10.08.2015 Views

Vasconcelos

Untitled - Instituto de Educación de Aguascalientes

Untitled - Instituto de Educación de Aguascalientes

SHOW MORE
SHOW LESS
  • No tags were found...

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

COLECCIÓNPara conocer a<strong>Vasconcelos</strong>Breve introduccióna <strong>Vasconcelos</strong>Octavio Arellano Reyna


Colección Para conocer a <strong>Vasconcelos</strong>©1 a Edición, 2007BREVE INTRODUCCIÓN A VASCONCELOSInstituto de Educación de AguascalientesCarr. a San Luis Potosí Nº 601Fracc. OjocalienteAguascalientes, Ags. 20127IMPRESO EN MÉXICO


A Sonia, por todo loque ella signifi ca.


CONTENIDOPrólogo 11Introducción 15<strong>Vasconcelos</strong>: Vida, Pasión yFilosofía 19Primeras acciones en favor de laCultura 25Primer acercamiento a la Política 29La Mujer, la Pasión y el Amor en<strong>Vasconcelos</strong> 35La aventura de la Política y de laEducación 39Frases vasconcelianasSobre los libros y las lecturas 49Acerca de su Madre 53Sobre la Filosofía 55


ContenidoLa Revolución y los revolucionarios 59La Política 67El Destino 73El Amor y las Mujeres 77Fe y Religión 81La Cultura y el Arte 83La SEP y la Educación 85Epílogo 89Bibliografía 95


“Mi testimonio recuerda los heroísmos;mi gratitud busca complacer a los amigos;mi condenación persigue a los traidores;mi intransigencia subsiste frente a losenemigos que fueron desleales”.José <strong>Vasconcelos</strong>, El proconsulado.


PRÓLOGOLa primera referencia que tuve de José<strong>Vasconcelos</strong>, tal vez un poco tardía, fue ellibro Lecturas clásicas para niños, reeditadoen 1971 con motivo del cincuentenario de lacreación de la Secretaría de Educación Pública.Fue en 1976, precisamente cuando iniciémi labor como profesor rural en el nivel deeducación primaria; aún sin cumplir los dieciochoaños de edad, fui adscrito a la escuelade El Salero, comunidad del municipio deCosío, Ags.Ahí, en mi primer día de trabajo docente,tuve la fortuna de encontrar en la paupérrimabiblioteca escolar, que no era sino un desvencijadoy polvoso librero ubicado junto al escritoriodel maestro, nada más y nada menosque los dos tomos de la edición facsimilar delas Lecturas clásicas para niños, compilaciónque yo desconocía y que fue el motivo expresopara que pudiera compartir con mis primerosalumnos, en aquellas tardes campesinas, deliciosostrozos literarios de Shakespeare, Homero,Cervantes, Netzahualcóyotl, Tagoreo Wilde.José <strong>Vasconcelos</strong> creía fehacientementeen la lectura como el camino más corto para11


Prólogo12la conquista y el aprendizaje de la libertad; prueba de ellofue la cruzada que inició en 1924 con la publicación deesta antología, un esfuerzo editorial que logró diseminarentre los niños, los jóvenes y los maestros de México, pasajesde la Ilíada y la Odisea, del Poema de Mío Cid y ElQuijote de la Mancha, de los Vedas y el Ramayana, todosellos ilustrados con preciosos grabados de Montenegro yFernández Ledesma.Por otra parte, y a propósito también de la realizaciónde este prólogo, quiero decir, asimismo, que tuve la primerareferencia de Octavio Arellano Reyna cuando asistíamos,niños todavía, a la Biblioteca Carmeliana de un remoto Pabellónde Arteaga donde los libros escaseaban. Ahí, en aquelespacio improvisado, sentados en el suelo o tirados sobrela alfalfa, nosotros y algunos amigos más, encontramos ellugar idóneo para iniciar nuestra formación como lectores.Volví a encontrarlo nuevamente cuando coincidimos enla cátedra de la Escuela Normal Superior Federal de Aguascalientes,él impartiendo asignaturas relacionadas con laHistoria y yo, otras concernientes a la Literatura.Puedo decir que conozco de cerca su trayectoria comomaestro y sé que ha sido fructífera. Hemos tenido oportunidadde compartir diversos espacios pedagógicos en diferentesinstituciones educativas y por ello sé de su vocación, desu sobresaliente capacidad y sobre todo, de su apetencia permanentepor los buenos libros.Por ello, no me extraña encontrar juntos a José <strong>Vasconcelos</strong>y a Octavio Arellano Reyna en este ensayo interesante,que es literalmente lo que el autor propone: un documentoque habrá de permitir, fundamentalmente a maestros y estudiantes,un acercamiento a la trayectoria y al pensamientodel filósofo oaxaqueño.En la primera parte del libro el lector encontrará un ágil


Prólogosumario biográfico que le permitirá captar con viveza losprincipales sucesos en la vida de nuestro personaje, acontecimientoscuyo significado va más allá de la mera existenciapersonal, pues no se restringieron sólo a su presenciacomo individuo en el mundo, sino que generaron impactoen diversos ámbitos de la vida nacional, sobre todo en losterrenos de la política y la cultura.En la segunda parte el autor nos ofrece una atractivaselección de frases que, como doradas piedrecillas, José<strong>Vasconcelos</strong> diseminó en su prolífica obra y que OctavioArellano, lector incansable, ha recogido con verdadera avidez,no sólo para disfrutarlas en su espacio personal, sinopara hacerlas extensivas y propiciar, mediante ellas, un acercamientoameno y placentero a quien fuera el primer secretariode educación pública en México.Aunque este ensayo es, por sí mismo, una exposiciónclara de la trayectoria y la obra del personaje, no puedo dejarde hacer un comentario breve sobre la obra de <strong>Vasconcelos</strong>,por quien, personalmente, siento también una singularadmiración.El educador, ideólogo, político, filósofo y escritor oaxaqueñoprodujo una vasta obra que no ha sido difundidacomo merece y que, por lo mismo, es desconocida todavíapara muchos mexicanos.Algunos de sus libros más destacados son: Ulises criollo,una autobiografía integrada por cuatro volúmenes enla que encontramos la vehemencia y la convicción de un<strong>Vasconcelos</strong> en toda su dimensión humana; Breve historiade México, libro escrito sin prejuicios y signado por lacontroversia, en virtud de que el filósofo, con una visióndistinta, registra circunstancias y acontecimientos que hansido soslayados por la historia oficial; La raza cósmica, unadisertación interesante acerca precisamente de la quinta raza13


Prólogoque originará una nueva cultura de alcances universales.En el terreno del pensamiento abstracto su produccióntambién es extensa; los libros Todología, Lógica orgánicay Tratado de metafísica son la derivación de un conceptopreclaro en el que la estética y la armonía son elementosvertebrales de una filosofía que llega a replantear incluso losrazonamientos aristotélicos.Éstos, entre otros muchos libros, son clara muestra delpor qué <strong>Vasconcelos</strong> ha sido catalogado como uno de lospensadores más sobresalientes del siglo XX en Latinoamérica,un filósofo que junto con Alfonso Reyes, SamuelRamos, Leopoldo Zea y Octavio Paz, sentó las bases paralas corrientes de pensamiento del México actual.Un personaje al que todos los mexicanos estamos obligadosa leer, a conocer; un hombre controvertido que llegaa ser polémico, pero que conserva como una auténtica constante,la confianza inalterable en su proyecto personal; unpensador que entiende el espíritu como portavoz invariabley absoluto de la raza humana; “filósofo de alma ardiente yluchador activo”, como lo ha llamado Agustín Basave; hombreuniversal que se condujo siempre con rotunda fidelidadal postulado que escribió en el prólogo a El desastre, tercerlibro de la tetralogía del Ulises criollo: “Si resultase que losmás altos valores de la conciencia son nada más fantasmas,mejor es delirar entre fantasmas que palpar y compartir lasdichas de la piara. Si el ideal no ha de cumplirse jamás, mejores padecer la perpetua tensión del imposible que resignarsea un reposo vil”.Pero, no nos detengamos más en estas líneas de presentacióny pasemos ya al ensayo que Octavio Arellano ha tituladoBREVE INTRODUCCIÓN A VASCONCELOS.14Armando Quiroz Benítez


INTRODUCCIÓNSiempre que se habla, se escribe o se hace referenciaa José <strong>Vasconcelos</strong>, surge de inmediatouna reacción a favor o en contra deeste personaje al que se le ubica en el mundode la cultura mexicana como un filósofo, educadorsobresaliente o político; en todo casolo que sí queda claro es que referirse a José<strong>Vasconcelos</strong> es una ruta obligada para hablarde la historia de la educación pública mexicana,particularmente la del siglo XX.En mi caso, siempre encontré en <strong>Vasconcelos</strong>un personaje que me obligó a conocerlo,muy pronto advertí y supe que se trataba de alguiensobresaliente, fundamentalmente en doslíneas de acción complementarias: la cultura yla educación.Sus ideas y sus libros los he releído, es unhombre que en palabras de don Luis González,“va que vuela para clásico” y, en efecto paraquienes tenemos el privilegio de estar cerca delos ambientes educativos, leer a <strong>Vasconcelos</strong>se convierte en una exigencia natural.El motivo de la aparición del presente libroobedece justamente al hecho de que nuestropersonaje es figura y referencia obligada si sequiere conocer la trayectoria educativa que15


Introducción16ha seguido el Estado Mexicano como agente promotor delas actividades derivadas de los procesos educativos que sepusieron en marcha fundamentalmente durante el Méxicoposrevolucionario.Como se sabe, hablar de <strong>Vasconcelos</strong> es unirlo de inmediatoa la fundación de la Secretaría de Educación Pública(SEP), institución creada y diseñada en 1921 por el personajecentral de este libro; de hecho se acepta que la influenciade sus tesis y la propia estructura que le dio origen a dichadependencia prevalecieron durante la mayor parte del sigloXX mexicano, incluso hay quienes dicen que el EstadoMexicano, en el fondo sigue las principales directrices educativastrazadas por <strong>Vasconcelos</strong>.En suma, adentrarnos a conocer a <strong>Vasconcelos</strong> siempregenera un interés, el cual va aderezado casi siempre de sudosis de polémica; sin embargo, el tema busca llamar laatención de los docentes, con la diferencia de que se intentaráconocer al educador valiéndonos de sus propias palabraso frases. Para lograr este último propósito no hay nada mejorque leer sus memorias, las cuales nos han llegado hastanuestros días en cuatro suculentos tomos, mismos que nospermiten adentrarnos al pensamiento de uno de los primerosfilósofos mexicanos del siglo XX.La estructura de este libro se hizo de tal forma que deinicio conozcamos al personaje con un breve ensayo introductorioy, en la segunda parte se darán a conocer susideas, propuestas y pensamientos en frases cortas, con lascuales conoceremos sus opiniones acerca de sucesos políticosmexicanos, señaladamente la Revolución Mexicana enla cual participó como uno de los más sobresalientes intelectualesmilitantes; se observará su incorporación al maderismoy nos adentraremos a sus pensamientos de cortefilosófico, pedagógico y estético.


