Cine y literatura

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nº 113 • año XVIIjulio - agosto 2015culturalCine y literaturaLa apuesta cultural de Funespaña con los jóvenesEscriben:Jesús Pozo Págs 3-5. Ana Baquera Págs 6-7. Pedro Cabezuelo Págs. 8-9.Marina Bolaños Págs 16-17. Javier Gil Págs 24-25. Yolanda Cruz. Pág 28.Alcalá la Real y su cementerio del tiempoPágs. 12-15.

nº 113 • año XVIIjulio - agosto 2015cultural<strong>Cine</strong> y <strong>literatura</strong>La apuesta cultural de Funespaña con los jóvenesEscriben:Jesús Pozo Págs 3-5. Ana Baquera Págs 6-7. Pedro Cabezuelo Págs. 8-9.Marina Bolaños Págs 16-17. Javier Gil Págs 24-25. Yolanda Cruz. Pág 28.Alcalá la Real y su cementerio del tiempoPágs. 12-15.


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ACTUALIDADUna jornada de cine con alumnos de primaria y una proyección de cortometrajes para adultoscoordinados por Yolanda Cruz; la presentación del libro de Joaquín Araújo “Siente la vida: el bosque”;el estreno del documental “La muerte es el futuro” de Ana Baquera y la distribución del texto ganadordel XV Concurso de Tanatocuentos “Cosas que hacer después de morir” de Marina Bolaños Urruela,fue la apuesta cultural de Funespaña en la reciente Funermostra celebrada en Valencia.Funespaña lleva fuera deFunermostra la CULTURAcon CINE y LITERATURALa actividad conlos niños delcolegio Lluis deSantangel de ElSaler consistió enun taller de ciney dibujo sobre elciclo de la vida.a d iósDIRECTOR:Jesús PozoNúmero 113Julio-Agosto 2015EDITA: Funespaña, S.Ainfo@revistaadios.esREDACTORA JEFE:Nieves ConcostrinaCOORDINADORA:Isabel MontesDISEÑO :Román SánchezFOTOGRAFÍA:J. CasaresJesús PozoCOLABORAN EN ESTE NÚMERO:Joaquín Araujo, Ana Baquera, Marina Bolaños, PedroCabezuelo, Carlos Santos, Ana Valtierra, Javier delHoyo, Javier Gil Martín, Yolanda Cruz, Pilar Estopiñán,Javier Fonseca y Ginés García AgüeraREDACCIÓN, ADMINISTRACIÓNY PUBLICIDAD: C/ Doctor Esquerdo 138. 5ªPlanta 28007 Madrid.TELF.: 917003020Un centenarde niños yniñas delcolegio público Lluis deSantangel de El Saler(Valencia), asistieron durantela última jornadade Funermostra (Feriainternacional de productos y servicios paralos servicios funerarios) al taller “Los cuentos,la magia y el ciclo de la vida a travésdel cine”, organizadas por Funespaña en colaboracióncon el festival de cortometrajes Visualízame,Audiovisual & Mujer de FundaciónINTERNET: www.revistaadios.esE Mail: prensa@funespana.esIMPRIME: JOMAGRAF COMUNICACIÓNPRODUCCIÓN: José Luis MartínDEPÓSITO LEGAL:M-32863-1996La opinión de los artículos publicados no escompartida necesariamente por la revista y/o losInquietarte. Esta fue una más de las actividadesparalelas que Funespaña organizó conmotivo de su participación en Funermostra,con la cultura como principal eje y fuera delrecinto de su espacio en Feria de Valencia.“Funespaña continúa proponiendo laimagen, como elemento dinamizador de larefl exión y la cultura de la muerte y así seha trabajado en la pasada edición de Funermostra,que se celebró en Valencia entrelos días 27 y 29 de mayo, en colaboracióncon Fundación Inquietarte”, explica JoséVicente Aparicio, subdirector General de Funespaña.De hecho, la compañía mantieneeditores, y la responsabilidad de la misma recaeexclusivamente sobre sus autores.© Funespaña, S.A.Madrid, 2015Todos los derechos reservad os.Contenidos periodisticos producidospor Candela Comunicación S.L.Publicidad en Adiós:Siluro Concept: Telf: 91 366 47 79número 113 • a d iós • 3


ACTUALIDADun premio al corto que mejor refl exiona sobrela muerte y el duelo en el Festival Visualízame,que organiza Fundación Inquietarte desde haceya cinco años.El ciclo de la vida en el colegioLa proyección y la unidad didáctica desarrolladascon el alumnado de 3º, 4º y 5º deprimaria del C.P. Lluis de Santangel, estuvocoordinada por Yolanda Cruz, directora delFestival Visualízame. Los jóvenes y entusiastasasistentes refl exionaron sobre el ciclo dela vida tras asistir a la proyección del cortometrajeO’Xigante de Luis Da Matta Almeiday Julio Valenzer, fi nalista del premio especialFunespaña en la III edición del festival y expresaronsus pensamientos acerca del papelque desempeñan ellos en dicho ciclo: Paraello realizaron un taller de dibujos inspiradosen la metáfora visual del corto de Da Mattay Valenzer.Por otra parte, durante la tarde del primerdía de Funermostra, Funespaña organizó otrade sus actividades. Desde las seis de la tardese celebró la jornada “<strong>Cine</strong>, Muerte y Duelo”,en el Palacio Cerveró de la Facultad de Medicinade la Universidad de Valencia, cuyaactividad gestiona el Aula de <strong>Cine</strong> de la Universidad.A esta jornada, que fue inauguradapor el director general de CulturArts, José LuisMoreno, y por José Vicente Aparicio en representaciónde Funespaña asistieron numerososcortometrajistas valencianos con los que serealizó un interesante coloquio.El programa de la jornada del miércoles enel Palacio Cerveró incluyó la proyección de unaselección de cortos valencianos y otra con loscortometrajes ganadores de las, hasta ahora,dos ediciones del premio especial Funespaña,así como alguno de sus fi nalistas, y una mesaredonda en la que intervinieron los realizadoresy productores de los cortos emitidos y quemoderó la directora del Festival Visualízame deFundación Inquietarte, Yolanda Cruz. El actofue presentado por el subdirector general deFunespaña, José Vicente Aparicio quien resaltóla necesidad y la apuesta de la compañíapor trabajar desde la cultura y refl exionar sobreel ciclo de la vida, acercando a la sociedadla visión de la muerte desde el punto de vistadel sector funerario.Funespaña, por otra parte, presentó ensu espacio de Funermostra el documental“La muerte es el futuro” de la realizadora AnaBaquera Gómez. La idea ha sido construir unpuente entre la sociedad y el sector que estáavanzando muy deprisa. El documental es elproyecto fi n de grado de los estudios de ComunicaciónAudiovisual y Periodismo que hafi nalizado en la Universidad Europea de Madridy con el que ha colaborado activamente Funespañaen la producción del mismo.Un documental, un libro y un cuentoAna Baquera explicó durante la presentaciónde su trabajo al numeroso público que acudió alestand de Funespaña que “me sorprende quela gente no sea consciente de que este sectorestá evolucionando y me reafi rmo en la idea deque hay dos partes que están condenadas aEl subdirector general de Funespaña, izquierda de la foto, también presentó en el standde Funespaña el documental “la muerte es el futuro” de Ana Baquera, junto a él.El stand de Funespaña en Funermostra 2015 conun claro mensaje de apertura a la sociedad.4 • a d iós • número 113


