en el acto sexual<br />
o en el remate de las funciones digestivas. Sus gritos son limones<br />
podridos que se estrellan contra las paredes de la cárcel. El guardia<br />
abre los brazos, desenfrenado:<br />
—¡A callarse, putas del carajo!<br />
Y abandona a su destino la reyerta de los sodomitas, galopa hacia<br />
las destempladas, apremia al pito furiosos chiflidos intermitentes,<br />
acuden en su refuerzo los cuatro guardias de la prevención,<br />
vienen toalla al pescuezo y peinilla en mano. Los cinco forajidos<br />
subalternos se coaligan para emprenderla a cintarazos contra las<br />
magdalenas indefensas.<br />
<strong>Miguel</strong> <strong>Otero</strong> <strong>Silva</strong><br />
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