IntroducciónDe manera adicional podremos conocer las opinionesque <strong>Vasconcelos</strong> tenía acerca de diversos personajes de lahistoria y de la cultura mexicana, de los cuales mencionaremospor ahora a Francisco I. Madero, Francisco Villa, EmilianoZapata, Venustiano Carranza, Álvaro Obregón, PlutarcoElías Calles, Diego Rivera, David Alfaro Sequeiros,Antonio Caso y Lombardo Toledano.No menos importante es el hecho de nombrar a las infaltablesmujeres que ejercieron una fuerte influencia en elfilósofo, de tal forma que es obvio el hecho de tener quemencionar a Adriana y Valeria, quienes junto con Serafina,su esposa, lo marcan como un hombre de incuestionablespasiones y contradicciones.Para leer la segunda parte de este libro, se extraen lascitas o frases vasconcelianas de las obras de nuestro autor,fundamentalmente de Ulises criollo (UC) publicadaen 1935; La tormenta (LT), 1936; El desastre (ED), 1938y de El proconsulado (EP) que salió a la luz pública en1939; estos cuatro libros conforman las memorias denuestro personaje. De manera adicional, en el Epílogo seagregan citas del último de sus libros titulado En el ocaso demi vida (OV) publicado hacia 1957.Vayamos pues al encuentro o reencuentro de <strong>Vasconcelos</strong>y, quien esto escribe desea que su lectura permita a losposibles lectores que en ellos surja por lo menos una reflexiónen torno al personaje y a su obra, de lograr ese propósitoestaremos satisfechos.Octavio Arellano ReynaAguascalientes, noviembre de 2007.17


VASCONCELOS: VIDA,PASIÓN Y FILOSOFÍAJosé <strong>Vasconcelos</strong> Calderón (1882-1959) esuno de los personajes más sobresalientes,controvertidos y admirados de las primerasdécadas del siglo XX mexicano, su paso porla vida política y cultural del país es referenciaobligada si se quiere conocer la agitada historiadel México que daba su despedida al régimendictatorial de Porfirio Díaz y que dabaentrada con valentía y esperanza la llegada deun movimiento revolucionario (el maderismo)en el que coincidieron muchos actores políticos,militares y, en menor proporción, los intelectualesmilitantes, de esta última clase era<strong>Vasconcelos</strong>.Si nos atenemos a esa máxima de SantiagoRamírez que dice: “infancia es destino”, setiene que admitir que la niñez que vive <strong>Vasconcelos</strong>en su natal Oaxaca; Piedras Negras,Sonora, Toluca, Durango, Campeche y la ciudadde México, lo marcaron para siempre alsentir una incuestionable pasión por México,por su cultura y por su gente; como niño inquietoy observador, nos hace conocer losemocionantes paisajes geográficos que nos describeen las ricas y aleccionadoras páginas desus memorias (Ulises criollo, principalmente),en las cuales nos advierte e informa acerca de19


<strong>Vasconcelos</strong>: Vida, Pasión y Filosofía20la belleza mexicana que capta aquel niño y adolescente ensus recorridos por tren que hizo como consecuencia de loscambios constantes de residencia que tenían que hacer suspadres debido al puesto de aduanas que tenía su progenitor.En sus evocaciones sobre la geografía nacional que letoca conocer en su infancia, lo mismo nos habla de sus viajesde Oaxaca a México, México a Campeche, su paso porSonora, su estancia en Durango y Toluca y, desde luego laparte de su infancia que le toca vivir en Piedras Negras;hecho este último que será determinante en su vida puestoque en dicha población fronteriza ocurre su primera incursiónnorteamericana al ser inscrito en una de las escuelas deeducación básica de Eagle Pass, Texas.En todos estos recorridos que <strong>Vasconcelos</strong> nos describeen sus memorias, se aprecia un emocionante relato acercade México, se comprueba que desde siempre estuvo en élese requisito fundamental para ser filósofo: la capacidadde admirar. Justo es decirlo, en sus memorias conocemoscon profundidad la autobiografía del Ulises de Oaxaca, lograndoque nos identifiquemos en nuestros afectos haciaMéxico por la forma tan apasionante en que nos transporta aconocer a los diversos méxicos que él en su infancia y juventudadmiró.Por esa cualidad de ser un observador compartido y porla riqueza de sus libros se logra conocer a un hombre polivalente,brillante y contradictorio como fue José <strong>Vasconcelos</strong>;casi es de asegurarse que el advenimiento y posibleformación de un filósofo obedecen en parte al ambientesocial y familiar en el que se desarrolla, en el caso de <strong>Vasconcelos</strong>,la mano bondadosa y culta de su madre lo lleva aintroducirse al mundo de la lectura y con ello al engrandecimientode esa capacidad de seguir admirando el entorno;como buen hijo apegado a su madre siempre reconoció laenorme influencia que ejerció doña Carmen Calderón en suformación y en la práctica de los valores principales del catolicismo;es sabido cómo lo introdujo a la lectura de los textosclásicos de la religión católica, por esta razón se acerca a


<strong>Vasconcelos</strong>: Vida, Pasión y FilosofíaPlatón, San Agustín y a Santo Tomás; se adentra con fuerzaal conocimiento de la historia de México donde fue lecturaobligada el México a través de los Siglos y, para conocernuestra geografía nos habla de la pasión que le tuvo a losentonces famosos atlas o libros de Antonio García Cubas;como niño y joven interesado en el mundo, se introducetambién en la lectura de los clásicos y al conocimiento delos grandes filósofos antiguos.Por estas razones de afinidad con su madre, se sabe queal morir ésta, es cuando <strong>Vasconcelos</strong> atraviesa por uno delos momentos más trágicos de su adolescencia y más porqueno está presente al momento de su fallecimiento, lo enteransemanas después del acontecimiento; el futuro fundador dela SEP tenía tan solo dieciséis años, se queda sin su principalaliada familiar y, en la práctica pierde a su mecenas cultural,pero fundamentalmente lo hiere el gran dolor por la ausenciade la persona más amada por él.Existe además un elemento que también lo marca y es elreferente a que sus primeros años escolares crece al lado deniños norteamericanos en donde aprenderá para siempre elsegundo idioma que tanto le servirá para el rosario de exiliosque padeció y para ciertas tareas diplomáticas que en sumomento los llamados caudillos como Francisco I. Madero,Venustiano Carranza, Francisco Villa, Eulalio Gutiérrez y elpropio Álvaro Obregón le van a encomendar cuando existenciertas coincidencias políticas con ellos; pero además, es enEagle Pass, Texas, en donde tiene los primeros acercamientoscon la cultura anglosajona, con sus valores y con el pragmatismocon el que se crecía en los Estados Unidos, y sienteadmiración por ese país pero sin renegar jamás del suyo.Unido a lo anterior, esa estancia en dicho lugar le sirvepara contrastar los valores de la nacionalidad mexicana y,siendo, como era, un niño observador, se va creando en elfuturo filósofo una visión muy diferente a la de la inmensamayoría de sus coetáneos en virtud del grave atraso educativoen que tenía sumido el régimen porfirista a la sociedadmexicana, <strong>Vasconcelos</strong> comprueba, siente y conoce las21


<strong>Vasconcelos</strong>: Vida, Pasión y Filosofía22diferencias del Sistema Educativo de los Estados Unidosde Norteamérica, con la triste realidad social, cultural yeducativa que venía poniendo en práctica en todo el paíssu también paisano Porfirio Díaz, el cual con un régimenautocrático y gerontocrático tiene a México sumido en elmás profundo atraso social debido al sistema de privilegiosque otorgaba sólo a los hacendados y a su grupo de muycercanos seguidores conocidos como “los científicos”, loscuales eran los que sugerían al Presidente Díaz las políticaspúblicas más “adecuadas” para el pueblo mexicano.Al entrar el siglo XX, la familia de <strong>Vasconcelos</strong> regresanuevamente a la capital del país, el joven José, tiene ya laedad y preparación suficientes para elegir estudios de carreraprofesional, decide estudiar en la ciudad de México,puesto que, como era de suponerse, en el México porfirista(1876-1911) todas las actividades de tipo cultural, político,y académico se concentraban en la capital, por lo tanto, lasopciones para los jóvenes que podían acceder a estudiosuniversitarios eran muy reducidas y las profesiones comolas de abogado, médico e ingeniero seguían impregnadas deuna fuerte tradición y eran las que recibían mayores atencionespor parte de las autoridades y de la propia sociedadque las veía y aceptaba como las de mayor prestigio socialy, en la práctica, eran la plataforma más directa para el encumbramientoen las principales tareas de gobierno o paraincursionar en el mundo de los negocios; estas eran las actividadesque recibían una atención privilegiada duranteel porfirismo.<strong>Vasconcelos</strong> elige ser abogado, estos estudios le permitencontinuar con sus lecturas de orientación humanísticay se va perfilando en él la formación de constituirse en unode los primeros filósofos mexicanos del siglo XX, de hecho,cuando se le preguntaba acerca de su profesión siempredecía “no soy abogado, ni ninguna otra cosa, soy filósofo”;sin duda, para el tiempo en que afirmaba esto, en verdadque definirse como tal implicaba un enorme compromiso,sobre todo si se toma en cuenta que se vivía en un momento


<strong>Vasconcelos</strong>: Vida, Pasión y Filosofíahistórico en donde el analfabetismo era la parte dominanteen la esfera social (85% de la población lo padecía) y lainmensa mayoría del pueblo mexicano pensaba más en subsistirque en leer o en estudiar.A pesar de las adversidades que representaba para unjoven provinciano el estar estudiando en la capital del país,toma muy en serio sus estudios dentro del campo de la Jurisprudenciay sin renunciar a llevar también una vida con ciertosdesenfrenos, logra obtener su título de abogado en 1905y, sorprende a maestros y condiscípulos cuando presenta latesis “Concepto Dinámico del Derecho”, cuyas ideas principalesse orientan a tratar de demostrar el sentido filosóficoque debe de tener el derecho como ciencia, al aplicarse alseno de la sociedad.23


PRIMERAS ACCIONES ENFAVOR DE LA CULTURAComo hombre de libros e ideas, <strong>Vasconcelos</strong>,pronto participa en círculos de promocióncultural en la ciudad de México, independientementede sus éxitos como abogadopostulante, nunca deja de lado su profundainclinación por la reflexión política, social yfilosófica; en este sentido, hacia 1909 es unode los promotores y fundadores del Ateneo dela Juventud, una especie de agrupación culturaly filosófica, en la cual van a participaruna larga, nutrida y enriquecedora nómina deintelectuales sobresalientes en diversas áreasdel conocimiento humano, basta con hacer unbreve repaso de algunos de sus miembros yencontramos en el Ateneo a personajes comoAlfonso Reyes, Pedro Henríquez Ureña, AntonioCaso, Martín Luis Guzmán, AlfonsoCravioto, Saturnino Herrán, Ricardo GómezRobelo, Jesús T. Acevedo, Federico Mariscal,Nemesio García Naranjo, Alberto J. Pani, DiegoRivera, Julio Torri, Luis Cabrera, ManuelM. Ponce, Alfonso Pruneda y algunos pensadoresextranjeros como los hermanos Pedroy Max Henríquez Ureña (República Dominicana),José Santos Chocano (Perú), Leopoldode la Rosa (Panamá), Miguel Angel Osorio(Colombia) y un largo etcétera de hombres25


Primeras acciones en favor de la Cultura26de letras y de las ciencias que nos demuestran el tipo depersonalidades con las que <strong>Vasconcelos</strong> se rodeaba en susafanes por hacer de México una nación culta y políticamentedesarrollada.Todos ellos, en lo individual y en conjunto, hicieron delAteneo un lugar y un espacio para la divulgación cultural,se observa que eran personas sobresalientes en sus respectivosoficios o profesiones; sin embargo, al mismo tiempoque los unía su pasión por el arte, la literatura, la filosofía yen general por la promoción científica y artística, existió unelemento adicional que los unificó: la incomodidad ante lacultura y la filosofía practicada por el porfirismo.Como se sabe, durante los años del régimen porfirista,gran parte de las tareas intelectuales fueron dedicadas aponer en práctica los postulados de la corriente filosóficaconocida como Positivismo, doctrina que en la práctica justificabael apoyo a las medidas políticas y económicas impuestaspor el gobierno de Porfirio Díaz y, en lo referenteal desarrollo científico y cultural, este quedaba reducidoa darle apoyo a las ciencias llamadas exactas o racionalescomo eran la ingeniería, la arquitectura y la medicina, perolas referentes a la creación artística o las de orientación humanísticaeran ignoradas.Los jóvenes del Ateneo se enfrentaban con sus actividadesa un gobierno dedicado exclusivamente a tener sometidoal pueblo valiéndose de la miseria y de la ignoraciaen la que tenían postrados a la inmensa mayoría de losmexicanos y, en contraste, la clase de los hacendados y delos terratenientes eran los aliados naturales del gobierno deDíaz, muchos de los cuales tenían bajo su control a grandesregiones y porciones geográficas del territorio nacional.El estado de cosas descrito anteriormente, hace quejustamente el Ateneo se levante como una opción culturaly de crítica política, con el propósito muy definidode hacer llegar la cultura a la mayor parte del pueblomexicano y, en forma simultánea se convertía automáticamenteen una entidad con voz y propuesta para criticar al