ACTUALIDADPresentacióndel Concurso deCementeriosFunespaña tambiénpresentó en Funermostrala II Edición del Concursode Cementerios quetanto éxito cosechó ensu primera edición elpasado año. Justo alentrar, en el pabellón deexpositores se colocaronuna serie de panelesinformando sobre lasbases del concurso ycon amplia informaciónsobre los ganadoresde la primera edición:los cementerios deBurguete, Roncaly Alcoy.José Vicente Apariciojunto a YolandaCruz durante lapresentación de lasjornadas de cine conlos cortometrajistasvalencianos. Juntoa ellos, el directorgeneral de CultartsFilmoteca de Valenciay a la izquierda, eldirector del aula decine de la Universidadde Valencia, IgnacioPalau.entenderse: el mundo funerario y la sociedadque, a la postre, tienen que interactuar. Cuandoempecé el documental ni imaginaba que se estrenaraen una feria funeraria a nivel nacional.Creí que esto iba a ser una documental de 15minutos y al fi nal me he ido a 45 minutos ycondensando mucho rodaje. No podía imaginarque el sector funerario pudiera dar tantísimode sí”. La joven realizadora también manifestóque su agradecimiento a Funespaña “que haapostado por este proyecto y que me ha permitidoconocer las interioridades de un sectorque normalmente se muestra más hermético.Quizá por cómo la sociedad y los medios decomunicación han tratado el tema. Y creo que,por eso he intentado normalizar el tratamientode la muerte en el documental y hacer un trabajolo más fresco posible que se nota hastaen la música”.Funespaña también presentó en Funermostrael libro “Siente la vida: el bosque” escritopor el poeta y naturalista Joaquín Araújo. Enel texto se explica el ciclo de la vida y, además,se propone una interactuación para que los niñosdibujen en sus páginas lo aprendido conAraújo. Funespaña explica en la contraportadadel libro el sentido de realizar esta publicación:“La naturaleza, origen y mantenedora de la vidaen nuestro planeta, es una de esas cosasomnipresentes, que hay que conocer y preservarpara que pueda ser disfrutada con toda suintensidad por nosotros y por las generacionesvenideras. Por ello y porque, además, queremosfomentar la comunicación intergeneracionaldivulgando, de padres a hijos y de abuelosa nietos, un mensaje de respeto al medio ambientecomo vía de entendimiento del entornoy de la vida misma, nos planteamos editar estasencilla publicación. Así con la contemplación,el conocimiento, el respeto y la comunicación,queremos, también, lograr momentos plenosque nos demuestren que la vida merece la penaser vivida”.Finalmente, Funespaña también presentóen su espacio en Funermostra el últimocuento vencedor de la XV Edición del Concursode Tanatocuentos. El relato “Cosas quehacer después de morir” de Marina BolañosUrruela, joven estudiante de 20 años, resultóganador de la XV edición del Concurso deTanatocuentos que organiza la revista AdiósCultural y a la que se presentaron 564 originales.Como fi nalista, el jurado que se reunióen la tarde del día 29 de abril en Madrid,decidió otorgarlo al texto fi rmado por ÁlvaroBermejo Marcos y cuyo título es “Regreso ala semilla”.Marina Bolaños explica en Adiós Culturalque “nací en Barcelona, en verano de 1994.Vivo en Madrid, echo de menos el mar. Cuandotenía 7 años escribí en la redacción de “¿Quéquieres ser de mayor?” que yo sería india ofantasma, mi profesora apuntó al margen quequizás mejor escritora. Y desde entonces.Escribo porque me gusta contar cosas y nosiempre hay alguien dispuesto a escucharme,y es normal. Escribo, leo y escucho historias.Creo que es lo que más me gusta hacer en lavida. Eso, y escalar. A veces me gusta pensarque me parezco a Momo, aunque sea en elpelo corto. O en la tortuga”.número 113 • a d iós • 5


ACTUALIDAD➟EL DOCUMENTAL“Queríaencontrar lasrespuestas”Ana BaqueraEl trabajo quedesarrolla AnaBaquera sobreeste documentalse encuentrarecogido en lapágina webhttp://lamuerteeselfuturo.com/el-proyecto/Escribir sobre la muerte. Tratarlacomo algo normal y acercarse aella de forma natural ¿Parece fácil,verdad? Y común. Sobre todo, teniendo encuenta, que usted está leyendo este artículo enuna revista del sector funerario.Bueno, pues ya le digo yo que no, quepuede sentirse como parte de la excepciónque confi rma la regla. Que el 99% del mundo,ni ve la muerte como algo normal, ni sequiere acercar a ella como algo natural y nimucho menos, desea ver nada relacionadocon el tema. Como si no existiera. Como siestuviéramos aquí para toda la vida.La vida quizá me enseñó eso demasiadopronto, cuando tuve la desgracia de vivir lamuerte muy cerca. Ese fue el momento en elque pude comprobar que, para algo seguroque hay en la vida, no tenemos ni idea de cómotratarlo. Simplemente seguimos guiones que nonos cuestionamos y, por lo general, intentamossalir del paso como buenamente podemos. Unaspalabras de ánimo, que casi siempre son lasmismas, un ritual hecho de manera mecánicay muchas dudas sobre si el difunto querríaesta cosa o aquella otra. Dudas que no nosplanteamos hasta que la persona ya no está.A raíz de esta pequeña refl exión, mesurgieron muchas preguntas. No alcanzaba acomprender la razón por la cual en pleno sigloXXI, seguíamos teniendo un tabú tan arraigadode esa manera. Y más teniendo en cuenta,que es algo inevitable, seguro, fi jo. Que vamosa morir algún día es lo único que sabemoscuando salimos del calentito vientre de mamá,al frío mundo exterior para empezar a vivir.A partir de aquí, y aprovechando miintención de realizar un Trabajo fi n de Gradocien por cien práctico para fi nalizar misestudios universitarios, se me ocurrió la idea dehacer un documental/reportaje sobre la muerte.Quería encontrar las respuestas, conocer elsector, ponerle cara a quienes trabajan en él ysaber cómo era realmente estar en contactocon la muerte. Pero sin morirme, claro.La sorpresa, como se imaginan, fuemayúscula, tanto para mi entorno más cercano,como para mis conocidos y conocidas. Que unapersona como yo, que me considero alegre,deportista, extrovertida, con 23 años, quesiempre está haciendo bromas y hablando conlas baldosas, elija la muerte como tema centralde su proyecto…pues bueno, digamos que“chocó” un poco.Una vez explicado por activa y por pasivaque ni quería cortarme las venas, ni empezara vestir de negro, ni adorar a Lucifer, empezóel proyecto como tal. Los primeros borradoresdibujaban un reportaje de unos 20 o 25minutos sobre la muerte, o mejor dicho, lo quela gente piensa –y digo piensa, porque ahorami visión ha dado un giro de 180º- que es lamuerte. Cementerios, tanatorios, alguna cosamás y listo.En mi labor de producción –este trabajoincluye la búsqueda de material, contactos,localizaciones…Todo lo necesario para llevarel proyecto a cabo- hallé esta revista y tuvela gran suerte de contactar con Jesús Pozo;con la idea de que me contara de qué tratabaexactamente la publicación, cómo veía el sector,etcétera. Y lo que me encontré, fue casi uncoproductor del proyecto que más tarde, seconvertiría en un amigo. Además de las clasesde periodismo que me llevé cada vez que teníala suerte de que nos acompañara a grabar,obtuve las llaves de muchas puertas a las que,de otra manera, habría sido muy difícil acceder.Confi ó en el documental desde el principio, aunsin saber nada de mí ni de mis intenciones y,también gracias a eso, descubrí muchísimosámbitos de la muerte que no conocía. Yconforme aumentaba mi conocimiento delsector, aumentaban también la duración y lacalidad del contenido del documental, hasta6 • a d iós • número 113


➟ACTUALIDADLA LITERATURAUn pocode magiaMarina BolañosEl relato de MarinaBolaños Urruela,ganador del XVConcurso deTanatocuentos,se publica en estamisma revistaen las páginas16 y 17.Yo también hago listas. No tantascomo la chica del relato, perola verdad es que me gustanbastante. Creo que las listas nos ordenanpor dentro, y yo por fuera soy bastantedesordenada, así que por lo menos me gustatener el caos interno organizado. Me gustanlas listas porque mezclan cosas muy distintas.Tú haces una lista de cosas que hacer antesde morir y puede ocurrir que “aprender ahacer pan casero” quede justo debajo de“saltar en paracaídas”. Y no sé, yo veo unpoco de magia en eso.Además, creo que todo el mundo tiene sulista (más mental o más material) de “Cosasque hacer antes de morir”, pero que nadiese preocupa por la de “Cosas que hacerdespués de morir”. Total, como no vamosa cumplirla nosotros… Y a lo mejor es unalista importante esa. Porque creo que cuandoalguien muere deja un hueco en la lista decada persona que le conoce, y que un huecoen una lista se parece bastante al desorden.Y el desorden es algo que por lo general nosincomoda.Cada uno busca y encuentra su métodoparticular para superar este desorden quees el duelo. Pero a mí mi madre me enseñóque las cosas que desordeno yo tengo queordenarlas yo. Y se me ocurre que quizásescribir la lista de Cosas que hacer despuésde morir sea una buena forma.Y que no puede haber muchas cosasmejores que poder ordenar un poquito el caosde aquellos que más queremos.convertirse en un pequeño hijo de 45 minutosde duración.Madrid, Zaragoza, Alicante, Córdoba…yasí hasta 17 localizaciones diferentes,intentado mostrar al mundo una pequeñaparte –porque este sector es casi infi nito- delo que es realmente la muerte. Y después detodo el esfuerzo, puedo decir orgullosa, queconseguimos todo lo que se pudo conseguircon un equipo de gama media. Teniendo encuenta que, quienes estábamos en el proyecto,compaginábamos nuestras vidas laborales conesta aventura.Así con todo, fueron muchos kilómetros,muchos hoteles, muchos litros de café,muchas noches hasta las tantas, muchasllamadas, muchas horas de montaje; perotambién muchas risas, infi nito aprendizaje,un máster en confi anza y seguridad y laconfi rmación de que si crees en una idea,puede salir adelante.Ir a Funermostra el pasado mayo fue laculminación de un sueño hecho realidad,que no era ni la mitad de la mitad de lo queesperaba cuando esta idea echó a andar. Elpoder mostrar el trabajo en el mejor escaparatenacional posible supuso un auténtico regalo. Yese regalo ha sido gracias a mucha gente quelo ha hecho posible. Por ello, no puedo fi nalizarsin agradecer a Jesús Pozo, su confi anza en elproyecto, a Funespaña, por dejarse contagiarpor esa confi anza, a mi familia, por existir –yen especial a mi padre, que me enseñó, quizáantes de lo que me hubiera gustado, que nadiemuere si no se le olvida-, a mi cámara, que haestado siempre al pie del cañón, a la psicólogaAna Vizuete, que se metió en el proyecto hastalas rodillas de manera desinteresada y a laUniversidad Europea de Madrid, por poner losmedios técnicos para realizar el proyecto.A pesar de haber conseguido más de loque pensábamos, afrontamos el futuro conmuchas metas, como proyectar el documentalen Madrid, para que el máximo número depersonas pueda disfrutar de él. Y nuestrosdeseos son muy simples, pero muy fuertes.Ojalá mucha gente lo vea. Ojalá guste mucho y,sobre todo, ojalá que sirva para que la mayoríade los tabúes que giran en torno a la muerte,caigan en el olvido. Porque como bien decimosen el documental: “Te guste más o te gustemenos. Seas más grande o más pequeño, másalto o más bajo…bien sabes como nosotros,que la muerte, es el futuro”número 113 • a d iós • 7