Primeras acciones en favor de la Culturasistema de gobierno de Porfirio Díaz; en suma, el Ateneofue en la práctica también uno de los actores políticosque participó en forma activa como uno de los movimientosprecursores revolucionarios de México en virtud del papelque ejercen como críticos del gobierno.No se puede afirmar categóricamente que la aparicióndel Ateneo y sus acciones por promover la reflexión política,social y filosófica de la realidad mexicana fueran el elementodeterminante para que estalle el movimiento armadode 1910, pero su aportación radica en que logró introducirnuevos valores para el análisis de la realidad que en ese momentoexistía en el pueblo mexicano; con ello fijan su distanciacon el régimen de Díaz –<strong>Vasconcelos</strong>, sí, otros comoAntonio Caso y Nemesio García Naranjo, no– puesto que engeneral sus tesis, actividades y conferencias dictadas son unreto a las ideas defendidas por los simpatizantes del positivismomexicano, los cuales eran el grupo intelectual adicto aPorfirio Díaz.Queda claro que la intervención de <strong>Vasconcelos</strong>, al interiordel Ateneo, era su pasión por la difusión educativa ycultural, pero simultáneamente, en el caso muy personal denuestro Ulises, se trataba también de establecer su posturadistante y de crítica frente a Porfirio Díaz; en este sentido,se observa que prácticamente desde 1909, <strong>Vasconcelos</strong> estabafijando su posición política, misma que en los hechosera justamente de oposición a su viejo paisano y dictador;este hecho es una muestra de plena congruencia cuando decideincorporarse con Madero en su lucha por la democratizacióndel país.En suma, el movimiento ateneísta fue una ventanaabierta para la oxigenación de las ideas que prevalecieron alo largo de la prolongada noche del porfirismo (1876-1911)y fue también la oportunidad histórica para comprobar quedesde entonces y hasta este día, abordar el tema del Ateneo,es obligada referencia para hablar nuevamente de uno delos grandes hombres que le ha dado Oaxaca a nuestro país:José <strong>Vasconcelos</strong> Calderón.27


PRIMER ACERCAMIENTOA LA POLÍTICAEs el propio <strong>Vasconcelos</strong>, el que nos narrala forma en que logró un día acercarse aplaticar con Francisco I. Madero, en sus memorias,nos dice que entró en contacto directocon el líder antirreleccionista en una oficinaen la ciudad de México, hubo simpatía e identificaciónde ideales entre ambos, por ello,recibió gustosamente las instrucciones deMadero para ponerse a trabajar en la parte delos discursos y propuestas para dar a conocerla oferta política de Madero en todo el país eincluso en el extranjero.Era evidente que <strong>Vasconcelos</strong>, recibió esteencargo con agrado en virtud de la facilidadnatural que tenía para expresar en forma escritasus ideas; el propio <strong>Vasconcelos</strong>, confiesa,sin que hasta la fecha haya sido desmentido,que en ese entonces él fue el creador del lemamaderista “Sufragio efectivo no reelección”;conociéndose la capacidad y presencia intelectualde nuestro Ulises, es de aceptarseque tenía capacidad para eso y mucho más; dehecho un lema que es referencia obligada porsu uso y actualidad es “Por mi raza hablará elespíritu”, el cual le da sentido e identidad a laUniversidad Nacional Autónoma de México,UNAM.Al entrar en contacto con Madero y acep-29


Primer acercamiento a la Política30tar incorporarse a su movimiento, <strong>Vasconcelos</strong>, iniciaun trayecto en su vida que será a partir de ese momentouna constante: ser actor protagónico de los mo-vimientospolíticos revolucionarios y posrevolucionarios.La presencia de <strong>Vasconcelos</strong> se extiende de 1910 hasta1930 como actor político, como hombre de letras, de culturay de opinión en México; el ejercicio de escribir, de aportarideas y de alentar la crítica será una constante hasta 1959,año en que muere.La cercanía de <strong>Vasconcelos</strong> con Madero se presenta demanera natural, este era un crítico del sistema encabezadopor don Porfirio Díaz y, aquel, era un crítico de la culturapromovida por el grupo de los llamados “Científicos”, loscuales eran defensores a ultranza de las ideas filosóficasderivadas del Positivismo; doctrina que en la realidadsocial mexicana condenó a la mayoría del pueblo a viviren la miseria y en la ignorancia, por lo tanto, <strong>Vasconcelos</strong>proponía nuevas ideas políticas para dar respuestas de mayorjusticia a la población; en este sentido, se puede decir que laprimera identificación entre Madero y <strong>Vasconcelos</strong> es la deadvertir la necesidad de un cambio de ideales que tuvieranmayor impacto social y con una orientación más liberal,justamente para otorgar mayor justicia a los mexicanos,cuestión que en ese momento era una asignatura pendientepor parte del régimen porfirista, puesto que el viejodictador había ignorado por décadas el contenido socialy las garantías individuales que ya consagraba la Constituciónde 1857.Un elemento político que anima el ideal maderista es quehacia 1908, en la entrevista con el periodista norteamericanoJames Creelman, el dictador Díaz dijo que “México estabalisto para la democracia”; justamente por esa afirmación esque Madero y sus seguidores llevarán a cabo todo un movimientosocial revolucionario para coadyuvar al desarrollodemocrático que durante las décadas del porfiriato no fueconocido en virtud de las constantes reelecciones del tambiénoaxaqueño Porfirio Díaz Mori.


Primer acercamiento a la PolíticaEn este sentido, hacia 1910 se inicia una lucha para queMéxico pudiera contar con un sistema político democráticoy crecientemente moderno, a efecto de demostrar al mundoque independientemente de los atrasos sociales y económicosoriginados por la mala organización política que padecióMéxico durante el siglo XIX y por los excesos y atropellosdel gobierno de Porfirio Díaz, el país sí podía contarcon buenos gobiernos si estos se sustentaban en los idealesdemocráticos.Desafortunadamente, el experimento democrático tendrámuchos obstáculos, como es sabido, Díaz, convoca aelecciones en julio de 1910 y, el Congreso, totalmente a lasórdenes del dictador, dictamina que Porfirio Díaz y RamónCorral, son los que alcanzan los nombramientos de presidentey vicepresidente de la República; con este hecho, Maderono solo sufre una injusta y fraudulenta derrota electoral, sinoque el sueño que él tenía acerca de la democracia se desmoronay no le queda otro camino que enarbolar el “Plan de SanLuis”, documento que en la práctica era un llamado al levantamientosocial armado en contra de la dictadura de Díaz, elcual nuevamente había burlado la voluntad ciudadana y esdesignado presidente para el período 1910-1916, lapso queno cumplió en virtud de que Madero sí encontró respuestapor parte del pueblo mexicano para levantarse en armas enla fecha que señalaba el plan mencionado, que era precisamenteel 20 de noviembre de 1910.Finalmente el dictador sale del país en junio de 1911como consecuencia de los levantamientos revolucionariosen los que las figuras militares más destacadas de aquellaprimera etapa fueron Francisco Villa, Emiliano Zapata yPascual Orozco.En esta etapa cerca de Madero se encontraban personajesde la talla intelectual de Luis Cabrera, los HermanosVázquez Gómez, Roque Estrada y de manera sobresalienteJosé <strong>Vasconcelos</strong>.Para mediados de 1911 el proyecto maderista es una plenarealidad, había triunfado el movimiento revolucionario31


Primer acercamiento a la Política32iniciado el 20 de noviembre de 1910, Porfirio Díaz entregael poder en el mes de mayo y Madero obtiene el reconocimientode jefe nacional hasta que finalmente en noviembrees elegido presidente de México; la amistad entre<strong>Vasconcelos</strong>y Madero sigue firme, sorprende que no lo incorporaal gabinete, en sus memorias el filósofo dice que era mejorpara él en virtud de que pudo crecer su prestigio comoabogado al llevar la defensa legal de hombres y empresasmuy importantes, lo cual, le permitió obtener muy buenosingresos; sin embargo también es cierto que en la práctica<strong>Vasconcelos</strong> es una especie de ministro sin cartera, situaciónque habla de la confianza absoluta que sentía Madero pornuestro personaje.Como se sabe, el proyecto maderista solo se extiendeun corto tiempo puesto que Madero fue electo presidente ennoviembre de 1911 para un período de cuatro años, tampocolo concluye en virtud de que nunca desmanteló las estructuraspolíticas, administrativas y militares creadas duranteel porfiriato, cuestión que va a ser determinante para que enfebrero de 1913, a sólo quince meses de haber iniciado sumandato presidencial, tenga que abandonar la presidencia, yel veintidós de ese mes, sea cobardemente asesinado juntocon el vicepresidente José María Pino Suárez, por órdenesdel nuevo dictador Victoriano Huerta.En este orden de cosas, el licenciado <strong>Vasconcelos</strong>, iniciauno de sus primeros exilios, tiene que abandonar el país,ante el clima de persecución política que inicia el llamado“carnicero de la revolución”, personaje de negra presenciaen la historia mexicana, particularmente en el episodio conocidocomo la “Decena trágica”, que fueron los diez díasen los que el gobierno de Madero sufrió las traiciones dediversos personajes nacionales e internacionales, ejemplodel primer caso fueron líderes militares como BernardoReyes, Félix Díaz, Aureliano Blanquet y el propio VictorianoHuerta; este último era el encargado de las fuerzas armadasy responsable incluso de la seguridad de Madero; enel segundo caso, y como una muestra más de la intromisión


Primer acercamiento a la Políticade Estados Unidos, su entonces embajador Henry Lane Wilson,participa en forma directa en la preparación del golpey en la efectiva defenestración de Madero; en suma, el 22de febrero de 1913, muere junto con el presidente el idealdemocrático que había hecho posible el levantamiento revolucionariode 1910.<strong>Vasconcelos</strong>, como ya se ha dicho, se ve obligado a huirde la persecución huertista, por fortuna, la nueva dictaduradel “chacal de la revolución”, tampoco se alarga mucho yya con la renovada presencia militar de los primeros jefesrevolucionarioscomo Villa y Zapata, pero, además con laincorporación de personajes como Venustiano Carranza, ÁlvaroObregón, Plutarco Elías Calles, Felipe Ángeles y PabloGonzález, el movimiento revolucionario en esta segundaetapa adquiere una fuerza de mayores alcances geográficose ideológicos en virtud de que más estados de la repúblicase van incorporando a las filas revolucionarias y, en el planoideológico, surge el “Plan de Guadalupe”, el cual establecelos puntos principales que se intentan conseguir para lograrla derrota definitiva de Huerta; ante estos hechos, el ebriodictador tiene que dejar el poder y huye para siempre delpaís; esto provoca que <strong>Vasconcelos</strong> regrese pronto a México.Desafortunadamente para 1914 y 1915 los revolucionariosse dividen en dos grupos, no se ponen de acuerdo y nuevamenteexiste una lucha ahora entre los llamados Constitucionalistas,grupo en el cual estaban Venustiano Carranza,Álvaro Obregón, Plutarco Elías Calles, Lázaro Cárdenas yPablo González; los cuales luchaban en contra de los Convencionistas,grupo al que pertenecían Villa, Zapata, FelipeAngeles, Eulalio Gutiérrez y otros militares; cerca del bandode estos últimos participó de manera directa José <strong>Vasconcelos</strong>,desde luego para trabajar la parte programática ydoctrinaria de los postulados de la llamada Convención deAguascalientes.En las memorias de <strong>Vasconcelos</strong>, señaladamente en Latormenta, cuenta de manera puntual la forma tan determinanteen la que participó el filósofo en esa tercera etapa de33


Primer acercamiento a la Políticala revolución; nuevamente nos detalla con profundidad todolo ocurrido alrededor de ese capítulo de la historia mexicanaque se conoce como “La Convención de Aguascalientes”;justamente se había elegido a la ciudad de Aguascalientesdado que era un punto geográfico central y sele considerabapolíticamente neutral con el propósito de garantizar la presenciade los dos grupos revolucionarios; en dicho lugar seestaba decidiendo el rumbo político que seguiría México;como se sabe, los constitucionalistas no avalan los acuerdosde la convención y se presenta el enfrentamiento armadoentre ambos grupos.De Aguascalientes, sale nombrado en forma legítimaun gobierno, lo encabeza un general moderado, EulalioGutiérrez, y, como era de esperarse, <strong>Vasconcelos</strong>, obtienepoco después un cargo en el gabinete, es nombrado, nadamás y nada menos que Ministro de Instrucción Pública,como un reconocimiento a su presencia intelectual y a suparticipación en la elaboración de los documentos principalesde la convención, dicho nombramiento no extraña anadie, al contrario, se ve como una muestra real del relevopolítico generacional y de la entrada al mundo de la políticade alguien cuyo ideal principal era continuar la luchainiciada e inconclusa de Madero, nada mejor, que hacerlodesde la trinchera educativa y cultural.El proyecto político de la Convención de Aguascalientesfracasa debido al triunfo militar de los llamados constitucionalistasy el gobierno que había surgido en Aguascalientesprácticamente desaparece ante la persecución militar ypolítica del grupo triunfante y, nuevamente <strong>Vasconcelos</strong> saleal exilio, ahora por la poca simpatía que sentía por él VenustianoCarranza.34