CONCIENCIAEl imperativo deLO REALPedro CabezueloLa muerte pertenecesiemprea los demás.Desde niños nosencontramos con ellaen multitud de ocasiones.Con frecuenciaoímos su nombre enlas noticias: personajes conocidos, catástrofesnaturales, asesinatos, guerras,accidentes más o menos graves…Solo mediante este encuentro constante,sucesivo -y en gran medida aleatorio-, desdela infancia, nos vamos haciendo con el significado de la muerte y con el hecho mismo demorir. Sólo muy poco a poco nos va calando laidea de que en algún momento también nosllegará el turno.A diario oímos hablar de muchas muerteslejanas. De vez en cuando nos pasa rozandomás de cerca: un vecino, un conocido, alguiena quienes ponemos cara y nombre, pero conquien no hay mucha vinculación afectiva... Yen ocasiones, le llega el turno a algún cercano,a alguien que forma parte de nuestrosobjetos internos más preciados, que es casiun trocito de nosotros mismos. Alguien muypróximo se despide de la vida, y el efecto enestos casos produce un impacto profundo,una herida que hace que nuestro ser se tambaleeligera, moderada o gravemente y queno le quede más remedio que “reajustarse”.La muerte es cosa de otros. Hasta quenos damos cuenta de que también nos pertenecea nosotros. O más bien, que nosotros lepertenecemos a ella.Cómo maneja nuestramente la idea de la muerteLa muerte no es igual para un niño de cuatroaños que para un adolescente, un joven, unadulto o un anciano. No sólo por la distanciatemporal que presumiblemente les separa acada uno del momento fi nal, sino también porel modo en que funciona la mente en cadaetapa de nuestra vida, en los distintos momentosevolutivos.Un niño de cinco o seis años puede asumirla muerte de una mascotita, un animalitoal que le tuviera cariño. Alrededor de los 10ó 12 años ya se puede aceptar e integrar ladesaparición de un tío cercano, un abuelo, ysiendo ya adulto puede digerirse mediana-mente la de un padre. Y sólo entonces entendemos,a la fuerza, que los siguientes somosnosotros.Ya que la muerte es por principio lo impensable,puesto que no nos cabe en la cabeza,lo más normal es negarla, rechazarla,proyectarla, o simplemente descartarla, postergarla.Lo auténticamente difícil -y vivifi -cante- es asumirla como propia. Eso dicen almenos todas las tradiciones sapienciales.El enfrentamiento a lo RealLos medios de comunicación social han banalizadotanto la muerte que lo más frecuentees no creértela del todo. Pero llega un día enel cual no nos queda más remedio que encararla,enfrentarnos con ella de un modo descarnadoe ineludible. Antes o después se vaalguien muy querido, muy cercano, muy importantepara nosotros, y eso nos coloca anteun límite de comprensión. Como escribió Gilde Biedma, a partir de ahí nos consta que “lavida va en serio”.Al toparse con la muerte de alguien próximo,unos asimilan la vivencia por duro quesea, y de resultas maduran. También los hayque miran para otro lado y hacen como queno ha pasado nada. Estos últimos son candidatosa una futura depresión, o a adiccionesanalgésicas. El modo de enfrentarse a lo Reales fruto de la personalidad y el carácter individual.La intensidad e importancia del vínculoexistente harán que el trago sea más o menosamargo.Niñez y muerteDurante los primeros años, el niño no puedetrabajar aún con conceptos abstractos. Seencuentra en los primeros momentos de sudesarrollo, en un estadio pre-lógico, en el quela simbolización –cómo se asocian signifi cantescon signifi cados– aún no ha hecho actode presencia o está comenzando a instaurarseen nuestro proyecto de mente adulta. Nopuede conectar lo que ve con un signifi cadoque entienda.De la niñez pueden recordarse no sóloescenas, fl ashes de algunas muertes significativas, sino también las emociones asociadas.Las neuronas espejo hacen que elniño se empape de esas emociones intensas.Permiten no sólo aprender por imitación, sinotambién identifi car emociones. Infl uyen enLa muerte nuncatiene que vercon nosotros,es de los demáshasta que nosdamos cuentade que tambiénnos pertenecea nosotros. Omás bien, quenosotros lepertenecemosa ellaEn la juventudla muertese conoceracionalmente,pero tiende aignorarse. Lasconductas deriesgo asociadasa la juventudhacen que losaccidentes –según la OMS–sean la causade muerte másfrecuente entrelos jóvenes yadolescentesque esas emociones sean las que afl oren enel futuro, cuando aparezca de nuevo un significante parecido, una situación de pérdidasimilar. Pero el niño pasa pronto página, tieneque olvidarse rápidamente de ella. Como buenamentepueda. Los mecanismos de defensa,aún muy primarios, cumplen con su función yprotegen, permiten al sujeto seguir construyéndose,seguir haciéndose con mejor o peorresultado. El niño aún no está preparado paraenfrentarse a lo Real.Madurez y vejez:el imperativo de lo RealComo decíamos, un niño no puede manejarseaún con la muerte como un adulto. Pertenecea los jóvenes y a los adultos esa capacidad derazonamiento abstracto que permite elaborarla realidad de un modo distinto. Pero aunquelos jóvenes hayan alcanzado el pensamientoabstracto, su comportamiento y pensamientosante la muerte son distintos a los de unadulto.Normalmente los adultos se han enfrentadoa lo Real en más ocasiones, siendo más habitualhaber sufrido pérdidas signifi cativas, depadres o amigos próximos. Estas experienciasde pérdida acumuladas cambian, matizan elmodo de entender y relacionarse con la muerte,que poco a poco deja de percibirse comoalgo ajeno y va siendo percibida como algo quesí va con nosotros. Cada vez más, la distanciacon el momento se ve más próxima y real. Lacerteza de que está ahí, a la vuelta de la esquina,hace que tanto los comportamientos comolos pensamientos se modifi quen, cambiandolas prioridades y las importancias que se concedíana las distintas facetas de la vida: las situaciones,las cosas, las personas, los afectos.El resultado del enfrentamiento a lo Real haceque lo que ayer era importante, hoy no lo sea;lo que ayer no importaba, hoy puede cobraruna importancia mayúscula.El cóctel de la eterna juventudEn la juventud la muerte se conoce racionalmente,pero tiende a ignorarse. Las conductasde riesgo asociadas a la juventud hacen quelos accidentes –según la OMS– sean la causade muerte más frecuente entre los jóvenesy adolescentes. El suicidio es la segunda enimportancia.La juventud es una etapa vital en la queapenas hay cabida para la muerte. No haytiempo ni espacio que concederle. El despertarde la sexualidad hace que la vida adquieraunos matices distintos, una nueva dimensión.Sexualidad y reproducción: no hay unmomento en el que la muerte se encuentremás ausente, más lejana. Dar vida, crear vida,es incompatible –al menos en nuestra jovenmente– con su parte opuesta, la muerte. Sien el conjunto vida-muerte la parte correspondientea la vida ocupa e invade gran partedel espacio, es lógico que la muerte apenastenga cabida en ella.Además existe un halo de omnipotenciaque nos acompaña durante la juventud. El jovense sabe fuerte, se cree sabio y se sienteseguro de sí mismo. Cree no tener miedo a8 • a d iós • número 113


➟CONCIENCIALa juventud esun momentode transición ala vida adulta.No existe elmomento exactode entrar en ella,ni tampoco elde abandonarla.Muchos dejande ser jóvenesa una edadavanzada......Otros encambio dejan deserlo a la fuerza,han tenido queenfrentarse conlo Real y no lesha quedadomás remedionada y que nada malo puede pasarle. Está deseosode experimentar sensaciones nuevas.Ha descubierto la vida en todo su esplendor,quiere comerse el mundo. Le está permitidohacer todo lo que antes le estaba vedado, todoeso que hacen los adultos, lo que era unsueño hasta hace poco. Y lo hace a su manera,con ímpetu juvenil, corriendo riesgos innecesarios.Con la capacidad física y los refl ejosde un cerebro plenamente operativo, pero sinla experiencia y la “sensatez” adulta. Y muchasveces con resultados trágicos.Esa plenitud física hace que se despreciede forma frecuente a la muerte, inclusoque se la desafíe. La Parca no va a poder conellos; son rápidos, fuertes, inteligentes y audaces,podrán sortearla. Demostrarán de pasoque ya son adultos. Pero tarde o tempranollega un momento en que se produce el inevitabley temido enfrentamiento a lo Real. Muchasveces por la muerte de los padres, quedeja al sujeto desnudo, al descubierto, solo.En otras ocasiones, esa necesidad de experimentarsensaciones fuertes, ese cóctel juvenilde hormonas, deseo, autoafi rmación y exhibicionismoprovoca directa o indirectamentela muerte de un amigo próximo. Jóvenes quecreían que eso no podía pasar, o que ni siquierapensaban en ello, se percatan de golpe deque son frágiles. De que son mortales.La juventud es un momento de transicióna la vida adulta. No existe el momento exactode entrar en ella, ni tampoco el de abandonarla.Muchos dejan de ser jóvenes a una edadavanzada, se resisten a abandonar ese estilode vida. Quizá la vida fue amable con ellos.Otros en cambio dejan de serlo a la fuerza,han tenido que enfrentarse con lo Real y noles ha quedado más remedio. La muerte delos padres, del amigo, son experiencias paralas que uno no está preparado casi nunca. Enesa pantalla, sin poder mirar hacia otro lado,vemos refl ejada la muerte de un Otro signifi -cativo y de paso, la nuestra. Ese espejo, esemomento, determina muchas veces el paso ala vida adulta. La vida de lo Real.Juventud, divino tesoroNada duele tanto como la muerte de un niño, oun joven. Lo tienen todo por hacer, como sueledecirse. ¿Podemos hacer algo al respecto?,se preguntan muchos padres. Una educaciónadecuada es sin duda lo mejor para preveniry disminuir el elevado número de muertespor accidente y/o asociadas a conductas deriesgo que se producen anualmente. Pero elmomento de rebeldía juvenil y de afi rmaciónde la personalidad por el que atraviesan haceque muchos jóvenes se comporten como auténticosextraños para padres y educadores.Parece difícil hacerles entender los peligrosque les acechan por todas partes. Pero pordifícil que sea, no hay otro camino que el dela educación.“… Los jóvenes de hoy en día adoran lascosas lujosas; tienen malos modales y desprecianla autoridad; muestran una total faltade respeto hacia los mayores ……se pasan en todo, todo lo hacen exageradamente,lo suyo es por doquier la demasía,pecan por exceso, aman con exceso, odianpor exceso, no tienen término medio…… se creen que lo saben todo y hacensiempre afi rmaciones contundentes, de loque deriva su conducta exorbitante y descomedida.… les llevan la contraria a sus padres,y les faltan al respeto a sus maestros, estasociedad va directa al caos”.Estas frases podrían ser de una conversaciónactual. Pero las dijo Aristóteles hace2400 años. Al caos no hemos llegado -demomento-, pero ¿ha cambiado algo desdeentonces? Estructuralmente no mucho, elconfl icto generacional permanece intacto.Mas sí han cambiado muchas cosas. Entreotras, la expectativa de vida, la cantidad dedatos disponibles y la velocidad de acceso aellos. Pero eso no es lo más importante. Loque produce cambio relevante es la calidad,más que la cantidad o la rapidez. Procurar anuestros jóvenes los mejores educadores queles acompañen y orienten en su formaciónacadémica es tan importante como proporcionarlesuna buena educación afectiva desdecasa. Enseñarles a amar la vida y a respetarla de los demás sería la tarea primordial.Enseñar a vivir mejor. No hay otro modo dedisminuir las conductas de riesgo.número 113 • a d iós • 9