LA MUJER, LA PASIÓN Y ELAMOR EN VASCONCELOSEl tema referente a la mujer, a los amoresde <strong>Vasconcelos</strong>, merecen un tratamientoaparte; lo primero en lo que se tiene qué insistires que nuestro Ulises fue un hombreextraordinariamente apasionado, a todas susactividades les imprimía esa distinción; susincursiones dentro del amor, de la atracciónque las mujeres ejercían en él no pudieronescapar a esa característica vasconceliana dela pasión; muy pronto desde su papel de estudianteincursiona en sus primeras aventurascon algunas mujeres que lo llevan a conocerlos intrincados caminos de lo que él llamaba lavoluptuosidad y los placeres sensuales.Conforme a lo escrito en sus memorias,son tres mujeres que lo marcan de por vida;la primera fue Serafina, su esposa, de la quenunca se separó a pesar de la fama bien ganadaque tenían las infidelidades del filósofo, jamásse atrevió a considerar como cosa seria la consumacióndel divorcio, tenía hijos y mantuvola relación a pesar de los sinsabores que ambospasaron para no lesionar la estabilidad dela familia del filósofo.La segunda fue Adriana (Elena Arizmendi),con ella conoció toda la pasión, el amor,35


La Mujer, la Pasión y el Amor en <strong>Vasconcelos</strong>36los celos, la inspiración y el erotismo pleno; fue ella lamujer que lo acompañó durante los años en que participócomo un intelectual revolucionario, viajaron juntosdentro y fuera del país, se convirtió en la compañera delos destierros que padeció <strong>Vasconcelos</strong>; ella supo ser sualiciente para que los exilios fueran menos dolorosos; conAdriana llegaron los momentos llenos de pasión desbordadaque sólo puede sentir un hombre cuando tiene la certezade que ha encontrado a la mujer perfecta para un hombrede ideas.De todos estos encuentros, desencuentros y escarceosamorosos que vivió con Adriana nos habla en sus memorias<strong>Vasconcelos</strong>, principalmente en Ulises Criollo y LaTormenta, nos describe con detalles un erotismo de parejasólo explicable en alguien terriblemente enamorado, susdescripciones amorosas nos acercan al conocimiento de losalcances que un ser entregado al otro puede lograr cuandose tiene la armonía perfecta con la pareja en el llamado artede amar; para un hombre en eterna búsqueda como <strong>Vasconcelos</strong>,el tener a la mujer y al amor siempre cerca eran laoportunidad de poder saciar los vacíos existenciales; Adrianalo marcó para siempre por considerarla su complementoideal, con ella y por ella sufre, llora, vive, escribe, sueña,ama; sin embargo, al final la relación se torna enfermiza y laseparación total impregnada de diferencias irreconciliablesy de ofensas se, cumplió.Varios, años después, ya casi al finalizar la segundadécada del siglo XX y superada la ruptura y separaciónde Adriana, mantiene una relación muy cercana y afectivacon Valeria (Antonieta Rivas Mercado), en quien ve la compañeraintelectual perfecta; es Valeria una dama muy fina,de abolengo, culta, amante del teatro y de la literatura,políglota, mecenas, admiradora y, quizás, la militante más


La Mujer, la Pasión y el Amor en <strong>Vasconcelos</strong>activa y sobresaliente del proyecto político de <strong>Vasconcelos</strong>;viajan juntos por el país con el propósito de hacer realidadun cambio en la vida nacional, son ellos los principalesideólogos del movimiento vasconcelista en pos dela presidencia de la república en aquella aventura electoralque encabezó <strong>Vasconcelos</strong> en los años 1928 y 1929.Al final, cuando los resultados les son adversos y al consumarsela burla hecha hacia los electores por parte de losseguidores de Plutarco Elías Calles, ambos se ven obligadosa salir del país para compartir juntos el nuevo destierro quepor enésima ocasión padecía el filósofo de Oaxaca.Como consecuencia del destierro posterior a la aventuraelectoral de 1929, se convierten en dos almas cuya soledadintentan mitigar con la mutua compañía y con la idea deponer en marcha proyectos culturales inmediatos, que nollegan a su culminación puesto que existe un evento que losva a separar trágicamente.En efecto, Valeria marca para siempre la vida de <strong>Vasconcelos</strong>:estando juntos en París, ella, al padecer diversosestados emocionales muy fuertes derivados delmal manejo de sus finanzas, de un divorcio mal llevado yde un hijo al que no atina a atender adecuadamente, se suicidaen la Catedral de Notre Dame, dejando a <strong>Vasconcelos</strong>con una responsabilidad espiritual que lo va afectar por elresto de su vida; el filósofo jamás encontró una explicaciónque justificara esa decisión y fue evidente que de algunamanera él cargaría para siempre con cierta culpabilidad anteel lamentable suceso y más por el hecho de que ella le habíaadvertido que optaría por ese camino, a lo cual el filósofo nole tomó la importancia necesaria para evitarlo; con ello, demanera muy trágica terminaba una relación de empatía intelectualplena y una relación amorosa con cierto aire clandestino;en el fondo era un desenlace al que habían llegado37


La Mujer, la Pasión y el Amor en <strong>Vasconcelos</strong>los dos, en parte por ser personas que siempre padecieron elfenómeno de no encontrar su lugar en el mundo.38


LA AVENTURA DE LA POLÍTICAY DE LA EDUCACIÓNDesde 1917 hasta 1920, el hombre fuertede México era Venustiano Carranza, elcual contaba con el apoyo militar de AlvaroObregón, sin embargo, al momento de la sucesiónpresidencial, surgen dos candidatos, unoera Ignacio Bonillas, apoyado por Carranza yel otro era el propio Obregón; esta situacióntrae como consecuencia varios enfrentamientosentre los dos caudillos, los cuales culminancon el asesinato de Carranza en mayo de 1920y con ello, el camino para que Obregón seconvierta en presidente estaba despejado.A pesar de las fuertes diferencias que José<strong>Vasconcelos</strong> tenía con Carranza y con el GrupoSonora (Obregón, Calles y De la Huerta),estos al ser los que tenían el control del país,le reconocen sus prendas intelectuales y esnombrado primero rector de la UniversidadNacional y, en 1921, previo proyecto legaleducativo, es nombrado por Alvaro Obregóncomo primer titular de la Secretaría de EducaciónPública, SEP.Era un hecho muy conocido el aceptar que<strong>Vasconcelos</strong> fue el creador de la SEP al diseñartodo el proyecto para desarrollar la educación39


La aventura de la Política y de la Educación40pública en México, le dio forma a sus estructuras internas,a sus objetivos, a su filosofía y a sus alcances ideológicos ytemporales; los cuales en gran parte siguen vigentes hasta lafecha. El caso del llamado federalismo educativo es el másclaro ejemplo.La obra educativa impulsada por <strong>Vasconcelos</strong> desde laSEP es muy conocida, como nunca antes en la historia dela educación mexicana se llevó a cabo una auténtica cruzadanacional por la educación, empezando por una luchafrontal en contra del analfabetismo; incorporó a los jóvenesuniversitarios a las actividades de difusión y fomento educativoy cultural, con esto parece un hecho cierto el que desdeesa época se empieza a hablar con mayor fuerza del famoso“servicio social” que deben de prestar los universitarios a lascomunidades de mayores carencias.El primer titular de la SEP convoca además a los mejoresmaestros normalistas para la multiplicación de accioneseducativas en beneficio de las escuelas rurales; surgenlas Misiones Culturales, cuya tarea básica era llevar una especiede educación técnica a las comunidades en donde algunosexpertos de diversos oficios enseñaban a los jóveneslos secretos de sus respectivos oficios para lograr empleosy autoempleos en los pequeños pueblos y generar de algunaforma algún ingreso económico; se crean las Casas delPueblo y las Salas de Lectura con la intención fundamentalde promover la lectura y la cultura como estrategias de laigualación social; en esa dirección es que se justifican lasediciones de las obras de la literatura y filosofía clásicasque se le hicieron llegar en ese tiempo a miles de mexicanospara que estuvieran inmersos en el mundo del hábito dela lectura.Otro aspecto que hay que destacar es el referente a lasescuelas rurales, las cuales se multiplican y, en general,


La aventura de la Política y de la Educaciónlas acciones de difusión cultural llegan a todos los puntosgeográficos del país, de este renglón hay que mencionar demanera destacada la creación de las llamadas Escuelas NormalesRurales (llamadas en ese tiempo Escuelas RegionalesCampesinas) que siguen vigentes hasta la fecha y que vinierona ser con sus maestros egresados una respuesta muyefectiva para la promoción educativa de las comunidades demayor pobreza y marginación existentes en el país.Un elemento adicional que hay que destacar de la obravasconceliana es que incorpora a los intelectuales a lastareas de difusión cultural y un ejemplo de ello son los muralesde Diego Rivera, David Alfaro Sequeiros y RobertoMontenegro, personas que dentro del terreno del arte configuraronla línea conocida como muralismo mexicano y lapropia SEP aporta sus muros y allí se proyectan los idealesde un nacionalismo cultural, étnico, religioso e histórico.El mundo de las letras no podía faltar en el proyectocultural vasconceliano al darle espacio de acción culturala poetas como Alfonso Reyes, Jaime Torres Bodet, CarlosPellicer y a la chilena Gabriela Mistral.Finalmente, se debe destacar el hecho de que los brazosejecutores de la política educativa que promovió <strong>Vasconcelos</strong>fueron los jóvenes, los maestros y la clase intelectual;todos ellos tenían una clara identificación con el proyectoeducativo que impulsaba el filósofo y eran personas convencidasde que la tarea más inmediata para redimir al pueblomexicano era el camino de la educación; sin duda, hoy aocho décadas de este episodio cultural cuando se habla dela educación que surgió como producto del Movimiento Armadode 1910, la referencia hacia <strong>Vasconcelos</strong> es un acto dejusticia y de reconocimiento.Una de las líneas de acción social en la que <strong>Vasconcelos</strong>incursionó en forma apasionada pero sin éxito fue la41


La aventura de la Política y de la Educación42lucha política, como ya se dijo, se inicia en sus participacionespolíticas con Madero, luego en el gobierno emanadode la Convención de Aguascalientes y, coadyuva con susconocimientos y presencia intelectual al lado de Adolfo dela Huerta y Álvaro Obregón al inicio de la década de losveintes, primero como rector de la Universidad Nacional yluego como fundador y primer secretario de la SEP.Han existido diversos ejemplos de filósofos que al quererseguir el sueño platónico de que sean los grandes pensadoreslos que gobiernen, se han topado con numerosos obstáculos,de tal forma que muchos personajes se han quedado en elintento de ser gobernantes y otros, al haberlo logrado, casisiempre son defenestrados e incomprendidos y por lo tanto,son arrojados del poder; es más, el mismo Platón sufrió lapersecución de Dionisio cuando fue su consejero.En el caso de <strong>Vasconcelos</strong>, en México está documetadoque primero buscó de manera decidida ser gobernadorde su natal Oaxaca, para lo cual, se separa de la titularidadde la SEP a mediados de 1924 y, como era de esperarse,los grupos cercanos a los caudillos locales y nacionalesle impiden llegar a ser el titular del poder ejecutivo de suestado al utilizar todo tipo de artimañas para que el filósofono gobernara Oaxaca.Después de su intento fallido por gobernar su estado,sale nuevamente al exilio, ahora más que nada por la influenciaque tiene Calles en el mando del gobierno; enesa condición de exiliado pasarán varios años, de 1924 a1929, lapso que aprovecha para viajar por América delSur, Centroamérica, El Caribe, Europa y Estados Unidos,lugares en los que recibe siempre el reconocimientocomo hombre de ideas y como uno de los mexicanos mássobresalientes; todo este tiempo será de maduración yde crecimiento como filósofo; las obras La raza cós-


La aventura de la Política y de la Educaciónmica y De Odiseo a Robinson son escritas en esa época.<strong>Vasconcelos</strong> recibió el título de “Maestro de América”en países sudamericanos como Colombia, Panamá y Perú;su reconocimiento como intelectual de primera línea lo llevaa aceptar diversos trabajos en las universidades de EstadosUnidos (Chicago, Nueva York y California) las cualesle abrieron sus puertas para impartir cátedra, cursos yconferencias; logra con ello el hecho de que un intelectualmexicano conquiste y atraiga el interés de la sociedadnorteamericana.Es durante todo el gobierno de Plutarco Elías Calles(1924-1928) que <strong>Vasconcelos</strong> permanece en el exilio, estehecho y su reconocida autoridad moral, intelectual y políticahacen que se constituya en la voz más crítica e independientefrente a dicho gobierno, cuestión que se comprueba alleer los dos últimos tomos de sus memorias El desastre y Elproconsulado.Hoy se sabe que el episodio político más sobresalienteen el que se ve involucrado José <strong>Vasconcelos</strong>, es la famosaelección presidencial de 1929. Como es sabido, AlvaroObregón había resultado reelecto en 1928, después de habersido Presidente Constitucional de 1920 a 1924, para cubrirun período de seis años que llegaría hasta 1934; sin embargolas pugnas por el poder político en el México posrevolucionarioactuaron de manera eficaz y logran quitar a Obregóndel poder, considerado en ese momento como el máximocaudillo mexicano.Con el asesinato de Alvaro Obregón, llevado a cabo enjulio de 1928, la clase política que en ese momento manteníael control nacional –Plutarco Elías Calles y sus seguidores– seven obligados a convocar a nuevas elecciones; es justamenteen este clima político cuando diversos grupos y personalidadesdirigen su mirada hacia <strong>Vasconcelos</strong> y lo consideran43