ACTUALIDAD➟Funespaña edita un texto/juegode Joaquín Araújo para refl exionarsobre EL CICLO DE LA VIDAColaborador habitual de Adiós Cultural para temas medioambientales,tiene entre otros premios el Global 500 de la ONU.El texto “Siente la vida: el bosque”fue presentado durantela reciente feria del sector funerario‘Funermostra’ celebrada en Valenciadurante el pasado mes de mayo.La publicación aporta también una seriede páginas para que los niños dibujenlas fotografías que acompañan al texto.Araújo muestra cómo aprovecha el sistemanatural la muerte y como los animales y lasplantas manejan sus restos para ir renovandola vida antes de su desaparición. También planteaa lo largo de sus páginas la obsesión del serhumano por medir el tiempo y cómo los ciclosde la naturaleza lo usan de otra manera, muchomás productiva.Araújo siempre ha defendido que la vida“también consiste en no dejar de innovar. Poreso alcanza a enraizarse en infi nitas formas,a perdurar en incontables ámbitos, inclusolos más aberrantes y contradictorios. La vidaincluso se atrevió a poner sobre el tapete desu historia a un testigo consciente de su existencia:nosotros. Pero la condición humana estambién conocer su propia fugacidad, su inexorabledesaparición individual”.El texto, que Funespaña ha editado comoejemplar gratuito, se encuentra dividoen seis pequeños capítulos que hablan delrecorrido de la naturaleza en ese ciclo de lavida infi nito. Con el bosque como principalprotagonista, Araújonoshabla de la semilla, las hojas, el tronco, lasraíces y la savia de los árboles como motoresde la vida y la reconversión de la muertecomo ejemplo para los seres humanos.“La capacidad de renovación de la vida esinfi nita como lo es también la de los componentesde nuestro propio cuerpo que se renueva,casi por completo, casi todos los años. Es decirque el 98 % de las células que lo componenson completamente nuevas cada calendario. Lamuerte en la Naturaleza es tan parte de la vidacomo el agua o el paisaje. Por uno y otro motivo,a los que cabe añadir muchísimos más, podemosestar seguros de algo que se nos quiereolvidar: Todos llevamos puesta en nuestra individualidadlos ciclos y procesos de renovaciónde la vida. Todos repetimos a lo largo de nuestravida la historia entera de la misma vida. Todosportamos el futuro de nuestros descendientes.Enterramos cuerpos, jamás a la vivacidad queanimó, anima y animará a este planeta”, explicasiempre el autor en las charlas que ofrece invitadopor ‘Adiós Cultural’ y Funespaña para hablarde la vida y de la muerte.Funespaña, por su parte, explica que estapublicación es una acción más en el recorridopor “fomentar la comunicación intergeneracionaldivulgando, de padres a hijos y de abuelos a nietos,un mensaje de respeto al medio ambientecomo vía de entendimiento del entorno y de lavida misma. Así con la contemplación, el conocimiento,el respeto y la comunicación, queremoslograr momentos plenos que nos demuestrenque la vida merece la pena ser vivida”.10 • a d iós • número 113


➟ACTUALIDADBurguete edita un LIBROHISTÓRICO Y TURÍSTICO con elpremio del I Concurso de CementeriosEl Ayuntamiento navarro publica un magnífi co texto en castellano y euskera,escrito por Jose Etxegoien Juanarena, en el que se da un profuso y documentado repaso atodo lo relacionado con la muerte en Burguete y su zona de infl uencia.El ayuntamiento de Burguete ha editadoun libro titulado “La muerte enAuritz/Burguet y su entorno. Arte,tradiciones y cementerios” con parte del premioobtenido por su participación en el I Concursode Cementerios, que organizó Adiós Cultural elpasado año. Burguete resultó elegido mejor cementeriotras una intensa votación popular quele permitió obtener un premio de 3.000 euros.El alcalde de Burguete (Navarra), José Irigaray,ya señaló el día que recogió el premio demanos del presidente de Funespaña que “suponeun reconocimientos al esfuerzo y trabajo quedesarrolla el Ayuntamiento desde hace muchosaños y que ha permitido mantener este espacioen las mejores condiciones. Posibilita ponerlo envalor y conseguir que sea un reclamo turísticopara vecinos y visitantes”. En aquel momento,ya anunció Irigaray que se destinaría el premioa la elaboración de un panel informativo con lahistoria del cementerio para que los vecinos yvisitantes la conozcan de primera mano. Dichoy hecho y, además, han editado una magnífi capublicación en castellano y euskera, escrita porJose Etxegoien Juanarena, en la que se da unprofuso y documentado repaso a todo lo relacionadocon la muerte en Burguete y su zonade infl uencia.El libro, que consta de ochenta páginas, ademásestá magnífi camente bien ilustrado con fo-tografías, documentos y cuadros queamplían la información que aporta el autor.Comienza en la prehistoria y va recorriendocostumbres, arquitectura, antropología, religión,naturaleza, arte y hasta la última legislación modernasobre la utilización del moderno cementeriomunicipal.Se trata de un interesantísimo libro que elayuntamiento de Burguete pone a disposición delos visitantes que visiten el pueblo y quieran visitartambién el cementerio ganador del I Concurso deCementerios de España.Burguete es un municipio de la ComunidadForal de Navarra, situado en la merindad de Sangüesa,en el partido judicial de Aoiz, en las comarcade Auñamendi y Pirineo Navarro y a 45 km dela capital de la comunidad, Pamplona.Burguete nació en el año 1100 al calor delCamino de Santiago para dar servicio a los peregrinosque llegaban de Europa atravesando losPirineos. El peregrino que parte desde Orreaga/Roncesvalles se encuentra a los 2,5 kilómetroscon Auritz/Burguete que también fue declaradoBien de Interés Cultural.El pueblo fue reconstruido tras el incendio provocadopor las tropas francesas de la Convenciónen 1794. Además del cementerio, es muy recomendablela visita a la iglesia de San Nicolás deBari cuya fachada es de 1699 y está adornada conrelieves de temas populares, mientras que en elinterior destaca el retablo mayor. Tiene todavía unacampana de 1612. A su lado, la Casa Consistorialpresenta un aspecto similar al de las viviendascontiguas, con pórtico de arcos en la planta baja.número 113 • a d iós • 11


ACTUALIDAD➟El cementerio delAlcalá la Real, en Jaén, convierte en importante recurso turístico la Fortaleza de La Mota en la queJesús PozoEn la esquina suroeste de la provinciade Jaén, vigilando las deCórdoba y Granada se alza la fortalezade La Mota de Alcalá la Real. Desde ladistancia se ve imponente y ya se sospechaque, dada su inigualable posición geográfica, en la unión de las fronteras, los murosde ese gran castillo deben de guardan siglosde luchas por su posesión, millones de historiasde vida y muerte. Cuando se traspasala primera de sus puertas ya se compruebaque las sospechas son ciertas: la fortalezade La Mota es impresionante y exclusiva.En ese cerro de La Mota se asentaronromanos, fue objeto de deseo de distintosclanes musulmanes y lo ambicionaron loscristianos.En este enorme espacio se pueden apreciarclaramente dos principales edifi cios. LaAlcazaba, situada en la parte más alta delrecinto y la Iglesia Abacial, construida entre1530 y 1627 en el solar donde ya existió unamezquita y su promotor fue el abad Juan deÁvila que encargó la obra al arquitecto Martínde Bolívar. En este lugar es en el que las excavacioneshan puesto de manifi esto la existenciade tumbas de diferentes culturas enlo que se podría considerar los restos de uncementerio único. La fortaleza también cuentacon tres torres: la del Homenaje, la de la Velao Campana y la Mocha.La leyenda cuenta que en 1.341 los árabestenían en su posesión la Fortaleza de LaMota, los cristianos querían conquistarla ypara ello envenenaron en único pozo de laciudad con la intención de que los árabes serindieran o murieran ante la escasez de agua.Esa entrada es ahora un pasadizo para accedera la fortaleza que encanta recorrer a niñosy mayores. Pasa justo al lado del profundopozo envenenado y que mantenía con vidalas ilusiones árabes por mantener a salvo elcastillo.Pero La Mota tiene una particularidadmás: si hubiera día del Juicio Final y resucitaranaquí todos los que se enterraron, habríaun galimatías de culturas y lenguas que seríamuy difícil de organizar.La información ofi cial lo cuenta a la perfección.En la excavación arqueológica se handocumentado dos tipos de asentamientos,doméstico-militar y religioso-funerario, dosaljibes romanos, otro medieval y diversas tumbasexcavadas en la roca y criptas de épocarenacentista, al igual que restos de la primeraiglesia gótica que posteriormente se sacraliza yse utiliza como cementerio. Es impresionantey una de las visitas obligadas por la fortaleza.Como ineludible advertencia: para visitarLa Mota conviene llevar calzado cómodo y elánimo dispuesto a permanecer en esta antiguaciudad fortaleza varias horas. Cuando sefi naliza la ruta interior, la sensación es comúna todos los sorprendidos visitantes: hay queregresar.Volviendo a la historia ofi cial, en la fortalezase encuentran cuatro fases constructivas:la primera etapa presenta enterramientos excavadosen la roca, probablemente de épocavisigoda. Durante una segunda fase se reutilizarony redujeron los enterramientos visigóticos,que por sus características se adscribena la ocupación musulmana. Una tercera etapaCementerio de laIglesia Abacial de LaMota.está representada por la presencia de estructurasde la iglesia gótica, como una arqueríaapuntada y la cimentación del muro de la cabecerade la iglesia gótica; por último, aparecenlas criptas asociadas a la construcción dela iglesia renacentista.Posteriormente y según la documentacióndisponible por doquier, el siglo XIX y el Concordatocon la Santa Sede de 1851 trajeronconsigo la desaparición de la abadía, hechoque contribuyó notablemente a su abandonoy consecuente deterioro. Y el colmo de malesllegó cuando un alcalde decidió que aquel lugarsolo debía servir para enterrar a los muertos.Dado que los cementerios pueden estaral aire libre, no hacía falta mantenimientoalguno, con el consiguiente ahorro al presupuestomunicipal. El resultado fue el que cabíaesperar: un progresivo abandono del lugarque acabó con el derrumbe de las bóvedaselípticas y la cúpula de la capilla mayor a fi -nales de 1874.


➟ACTUALIDADTIEMPOse han enterrado cuerpos desde tiempos remotosBodega visitablejunto al castillo.El castillo y la iglesia,los principalesprotagonistas de laFortaleza de La Mota.Hoy la situación es totalmente distinta. Unaexcelente intervención municipal cofi nanciadapor intituciones autonómicas y nacionales hapropiciado la rehabilitación del lugar para usoturístico y docente. El visitante puede reconocerlos diferentes elementos que el transcursode la historia ha dejado como legado en LaMota. Y por supuesto hay tumbas abiertas yvacías pero que enseñan que aquello es elmejor cementerio del tiempo.¿Y cómo fue apareciendo? Según lo publicadofue en las últimas décadas del siglopasado, cuando al iniciarse las obras de restauraciónde la iglesia, los equipos arqueológicos-supervisados por el arqueólogo jefe CarlosBorrás i Querol- descubrieron diseminadospor toda la base del templo decenas de restoshumanos. Más tarde, cuando se disponían aacondicionar la parte superior, entre los restosde la techumbre y de las vigas que aún permanecíanen pie hallaron más vestigios óseos enlo que se consideró un cementerio que no parabade dar sorpresas y que, como alguien haescrito con buen tino metafórico, “no tardaronen comprobar que toda la base del templo erauna verdadera ‘colmena’ de tumbas en la quese apiñaban, casi hasta la saturación, millaresde cuerpos. Algunas fosas, modifi cadas hastael límite, contenían más de una veintena de cadáveresy despojos diversos”.Carlos Borrás lo explica en una entrevistaque es fácilmente localizable en la Red: “To-En la Fortaleza se organizanvisitas de varios tipos,incluyendo alguna con actoresque cuentan leyendas ehistorias reales del lugar.das las tumbas han sido remodeladas, rectificadas, nuevamente excavadas, vaciadasy vueltas a llenar varias veces. Yo diría quesólo hay un nivel amortizado o vuelto a ocuparinfi nitamente, no hay más capas... No haydebajo otras tumbas, pero cada una ha sidoreutilizada hasta la saciedad”. Tanta saciedaddebió haber que, según también explica elarqueólogo, “normalmente, los cadáveres delos pobres eran sepultados en fosas situadasfuera de La Mota, pero por las noches los desenterrabany los volvían a enterrar debajo delas tejas, o entre las vigas. Hemos encontradocuerpos en posiciones grotescas, porque sehacía de noche y deprisa. Con tal de que estuvieranen lugar sagrado era sufi ciente. Asíque hemos descubierto personas con las piernascolgando, las bocas abiertas y algunas,desmembradas. Pese a que este suelo es unlugar sagrado que se ha reutilizado al menosdesde el siglo III a.C., es imposible saber a