La aventura de la Política y de la Educación44como el personaje idóneo para ocupar la Presidencia dela República.El filósofo luego de meditarlo se inscribe como candidatopara la campaña de 1929, para lo cual llama a una grancruzada cívica nacional para conquistar el poder y desde allíimpulsar todo un programa político en donde, el respeto alsufragio, el impulso a la cultura, la búsqueda de la democracia,y el apoyo decidido a la educación serían sus valoresprincipales; de manera adicional se rescatarían los idealespolíticos de Madero, razón que justifica el lema utilizadoen ese momento para su campaña: “Con Madero ayer, con<strong>Vasconcelos</strong> hoy”.La jornada electoral de 1929 marcó para siempre a <strong>Vasconcelos</strong>,sus principales seguidores y operadores políticoseran los jóvenes, personas como Jaime Torres Bodet, AdolfoLópez Mateos, Alejandro Gómez Arias, Juan Bustillo Oro,Manuel Moreno Sánchez, Daniel Cosío Villegas, el grupointelectual y literario conocido como Los Contemporáneosy, por supuesto, algunos miembros del Ateneo, fueronparte importante en la difusión de las ideas políticasde <strong>Vasconcelos</strong>.Como era de esperarse, el 17 de noviembre de 1929<strong>Vasconcelos</strong> ganó las elecciones presidenciales, pero perdióen la mesa de los conteos oficiales debido entre otras cosasa que nunca perteneció a los grupos que simpatizaban conlos caudillos militares que justo en ese momento eran yajefaturados por Plutarco Elías Calles. En suma, la derrotade <strong>Vasconcelos</strong> se explica porque el naciente PRI (entoncesPNR) no iba a aceptar jamás que su primer candidato, PascualOrtiz Rubio –un ilustre desconocido– fuera derrotadoen las primeras elecciones que convocaba la entonces llamada“familia revolucionaria”.Este fallido episodio político en la vida de <strong>Vasconcelos</strong>


La aventura de la Política y de la Educaciónle va a orillar a tomar el camino del exilio temporal en losEstados Unidos, en donde espera que la sociedad se manifiesteen contra del fraude electoral al poner en marcha lasacciones postelectorales que el mismo <strong>Vasconcelos</strong> proponíaen su Plan de Guaymas, sin embargo esto no ocurre,la sociedad se queda paralizada, muchos de sus seguidoresabandonan el movimiento; este hecho decepciona de maneraenorme al filósofo y se retira nuevamente del país y seva a Europa; se inician a partir de ese momento numerosascontradicciones en su vida que más adelante se detallan.<strong>Vasconcelos</strong> fue siempre hombre de ideas, un apasionadode los libros y un auténtico y natural promotor cultural;sus lecturas sobre Sócrates, Platón, Aristóteles, Plotino,Hegel, Kant, Schopenhauer, Nietzsche, Bergson, Boutroux,Taine y muchos otros, nos hablan de un hombre culto peroen constante hechura y formación; su paso como miembrofundador del famoso Ateneo de la Juventud habla de unode los primeros grupos interesados en difundir la culturanacional como una forma de igualación social y como unaoportunidad de querer demostrar que en México también sepodía hacer filosofía; no es intención por ahora en este trabajohacer un estudio acerca de los ateneístas, pero remitoal lector a interesarse por este grupo que en verdad se ubicacomo un detonador de la cultura en México justo en la primeradécada del siglo XX.En el campo de la filosofía vasconceliana encontramosreferencias hacia diversas problemáticas como el dualismo,la metafísica, la ética y la estética, sus propias clasificacionesde la ciencia, el arte, la poesía, la música y la plástica;en suma, con sus escritos hacía que la clase intelectual fijarasu mirada en sus ideas como consecuencia de lostemas filosóficos que abordaba y quizá, la manera en queobligaba a la existencia de las réplicas intelectuales.45


La aventura de la Política y de la Educación46Finalizo este breve ensayo destacando el hecho de quela contradicción fue una presencia recurrente en <strong>Vasconcelos</strong>;fue un hombre apasionado, enamorado, contradictorio,culto, terco; inicia con los ideales políticos de Madero y terminaidentificándose con Hitler y Cortés; mantiene variasrelaciones amorosas con las que nos deleita en sus memoriasdestacándose su pasión y amor por Adriana y su indeclinableidentificación intelectual y amorosa con Valeria; estosnombres, que utiliza a manera de pseudónimos, tienenla caballerosa intensión de cuidar a las damas con las quemantuvo relaciones intensas de amor.<strong>Vasconcelos</strong> defendió siempre el nacionalismo mexicanoy los valores latinoamericanos, lo cual queda expresadoen el contenido del libro La Raza Cósmica; sin embargo,al final de su vida reniega de la cultura azteca y defiende aEspaña en contra de las críticas de México y de los paíseslatinoamericanos hacia aquella nación y encumbra comoun gran hombre a Hernán Cortés (ver su Breve Historia deMéxico e Indología) denostando a Cuauhtémoc; siempre sedefinió como hombre librepensador y crítico de las religionesy al final de su vida mantiene acercamientos muy serioscon la Orden de los Franciscanos, convirtiéndose en uno desus principales apologistas; retoma con mayor fuerza sus valorescatólicos y es un defensor sobresaliente de los mismosal publicar diversos escritos en los que hace críticas muyfuertes al llamado protestantismo.Ya cercano a su muerte, la ideología que tanto conquistóla simpatía de los jóvenes mexicanos y latinoamericanoshabía desaparecido y en sus escritos finales se observabamás contradicción que lucidez; menos coherencia filosóficae intelectual, una muestra muy clara de ello es la simpatíaque siente por Hitler y Mussolini dado que les admira porel hecho de enfrentarse a los Estados Unidos y le apuesta


La aventura de la Política y de la Educaciónal triunfo de estos personajes en la Segunda Guerra Mundial,afirmando incluso que a la humanidad le esperan mejoresmomentos con ellos, es evidente que a <strong>Vasconcelos</strong> lodesmienten las atrocidades cometidas por los ideales racistasde Hitler y por las graves consecuencias que su megalomaníaprovocó.Lo que nadie le niega a José <strong>Vasconcelos</strong> es la enormelabor que como primer Secretario de Educación Pública ycomo un terco y apasionado impulsor del arte en todas susmanifestaciones, desplegó a lo largo y ancho de todo el paíseducación y cultura eran para el filósofo los dos elementosdetonantes para hacer de México y de los mexicanos un paíscualitativamente sobresaliente; en su etapa como jefe de laeducación mexicana creía ver en todo México una raza quepodía demostrar al mundo sus potencialidades; sin embargoa partir de los acontecimientos ocurridos en forma posteriora 1929 en que le arrebatan la presidencia de México,el filósofo es ya otra persona, se transformó en un ser escéptico,contradictorio, amargado; todo ello por haberse sentidosolo e incomprendido ante sus sueños y sus ideas.Nuestro Ulises de Oaxaca muere en junio de 1959 y,paradójicamente, en ese tiempo el gobierno de Méxicoestaba encabezado por Adolfo López Mateos, uno de losjóvenes que lo apoyaron en su campaña política presidencial;al mismo tiempo, la SEP era dirigida por Jaime TorresBodet, poeta e intelectual reconocido como uno de sus principalesseguidores del movimiento de 1929 y colaboradormuy cercano en las tareas educativas y culturales que se promovieronen la década de los veinte en México.47


FRASES VASCONCELIANASSobre los libros y las lecturas◆ La Ilíada fue una de las sacudidasespirituales más fuertes de mi infancia.◆ Mi pasión era la lectura, leía por mi cuentaen la casa todos los libros hallados a mano.◆◆Siempre pensaba que ningún niño habíaleído tanto como yo.De tanto meterse en lecturas, el sueñomismo parece prolongar la inmersión enlas profundidades de lo irreal.◆ El México a través de los siglos y laGeografía y los Atlas de García Cubasestuvieron en mis manos desde pequeño.◆◆◆La pequeña biblioteca ambulante de mimadre contenía los dramas de Calderón,Balmes, San Agustín, Tertuliano y laHistoria de Jesucristo de Louis Veillont.La tía María puso en mis manos LaEducación de Spencer y el Emilio, deRousseau.Leyendo las páginas en que Schopenhauerdestila amargura me sentía contagiado.49


Sobre los libros y las lecturas◆ No tenía prisa por escribir, antes de hacerlo me faltabamucho que leer, mucho que pensar, mucho que vivir.◆ Ciertos triunfos escolares y el aislamiento a queobligaba el trabajo, habían hecho de mí no sólo elchico más leído del pueblo; también el más famosocomo “aplicado”.◆ Al leer El águila y la serpiente, me doy cuenta deque Martín Luis incurre en inexactitudes, pudedarme cuenta de que le flaquea la memoria; hay querecordar que el puesto que tenía con Villa fue por mirecomendación.◆ Expulsado de mi país por las balas de Carranza y porel asco de la situación me encerré en la biblioteca deNueva York y allí tuve por patria a la filosofía griega.◆ Mi tarea no iba a ser de profesor, sino de inventor;cuanto leía era material para el futuro.◆ El escritor empieza tarde su tarea profunda.◆ El Capital de Marx no tiene nada de oscuro y sí muchode retrasado, se funda en dos filosofías caducas: Hegely Comte.◆ Copié de Gorky y Lunacharsky la edición delos clásicos.◆ Mi edición de los clásicos fue la mejor propaganda quese haya hecho a favor de México desde que el país existe.50◆ ¿Hay en el mundo persona ilustrada que niegue queel comienzo de toda lectura culta está en los autoresclásicos de la humanidad?


Sobre los libros y las lecturas◆ Mis diálogos favoritos son el “Fedro”, “El banquete”,“El timeo” y “Las leyes”, contra lo que indica sunombre, no hablan de jurisprudencia, sino de losmisterios humanos más hondos.◆ En broma le dije un día a Obregón, “lo que este paísnecesita es ponerse a leer La Iliada”.◆ Junto con los clásicos editamos y obsequiamos dosmillones de libros de lectura para primaria, cientos demiles de libros de Geografía y de Historia, pero esto locallaban maliciosamente los detractores.◆ Primero trago ruedas de molino que admitir quePlatero y yo sea un clásico…y si lo es, lo será porlo aburrido.◆ No es leer lo que seca el cerebro, sino el poco dormira que obliga el mucho leer.◆ El fanatismo se combate con libros no con ametralladoras.51


Acerca de su Madre◆ Mis primeros recuerdos emergen de unasensación acariciante y melodiosa, erayo un retozo en el regazo materno.◆ La voz entrañable de mi madre orientabamis pensamientos, determinabamis impulsos.◆ Un cordón umbilical invisible y de caráctervolitivo me ataba a mi madre.◆ Invariablemente volvía al refugio de lazona amparada de los brazos de mi madre.◆ Mi madre disimulaba el dolor de dejarme enla metrópoli para estudiar, por no separarmede ella pensé en renunciar a mis estudios.◆ Con la muerte de mi madre hubiera apetecidoalgún padecimiento mortal.◆ Cuando le pusieron los santos óleos a mimadre, redactó su testamento y dijo: “aPepe díganle que nunca olvide a DiosNuestro Señor”.53


Acerca de su Madre◆ Con la muerte de mi madre jamás volvería a ser elde antes, me hallaba fulminado, no quería alivio demi dolor, sino sufrirlo, desmesurado y eterno como lapérdida que lo provocaba.◆ Al morir mi madre, no permitió que me avisaran paraque yo no perdiera el año en mis estudios.54


Sobre la Filosofía◆ El llanto se vuelve ácido a medida que seagria el vino interior.◆ La imaginación se adelanta a la Filosofía.◆ Desde niño la palabra filósofo me sonabacargada de complacencia y misterio, yoquería ser filósofo, ¿cuándo llegaría a serfilósofo?◆ Ser un filósofo es penetrar la maraña delos hechos para descubrir el hilo conductor,remover y animar la entraña mismade la creación.◆ En el sueño se nos resuelven problemasque no atina a organizar el día.◆ Mi realización es como el milésimo demi ambición.◆ Por dura que sea una verdad tiene la ventaja,si es definitiva, de que, por lo pronto,desata la tensión, deshace la inquietud ynos permite dormir, así sea el sueño de lacongoja y el desamparo.55


Sobre la Filosofía◆ Cuando falta pureza en el alma y grandeza en la mente,la obra de las manos se paraliza.◆ La verdad no puede ser serena, debe ser agitada como latempestad y luminosa como el relámpago, firme comoel rayo que derriba las torres de la soberbia del mundo.◆ El mar es abismo, pero también es ruta y destino.◆ Nunca he comprendido el entusiasmo de los racionalistasante el hecho obvio de que el cuadrado de la hipotenusaes igual a la suma de los cuadrados de los catetos.◆ En la parábola encontraba un símbolo de alto interésfilosófico, el movimiento que se va al infinito expresadopor el signo.◆ Lo mismo en cuadrado que en círculo, el movimientoque vuelve sobre sí mismo es como la vida cotidianaque aburre y entristece.◆ El mundo no es una cosa que se explica, sino fundamentalmenteuna zona de la que hay que salir.◆ Llanto es el fluir de un dolor infinito y sin consuelo;queja de todo lo que se rompe y desata para siempre.◆ El filósofo empieza a producir después de los cuarenta.◆ Nada iguala el ejercicio del alma en la soledad.◆ No se merecen profetas los pueblos que escuchanla verdad.56◆ Qué hermoso sería limpiarse periódicamente el almacomo se lava el cuerpo.


Sobre la Filosofía◆ El juicio del alma se oscurece por el efecto de ciertocalor que va entrando en el cuerpo.◆ La capacidad para el dolor se desarrolla enormementeen la música y también la del goce.◆ El rebelde a una tiranía se convierte en apestado.◆ Lo que en mí filosofaba era el pensamiento, la emocióny la acción.◆ Las conveniencias del orden social no convencen a lasoberanía del alma y sus afectos.◆ Ciertas actitudes son parte de la tarea de nuestro viviry consiste en no dejarse imponer de las circunstanciasy sí en crearlas.◆ El corazón humano es tan vil que se consuela con elmal ajeno.◆ Irremplazable bálsamo es la poesía, disipa y ennoblecela pena.◆ Todo lo que sea deshacerse de hábitos es liberacióny ventura.◆ No es que a México le falten profetas, lo que pasa esque no los escuchan.◆ Un pueblo que pierde la fuerza necesaria para sacudirseun yugo acaba por venerarlo.◆ Ningún fragmento del cosmos se haya satisfecho.57


Sobre la Filosofía◆ El justo no encuentra en dónde reposar la cabeza; perotambién el malvado se agita, sólo que en estéril ajetrear.◆ La vejez es como la salud, frecuentemente se sienteuno viejo y luego resulta que un año después está unomás vigoroso y joven.◆ Si el ideal no ha de cumplirse jamás, mejor es padecerla perpetua tensión del imposible que resignarse a unreposo vil.◆ ¡Malhaya el que busca complacer al malvado en vezde denunciarlo!◆ Arder es el estado propio del alma.◆ El que no es honrado no encuentra a los honrados.◆ Los pillos rodean al pillo.◆ Bendito el olvido que así nos limpia la conciencia.◆ El que es inmune al asco quizá es también inmune a lainjusticia y a la felonía.◆ Varias veces he proyectado estudiar lo necesario paraescribir una monografía sobre el asco.58


La Revolución y los revolucionarios◆ Me tocó ser presentado a Madero en mipropio despacho, nuestra primera conversaciónfue breve, buscaba hombresindependientes y decididos.◆ Madero era una de esas figuras llamadasa forjar la historia, lo sostenía la convicciónde que es el ideal una fuerza queacelera el progreso.◆ El papel en que Madero gustaba de colocarseera el de reformador moral porencima del político.◆ El maderismo era una de las múltiples modalidadesdel heroísmo y casi una santidad.◆ Madero humilló a sus enemigos en loscampos de batalla y en la pugna superiorde la moral contra el delito.◆ Madero no era un político de oficio ni undemagogo, su ideología iba más allá desus planes.◆ Bajo el maderismo gozamos la ilusión depertenecer a un pueblo culto.59


La Revolución y los revolucionarios◆ Los maderistas pasarán a la historia como una aristocraciacívica.◆ Incorporé a casi todos los miembros del Ateneo al régimende Madero.◆ En nuestra historia del crimen, el sacrificio deGustavo Madero corre parejas con la emboscada queCarranza puso a Zapata, con la que Obregón y Callespusieron a Villa.◆ En Aguascalientes José Isabel Robles al verse comoministro, me dijo: “consígame un secretario letrado”,y le recomendé a Martín Luis Guzmán por lo inteligente.◆ Villa era erguido, más bien alto que bajo, ojos saltonesy por boca casi un belfo; éramos viejos amigos desdela época del maderismo.◆ Villa no fumaba ni bebía alcohol, ya se sabe lo terriblesque pueden ser estos abstemios, se me hacensiempre sospechosos de inhumanidad.◆ Villa me dijo: “desde que ya no como carne se me haquitado lo sanguinario”.◆ Los villistas plagiaban vecinos acaudalados, fusilaban pordocenas a pacíficos desconocidos y era notorio que cadamañana en el propio carro de Villa, se repartían los anillos,relojes y carteras de los fusilados la noche anterior.◆ No cabía duda de que había sido Villa el destructor delos ejércitos del gobierno huertista.60◆ Me tocó avisarle a Villa que la Convención ordenó quetanto él como Carranza y Zapata tenían qué entregar


La Revolución y los revolucionariosel mando de sus tropas; rápidamente sus ojos se leinyectaron en la forma en la que ya me habían dichoera habitual en él cuando le acometía furia homicida,pero se dominó.◆ Obregón de convencionista se pasó al lado de Carranza;varios años después declaró: “Me fui con Carranzaporque era el fuerte”.◆ Obregón usaba la famosa táctica de los cañonazos decincuenta mil pesos, “sale más barato que batirlos”,agregaba.◆ Me aventuro a afirmar que en el gobierno de Obregónno existió la corruptela de pagar con empleos públicosservicios de alcoba.◆ Antonio Díaz Soto y Gama fue la figura más brillantede la Convención de Aguascalientes.◆ La primera tontería de la Asamblea (La Convenciónde Aguascalientes) había sido declararse Convenciónde Militares, lo que dejaba fuera al elemento civil dela revolución.◆ La Convención significaba la única esperanza de concordia,la única base para empezar a construir el edificiode la revolución, la única oportunidad para librarladel caudillaje pretoriano que la estaba ahogando.◆ La Convención de Aguascalientes obrará y hablarápara bien de todos los mexicanos y llevará adelantesus resoluciones, soberanamente, por los dos derechos:el de la ley y el de la revolución; el de la razón yel de la fuerza.61


La Revolución y los revolucionarios◆ La brutalidad había de hacer pedazos todas las ilusionesque la revolución puso en la Asamblea (Convención)de Aguascalientes.◆ El hombre que animado de paz y de justicia ponga atrabajar a los mexicanos, ese será su salvador.◆ Eulalio Gutiérrez resultaría presidente de la República(en la Convención de Aguascalientes) él era un generaloterevolucionario, sencillo, inteligente y honesto◆ Lucio Blanco era un jefe valiente, buen tipo, sus repartosde tierras fueron el inicio del caos revolucionario.◆ Todo el que no se mostraba partidario ciego del PrimerJefe (Venustiano Carranza) era arrojado al extranjero.◆ El Primer Jefe (Carranza) nunca libró un combate serio,pero él y todo su séquito adoptaron el uniforme militar.◆ Carranza no podía ver ni a Obregón ni a Villa, porqueganaban batallas y él quería generales que debieran susascensos a las firmas del Primer Jefe, no a méritos conquistadosfrente al enemigo.◆ A pesar de los yerros evidentes de Carranza, fui elmás leal de sus partidarios, hasta el día en que salió deMéxico Victoriano Huerta.◆ Donde llegaba Carranza, en seguida la discordia, la vacilación,la torpeza disolvían el aparato revolucionario.◆ Sin la incompetencia de Carranza, la revolución habríatriunfado en tres meses.62◆ El Primer Jefe era ciego, sordo, torpe y mudo.


La Revolución y los revolucionarios◆ A ninguno de los despotillas le he tenido la pacienciaque demostré a Carranza, el hombre en su torpezadaba lástima.◆ Llevado de su odio a Madero, Carranza enterraba elPlan de San Luis en la cuestión agraria y dejaba enfunciones el plan de Santa Anna, el plan de todas las“Altezas Serenísimas”.◆ Carranza cayó, no como debiera y según quisimos derribarlosus enemigos, por medio de una protesta nacionaly arrastrado por un lanzamiento popular; cayópor la traición de los suyos.◆ Todos conocíamos las dotes bien modestas de Carranza,sus antecedentes vacilantes, su inteligencia corta.◆ En mis tiempos de ministro con Obregón, fui uno delos mejores amigos de Villa, periódicamente me enviabamensajes afectuosos.◆ Obregón estaba destinado a convertirse en destructorde su propia obra; durante los años que gobernó por intermediode Calles no hubo quien continuara lo buenode su administración.◆ Con su visión tan clara de la realidad, Obregón se dabacuenta del odio que acumulaba y decía, “duraré hastaque alguien se decida a cambiar su vida por la mía”.◆ Obregón me dijo, “licenciado, en este país, si Caín nomata a Abel, entonces Abel mata a Caín”.◆ La muerte de Villa, aplaudida sin reservas por los callistas,fue para todo el mundo la prueba de que el go-63


La Revolución y los revolucionariosbierno (Obregón y Calles) estaba resuelto a imponerse,aplastando la oposición sin misericordia.◆ Por indiscreciones de reporteros se supo que diez díasantes del asesinato de Villa, un grupo de catorce hombresuniformados había alquilado la casa de dondepartió el asalto; alguien había reconocido a un caballerangoque era de la escolta de Calles.◆ Obregón violaba el principio antirreleccionista ytraicionaba a los revolucionarios para imponerse comopresidente reelegido.◆ Sobre la reelección de Obregón, no se opina, se escupe.◆ Calles se dedicó a destruir el catolicismo mexicano, deahí los fuertes apoyos de los Estados Unidos.◆ El callismo ofreció intensificar la educación rural, asícomo ilustrar a los indios, pero suprimió a los maestrosmisioneros; los indios volvieron a quedar en abandonoy convertidos nada más en asunto de propaganda.◆ El callismo nunca cerró un periódico, pero a todos losenmudeció con el atropello, los obligó al elogio.◆ En junta de ministros, Calles no abría la boca, sólo decuando en cuando se apretaba la pantorrilla acalambradapor la neuritis; el alcoholismo, una juventud vulgar,las secretas orgías y el vapor de sangre de recuerdosmacabros le mantenían hosco y silencioso.◆ Joaquín Amaro estaba aprendiendo a leer y escribir,pero solicitó y obtuvo el premio de ser el director delColegio Militar de la Nación64◆ Felipe Carrillo era alto, enjuto, bien parecido y tenía


La Revolución y los revolucionariosojos verdes; los oradorcillos alquilados aseguraban queaquellos ojos eran de jade, de los antiguos mayas; en realidadprocedían de otra península, eran ojos de español.◆ No merece Plutarco Calles entregar el poder pacíficamente;el honor nacional exige que termine como empezó,manchado de sangre, pero esta vez con la suya,no con sangre de mártires.◆ No pudiendo cumplir Calles con sus desaforadaspromesas electorales, inventó la persecución religiosa.◆ Bastante caro pagó la nación el doctorado políticode Calles.◆ En la muerte de Obregón el culpable principal es unoque presidirá sus funerales.◆ Calles ha sido el matón más eficaz de toda nuestracarnicería.◆ Ningún dictador mexicano arrojó más gente fuera delpaís que Carranza.◆ Carranza causó más dolor en el seno de las familiasmexicanas que todos los déspotas de América, a excepciónde su discípulo la Plutarca viuda de Morrow.◆ Felipe Angeles fue condenado a muerte por borrachinesde la plana mayor carranclana (Carrancistas)◆ Felipe Angeles era un hombre distinguido a quien lasuerte le dio una o dos oportunidades de hacer algogrande, careció siempre del arrojo necesario para aprovecharun momento decisivo.65


La Revolución y los revolucionarios◆ Si Felipe Angeles, en los días del levantamiento de laCiudadela contra Madero, en vez de someterse cañoneael Palacio, hubiera salvado al Presidente y habríaasegurado la presidencia para el período siguiente.◆ Emiliano Zapata, hosco y desconfiado, no se dejabaver sino rodeado de escoltas y rara vez abandonaba sucuartel inmediato a la metrópoli.◆ Zapata se presentaba en público vestido de charro,águila bordada de oro en la espalda, botonadura deplata riquísima y sombreros que se exhibían en los escaparateslujosos de la ciudad.◆ A través del zapatismo, las clases adineradas del paíshabían minado la autoridad de Madero y procurabanutilizar la vanidad y la estulticia del jefe sureño.◆ A Zapata lo mató Carranza en la emboscada más ruinde la historia.◆ El asesino de Zapata, un tal Guajardo, recibió de manosde Carranza su ascenso a brigadier.◆ Los escritores yanqees fueron todos parciales con Zapata,sabían que era un indio y siempre hay en ellosla esperanza de que el indio se vuelva en contra de lacivilización española de México.◆ De Zapata se llegó a inventar tanto que, antes de la revoluciónrusa, el mito internacional socialista era el de Zapata.◆ Los Flores Magón, son los únicos radicales conscientesy leídos que ha habido en México.66◆ Siempre admiré el celo apostólico, el carácter de hierrode Ricardo Flores Magón.


La Revolución y los revolucionarios◆ Pobre revolución nuestra, carente de credo propioporque se ha creído que pueden un Zapata analfabeto,un Calles aspirante a maestro de aldea convertirse ensabios y reformadores.◆ En México la revolución, de haber caído en manos menosindoctas, pudo hacer posible la llegada de la clasemedia al mando, puesto que es la depositaria de la culturay la creadora de valores.◆ En mi ánimo la revolución entera se había convertidoen pesadilla de caníbales.◆ El zapatismo auténtico era una explosión de odios yrevancha de ilotas, no tenía, no pudo tener nunca unadoctrina, el Plan de Ayala era una copia del Plan de SanLuis, de Madero.◆ A la hora de gobernar, la barbarie inculta tenía querepetir los dictados de la intelectualidad revolucionaria,por mucho que la odiase.◆ Yo fui antizapatista cuando Zapata tenía poder.◆ Nunca he transigido con los que se han puesto a rehabilitara Zapata.◆ Obregón se pasó de porfirista sus mejores años y sehizo maderista al triunfo de Madero.◆ El general Obregón será a la larga, una víctima de Calles.◆ En la época que yo traté a Obregón, se sentía queridopor la mayoría, siempre mantuvo la sonrisa de losfuertes, la serenidad del que domina.67


La Revolución y los revolucionarios◆ Apenas tomó posesión Calles, comenzó la era de losgrandes negocios de los funcionarios.◆ Portes Gil, presidente de paja, la gente le decía elPelele, porque Calles lo había sacado de la oscuridad yvenciendo su mala fama en los negocios de Tampico ysus antecedentes de abogadillo de Victoriano Huerta lohicieron presidente provisional.◆ Le salió a Ortiz Rubio el mote de “Tutankamon”, o sea, lamomia política que los del gobierno andaban exhibiendo.◆ Ortiz Rubio, exhuertista de menor categoría, resultabael presidente pelele número dos.◆ Abelardo Rodríguez, resultaba presidente, era oriundode Arizona; hablaba mal el inglés y peor el español.68


La Política◆ No falta quien juzgue inepto y estérileso de tener dividida el alma entre dospropósitos aparentemente contradictorios:la política y la ciencia o el arte.◆ En el bajío es donde se libran los combatesdecisivos de nuestra historia.◆ Los pueblos que prescinden de la fuerzapara hacer respetar sus derechos pisoteadosson pueblos en decadencia, castas de pariassin porvenir que merecen lo que les ocurre.◆ Las muertes odiosas, son las muertes cobardes:la del prisionero ya vencido; lasdel tirano que asesina sin riesgo.◆ No se organiza una revolución, una revoluciónes brote popular, lo más que puedehacer el líder es crear ambiente revolucionario,psicología revolucionaria.◆ La libertad no es buena cuando se gana encomplicidad con enemigos extranjeros, yésta es la mancha de nuestra Independencia,y por eso no acabamos de conquistarla Libertad ni la Independencia.69


La Política◆ La corrupción no viene del ambiente, la difunde comouna peste el mal gobernante.◆ Ni el escritor, ni el profesional, ni el político podránconsumar tarea de fondo si no se someten a regla casimonástica.◆ En el poder, como de costumbre, están los ajusticiadores,y el rebaño lamentable de los habitantes sigueentonando la canción de su ceguera sin honra.◆ Destruir a Villa y a Zapata después de haber destruidoa Carranza, tal era nuestra misión (de la Convención deAguascalientes) y para lograrla buscaríamos el apoyode todos los mexicanos honrados.◆ Antonio Caso ni daba órdenes ni nunca las había dado;nadie como él para decir un discurso académico, perosus capacidades administrativas eran nulas.◆ Vicente Lombardo había sido un buen auxiliar de laadministración de Victoriano Huerta.◆ Diego Rivera, el antiguo pensionado de la dictadura porfirista,pronto fue el pintor oficial del régimen de Calles.◆ José Manuel Puig Casauranc no era otra cosa que unpolítico ramplón elevado a la categoría ministerialporque fue de los primeros en sumarse a Calles.◆ Los pueblos que esperan que les digan por quién han devotar están perdidos.◆ Un buen gobernante no debe lamentarse de que nohaya justicia; debe imponer la justicia.70


La Política◆ Hace falta que el país designe para su gobierno a losmejores y a los ilustrados, no a los peores, no a lospalurdos.◆ Un ministro que no tiene autoridad moral para lograrmayorías en la Cámara, debe de retirarse del gabinete.◆ Pagar a nuestros acreedores será rescatar nuestrasoberanía.◆ El capitalismo ha de desaparecer porque traicionala libertad.◆ La doctrina marxista prescinde del honor, la lealtad, lahonradez, a pretexto de que son virtudes burguesas.◆ Los marxismos tienen que fracasar y las ambicionesmediocres de los estados totalitarios sabrán que elhombre ha de colocarse por encima de sus obras.◆ Un ignorante, un hombre sin escuela, metido a gobernarno puede ser honesto.◆ Un gobierno capaz de cumplir requiere el más complejoconocimiento de la realidad, requiere un sabio, esdecir, un filósofo.◆ Nada de dictaduras del proletariado o del partido, sóloson pretexto para el abuso de una pandilla de criminales.◆ El peor mal de las dictaduras es que acaban con ladignidad, siembran la desconfianza, hacen que lagente suponga que son iguales todos, los honrados ylos bribones.71


La Política◆ Desprecio a los poderes del mundo que sean poderesde iniquidad o de estulticia.◆ Toca al Estado mediar en los conflictos de todos losfanatismos en vez de abrazarse a uno de ellos.◆ No es posible la vida civilizada ahí donde la usurpacióny el atropello quedan impunes.72


El Destino◆ Desde niño supe que estaba yo llamado amanejar ideas.◆ Yo sería uno a quien se consulta y a quiense sigue.◆ A los diez años ya me sentía solo y únicoy llamado a guiar.◆ El futuro me sonreía ilimitado de dichas yéxitos, tan intenso lo soñaba que a menudola cabeza me ardía de esperanza y anticipadascertidumbres.◆ No me arrepiento de haber seguido la exigenciade mi destino; cualquiera que ellasea, la dicha consiste en seguir la propiamisión, no en contrariarla.◆ Unos cuantos años de tesón en las aulas ydespués la prosperidad y la gloria.◆ La certeza de mi destino me levantabaen vilo.◆ La providencia me ha librado hasta hoyde dos pecados únicamente: la blasfemiay la sodomia.73


El Destino◆ No nos dice el presentimiento la fecha aproximada delsuceso; pero sí en ocasiones, lo señala, lo anticipa luminosamentea la imaginación.◆ Son las fallas y limitaciones de nuestra naturaleza lasque determinan el porvenir.◆ Del porvenir yo poseía ya algunas certidumbres, lavida mía no iba a ser cosa corriente.◆ La profundidad de ciertos hábitos de la infancia sepone de manifiesto cuando nos encontramos enfermos,extenuados, solos.◆ Por encima de todas las circunstancias externas y secundariasestá la misión que el espíritu nos ha señalado.◆ En el fondo de cada destino, hay semioculto el granode lo que seremos en la vida futura.◆ Un destino más fuerte que nuestra voluntad rige las circunstanciasfundamentales de nuestra vida.◆ Mas diestro que nosotros, el destino que nos rige nosdeja caer, luego nos levanta, su meta está más allá, enlo incorruptible y eterno.◆ El misterio no se resuelve del todo, pero se aclara cuandocontemplamos el destino.◆ Ni para la simple crítica tiene sosiego el que está urgidopor la magnitud de su destino.◆ Nada valen en sí las mejores ocurrecias de un destinocuya esencia es el error.74


El Destino◆ Cierta piedad, como la que esperamos del CreadorOmnipotente, ayuda a tolerar lo que somos, sin destruirnospor asco.◆ Siempre quise andar por el mundo, sin ruta precisa, deteniéndomea comer donde hiciera hambre, echándomea dormir cuando lo exigiese la fatiga en la primera posadaque anunciase cama y lavabo.75


El Amor y las Mujeres◆ Adriana fue la mujer que ejerció tanta influenciaen cierta época de mi vida.◆ Adriana, por encima de todo y sin excusasni hipocresías: me gustaba, me embriagaba,me enloquecía.◆ Aun cuando no le hablaba a Adriana en horasy horas de estar juntos, estaba allí y eso bastabaal equilibrio de mi alma; en cambio sise retiraba, todo parecía derrumbarse.◆ La más dolorosa situación entre dos seresque han de convivir es cuando llegan a nopoderse hablar.◆ Señor, esta que está aquí (Adriana) es la mía,y la otra (su esposa) fue mi equivocación;bendice a la esposa inocente y castígame amí, pero no me quites a la culpable.◆ No hay desgracia más punzante que laausencia de los que se aman.◆ La perfecta clara dicción es lo que siempreme ha seducido de una mujer.77


El Amor y las Mujeres◆ La mujer que me buscase para obtener favores a cargodel presupuesto no me encontraría.◆ Se debe buscar el remedio de los males de amor en elamor absoluto.◆ La pasión se va concretando a través de nuestro tránsitoterrestre en una serie de amores.◆ Lo que interesa es el grado en que uno quiere, no elgrado en que lo quieren.◆ Valeria, guapa, despejada, elegante como siempre, concualquier trapo.◆ Recordaba a Valeria, sus dedos y cuello largos y ciertaelegante sinuosidad de cuerpo con casta.◆ Valeria tenía un talento que llegaba al genio, su rostromarcado por el infortunio y la grandeza.◆ Una de las más grandes mujeres que el país ha producido,con talento, hermosura, morena, bien hechay elástica, ejemplar de fina raza nativa, su fuerza, sinembargo, estaba en su espíritu. (Valeria; así llamo aAntonieta Rivas Mercado)◆ Hallé en Valeria una prolongación de mi propiaconciencia.◆ No era posible discutir con Valeria, su buena crianzaeludía las escenas; severa en sus juicios, solía faltarlecaridad con ella misma, resultaba implacable para desnudartoda bajeza.78


El Amor y las Mujeres◆ Sobre mi mesa estaba una carta: en este momento salgoa cumplir lo que te dije (el suicidio de Valeria); no mellevo ningún resentimiento; sigue adelante con tu tareay perdóname, ¡adiós!◆ Hay noticias dolorosas que nos fulminan, pero aquellaejecución (el suicidio de Valeria), fría, deliberada, meprodujo confusión, me dejó atónito, insensible; empezabael calvario de mi propia existencia.◆ Sólo el amor entiende y por eso sólo el amor corrige.◆ Quien no se mueve por amor verá que la misma justiciase le torna venganza.◆ Cada vez que he caído en obsesión amorosa, sin excluir elmatrimonio, una voz profunda me acusa de estar traicionandomi vocación, que fue, desde la cuna, de ermitaño.◆ El leve roce de las caderas que liga los cuerpos, sincronizalas almas de dos que se han unido en la ilusiónde la eternidad.◆ Desde Dionisios a Don Juan, la ley del verdaderoamante es dejarse devorar de las mujeres.79


Fe y Religión◆ Mi mundo era el del espíritu y no teníatiempo para abrir los ojos en derredor.◆ La pasión de la ciencia no menguaba mife ardorosa.◆ El entusiasmo científico me tomaba todoel día y por las noches la oración me llevabaal mundo de mi infancia donde mimadre era maestra y ejemplo.◆ Dios traba la lengua a mis enemigos, seles joroba el ánimo cuando intentan contradecirme,pues he padecido por tenersiempre la razón.◆ El único dogma válido es el dogma dela moral.◆ Mi Dios personal es Jesucristo, yo nuncahe renegado de mi cristianismo◆ La muerte misma no es otra cosa que laantesala de la resurrección.◆ Cierta piedad, como la que esperamos del81


Fe y ReligiónCreador Omnipotente, ayuda a tolerar lo que somos,sin destruirnos por asco.◆ Cada alma noble, con sólo soñar despierta, evoca amorosamentelas personas y los episodios de su particularacaecer y disfruta la ilusión de que todo ha de recobrarseen lo eterno.82


La Cultura y el Arte◆ Mi aspiración era hacer de México unametrópoli del continente latino; una Atenas,no por la ridícula pretensión de emulara la antigua, sino por el amor a la cultura.◆ México tuvo universidad antes que Bostony bibliotecas, museos, diarios y teatroantes que Nueva York y Filadelfia.◆ Las pasiones con todo y sus riesgos sonalgo más puro y sólo mediante ellas sepenetra en los misterios del gran arte.◆ El arte exige una preparación como desacerdocio.◆ El arte es individual y únicamente los mediocresse amparan en el gregarismo deasociaciones.◆ A veces se utiliza la institución de la culturapara recompensar servicios non sanctosde damiselas más o menos seductoras.◆ La contemplación directa de las iglesias yde los palacios me serviría de acopio parael libro Estética que sería la culminaciónde mis tareas intelectuales.83


La Cultura y el Arte◆ La acción del hombre extraordinario es irremplazable,por eso es tan lenta la tarea de la cultura.◆ Las distintas formas del arte y la literatura tienen elvalor de una técnica de lo espiritual incorruptible.◆ Lo que vale del México artístico es lo que dejó la Colonia.84


La SEP y la Educación◆ Las dos empresas más discutidas de migestión en la SEP fue la publicación dela revista El Maestro y la edición de losclásicos.◆ Los niños no estorban el pensamiento.◆ El intelectual mexicano vive apocado.◆ Se da el caso único en la América españolaque el hombre de colegio, el universitarioes desplazado por el rufián y elignorante.◆ Es arriesgado el método de ponerse a improvisareducadores.◆ En un pueblo como el nuestro, enfermo deun justificado complejo de inferioridad, latarea del educador es despertar los ánimose infundir confianza en las capacidades dela gente.◆ A Lunatcharsky se debe mi plan educativomás que a ningún otro.◆ Mi plan educativo fueron escuelas, bibliotecasy Bellas Artes.85


La SEP y la Educación◆ Establecí la enseñanza indígena cuyos maestros imitaríana los misioneros católicos.◆ Maldigo a las escuelas que dejan en sus alumnos daltonismoen los valores.◆ Me alejé de los placeres y de la voluptuosidad, la secretaríaque estaba creando era mi amada exclusiva.◆ Si pude hacer fecundos los cuatro años escasos de mi laborministerial, es porque tuve sujeta la apetencia sensual.◆ Una de mis preocupaciones era recoger los hilos de loque había dejado Justo Sierra, el más ilustre de misantecesores.◆ Los normalistas eran la osamenta poderosa del cuerpoeducativo nacional.◆ Nunca pagaré mi deuda de colaboración a los centenaresde maestros de ambos sexos que en todo el paístomaron las labores de la SEP como misión de patriotismoy tarea personal fervientemente cumplida.◆ Creaba puestos, pero en general los reservaba para losmaestros titulados.◆ Plumas de cieno propalaron la especie de que yo gastédinero en propaganda; nunca podrán demostrarlo, lamejor propaganda son las obras y esto no lo entiendenlos estériles, los impotentes.86◆ Subsiste en cierto elemento político ignorante la creenciade que los puestos educativos son el residuo dela administración y sirven para cubrir compromisosmenores en obsequio de protegidos y parientes.


La SEP y la Educación◆ A los principales funcionarios de educación los toméde la vida privada y no de los cuadros de la burocracia,mucho menos de la política.◆ Los miembros de las misiones culturales llegaban a lospueblos sin un centavo en el bolsillo y al cabo de dosquinquenios habían levantado capilla y aulas, talleresy campos de cultivo.◆ Lo que el país necesita es gente que ya sepa lo que hayqué hacer y se dedique a ello con sinceridad.◆ Los maestros, los músicos, los técnicos, todo lo quees el espíritu de la enseñanza, aquí abunda y no locambiamos.◆ Un día me llegó un mensaje por telégrafo en el que losestudiantes de Colombia me nombraban “Maestro dela Juventud”.◆ No me inspiro en Boston para mis reformas educativassino en Xochimilco.◆ Para el cultivo de la Música contamos principalmentecon dos hombres extraordinarios: Julián Carrillo y donJoaquín Beristain.◆ Tenía que sostener una lucha diaria para defender alMinisterio de Educación de las intromisiones de lospolíticos.◆ Si no sabemos darnos garantías y educación en nuestrapatria ¿cómo vamos a esperar que en el extranjero senos trate como civilizados?87


La SEP y la Educación◆ Peste es la ignorancia que enferma el alma de las masas;la mejor acción de patriotismo consiste en queenseñe a leer todo el que sabe, a quien no sabe.◆ A falta de un maestro completo como el fraile, empezamosa mandar grupos de maestros: uno de artesaníaspara enseñar a labrar la tierra y a forjar el hierro; otrode educación artística y otros para las primeras letras ylas matemáticas. (Misiones Culturales).◆ La obra de la SEP debía de ser triple en lo fundamental(escuelas, bibliotecas y Bellas Artes) y quíntuple en sumomento (incorporación del indio a la cultura hispánicay desanalfabetización de las masas).◆ Mi ideal del preparatoriano era hacer un tipo de eficienciafísica, moral e intelectual.◆ Todo lo hecho en la SEP se vendría abajo lentamente alproducirse un régimen como el de Calles, cómplice dela vieja intriga contra todo lo mexicano.◆ Obregón le dijo a Gastélum mi subsecretario, “québuen presidente sería <strong>Vasconcelos</strong>, lástima que…”88


EPÍLOGOHemos llegado al final de este breve textocon la idea inicial planteada que fue la deacercarnos de manera sencilla a <strong>Vasconcelos</strong>;justo en este momento se tiene que decir quenuestro personaje dio a conocer sus últimasideas y reflexiones en un pequeño libro que setituló En el ocaso de mi vida; en él, nuestrofilósofo ha llegado a la vejez y siente cercanala muerte, los escritos que contiene esta obrason artículos que publicó en varios periódicosen los últimos años de la década de los cincuentasdel siglo XX que le tocó vivir.Se aprecia que <strong>Vasconcelos</strong> valora muchola tarea de los periódicos como instrumentosque sirven para dar a conocer las reflexionesde quienes quieren expresar sus pensamientosy, les otorga un valor enorme al saber que sonun medio que llega con facilidad a un públicomayor; el género del artículo periodístico recibelos elogios del educador; es la década delos cincuentas del siglo XX mexicano y lasreflexiones desarrolladas por él son de unadiversidad temática que el filósofo sigue abordandocon lucidez, a pesar, de los estragos deuna edad avanzada.89


EpílogoEl Ulises mexicano ha llegado más allá de las sietedécadas de vida y los cambios ideológicos y el descensopasional de sus ideas es muy evidente, se acerca lamuerte; a esta, el filósofo la espera con serenidad y con elescudo de su renovado apego al cristianismo incubado porsu madre; su cercanía religiosa es incuestionablementemilitante; sus menciones a Dios, a la religión católica y ala orden de los franciscanos es una constante; el mismodiscurso que fue famoso por su capacidad de arenga es yade una mesura innegable y sus ideas principales tienen uncariz eminentemente conservador.Otras constantes de sus ideas que expresará siemprees su identificación hacia los jóvenes y por supuesto suindeclinable identificación hacia las tareas educativas yculturales como vehículos indestructibles para lograr elavance cualitativo de las personas y de la propia nación.En tal sentido, y para seguir con el formato desarrolladoen la segunda parte de este libro, deseamos compartiralgunas de las frases e ideas que José <strong>Vasconcelos</strong>nos expresa en el libro citado líneas arriba; seguramente,advertiremos algunos planteamientos novedosos; otrosya muy conocidos y, sin duda, nuevamente apareceránlas expresiones y adjetivos que nos demuestran que enefecto, este pensador, fue un perseguido constante de lacontradicción y de la polémica.Conozcamos pues sus postreras reflexiones y que cadalector tome partido por alguna de ellas, de lo contrario,que por lo menos sirva este breve libro para conocer unpoco la vida de este educador mexicano90


En el ocaso de mi vida◆ Aquel que no es un descontento, vale másque no escriba.◆ Al escritor libre le están reservadaslentas torturas y fracasos.◆ En el artículo del periódico el escritor encuentraun instrumento ágil y claro, cortoy pertinente, capaz de remover conciencias.◆ La realidad que nos circunda es baja, sensualy perversa.◆ Por doquiera triunfa el fariseo, pero tambiénoportunamente surge el profeta.◆ Mi código es el Evangelio.◆ Yo no voy a la fe por la razón sino por laexperiencia.◆ A la amistad debo las mayores satisfaccionesy los mejores éxitos de mi vida.◆ La vida nunca nos da ni siquiera unaparte de lo que promete.91


En el ocaso de mi vida◆ La estupidez con que usamos el libre albedrío es laraíz de los males.◆ El alma cambia de objetivos pero nunca se satisface.◆ Al fusilado le apagan los gritos, pero no la protestadel corazón.◆ Mientras subsista un dolor en el mundo, no puede serfeliz una conciencia despierta.◆ El que sonríe a la injusticia es el esclavo verdadero.◆ Los pueblos sin profetas nunca llegan a la concienciade sus destinos.◆ La mentira siempre se ampara en documentos.◆ Con la verdad se hace historia, se hace vida, sehace literatura.◆ Desde la crucifixión a la fecha, es interminable la seriede los que tienen qué padecer persecución.◆ La grandeza del mártir se mide por el poderío desus enemigos.◆ El vencedor hace la historia pero es una historia quedura lo mismo que su poderío.◆ Los malvados con educación son más peligrosos quelos perversos sin escuela.92◆ La falta de instrucción ética en nuestras escuelas, produceuna generación que no reconoce más dioses quela riqueza y el placer.


En el ocaso de mi vida◆ Nada importan la Física, Química, Biología y la Historiasi el joven educado carece de carácter moral.◆ Se tiene el deber de ser estudiante toda la vida.◆ Toda una eternidad no basta para corregir una injusticiaque ha quedado sin reparar.◆ El tiempo no consuela, simplemente burla y extenúa lavoluntad.◆ El amor toma partido, sufre y goza, no tiene tiempopara la ironía.◆ La única manera de unir y gobernar es la persuasión yno la coerción.◆ No puede haber cultura genuina sin una atmósfera delibertad efectiva.◆ Todas las artes son una aspiración al Verbo.◆ El Verbo también es fin y meta del arte.◆ El que no ama a la especie no amará tampoco a sucónyuge.◆ En Europa vive lo mejor de la humanidad, lo mejor delos últimos dos mil años.◆ Una culpa confesada es un peso que se aligera.◆ La luz y el aire de la verdad son para la concienciaelementos tan necesarios como el sol y el viento paralos planetas.93


En el ocaso de mi vida◆ Al precio que tienen los libros sólo los ricos puedencomprarlos.◆ Las almas necesitan el azote de las pasiones profundaspara salir de la serenidad..


BIBLIOGRAFÍABLANCO, JOSÉ JOAQUÍN, Se llamaba <strong>Vasconcelos</strong>,Ed. Fondo de Cultura Económica, México,1999.SKIRIUS, JOHN, <strong>Vasconcelos</strong> y la cruzadanacional, Ed. Siglo XXI, México, 1997.VASCONCELOS, JOSÉ, En el ocaso de mi vida,Ed. La Prensa, México, 1957.–– Ulises Criollo, Ed. Trillas, México, 1999.–– La Tormenta, Ed. Trillas, éxico, 2000.–– El Desastre, Ed. Trillas, México, 2001.–– El Proconsulado, México, 2003.95


Breve introduccióna <strong>Vasconcelos</strong> de OctavioArellano Reyna, se terminóde imprimir en noviembre de2007. Para su formación se usarontipos times de 9.5 pts. EdwardianScript ITC de 24 y 39 pts.Snell Roundhand de 46y 22 pts. y TrajanPro de 7 pts.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!