ACTUALIDAD➟ciencia cierta si los restos hallados en la iglesiamayor abacial son islámicos, cristianos, dela Edad de Bronce, de la época romana o lavisigótica. Lo único evidente es que sus muroshan dado cobijo a millares de cadáveres depersonas cuyo máximo deseo era yacer en terrenosagrado”, fi nalizan las explicaciones delarqueólogo que comenzó las excavaciones.Un aljibe como fosa comúnLa Mota de Alcalá la Real ha interesado a muchosestudiosos por su grandeza, su monumentalidady su historia. Pero también comolugar de trabajo forense.María Guadalupe Fernández García realizóen 2001 una completa tesis para obtenerel grado de doctor en la facultad de CienciasBiológicas de la Universidad Complutense deMadrid. El trabajo se titula “Análisis Morfométricode una colección de cráneos del Museo deAntropología de la Escuela de Medicina Legal”.Asegura Fernández García confi rma ensu tesis que “hay indicios arqueológicos quedemuestran la presencia de población en lazona desde la edad del cobre, íbera, romana,visigoda y musulmana hasta la actualidadde forma continuada”. Pero aporta aún unainformación más sustanciosa e interesante:la existencia de una gran fosa común en elexterior de la antigua Abadía:“La iglesia actual fue levantada entre el1530 y 1627. Con la invasión francesa seconvirtió en fortifi cación y a su retirada la incendiaron;el abandono de la misma fue enaumento siendo fi nalmente por decisión municipalconvertida en cementerio. En su ladonorte se sitúan dos aljibes y un tercero en ellado sur. Durante las labores de limpieza delcementerio de La Mota en 1992 se descubrióel aljibe del cual se extrajeron los restos paraeste trabajo. Tiene estructura cuadrangularcon cubierta de bóveda y unas dimensionesde 5 metros de ancho por cinco de alto y cincode fondo. Es de origen musulmán, pero fueutilizado posteriormente como fosa comúndonde los cadáveres se encontraban amon-El gran aljibe junto a la iglesiaen el que se encontraronnumerosos restos humanos dela epidemia de 1834.Carlos SantosAl Sur de JaénJaén nocabe enun fi n desemana y quizá noquepa siquiera enuna vida ¿Cuántasse necesitaríanpara conocersu inagotable patrimonio cultural ynatural? No tiene una giralda comoSevilla ni una alhambra como Granadani una mezquita como Córdoba ni unacosta como las de Almería, Cádiz yHuelva. Pero tiene un océano de olivos,tiene tres sierras en una (Cazorla,Segura y las Villas) que por sí mismasjustifi carían un largo viaje, y tiene unascuantas sierras más, cada una consu personalidad esplendorosa: desdela Sierra Morena, que es a la vezmuralla protectora y puerta principal deAndalucía, hasta la Sierra Sur pasandopor la sabrosa Sierra Mágina, cuyasola evocación obliga a recordar queéste es el lugar de la tierra donde seproduce mayor cantidad de aceite deoliva; no se olvide nunca, al pedirlo o alcomprarlo, de añadir las dos palabrasmágicas: “virgen extra”.Repartidas por esa naturalezavariada, exuberante, donde los olivosson mayoría absoluta pero no única,están las huellas de todas las culturasque han pasado por aquí, que sontodas las que han pasado por España.A los romanos, árabes y norteafricanosde diversas especies se suman inclusolos alemanes con los que creó Pablode Olavide las Nuevas Poblaciones,donde dejaron sus apellidos e inclusosus huevos de Pascua. Por Jaén nosolo ha pasado la Historia, tambiénla <strong>literatura</strong> española desde JorgeManrique (que vivió y tal vez nacióen Segura de la Sierra) hasta MuñozMolina, que es de Úbeda; y la mejorarquitectura, con nombres propioscomo Diego de Siloé o Andrés deValdenvira, ciudades magnifi cas comoBaeza y Úbeda, y monumentos únicoscomo la catedral, en la capital, o laSacra Capilla del Salvador, el Taj Mahalespañol, en Ubeda. Sin olvidar queJaén está también en la historia de lagastronomía no solo por su productoprincipal, el aceite de oliva, sinotambién porque aquí escribió y ubicóBaltasar de Alcazar La cena, el primerpoema gastronómico del que se tienenoticia. Ese que empieza diciendo:“En Jaén donde residoVive don Lope de sosa…”Pero esas son solo las letrasmayúsculas de un relato que llevaríatiempo escribir y que a los territoriosmás conocidos de esta provincia,todavía desconocidos por el turismode masas, une otros que solo han14 • a d iós • número 113


➟ACTUALIDADtonados y totalmente esqueletizados. Juntoa los restos humanos aparecieron metales(de hierro y de oro, medallas y crucifi jos debronce), vidrios, telas (aunque en mal estado,corresponden a brocados, jubones, chalecos,túnicas monásticas…) madera (labrada ytrabajada fi namente en forma de cuentas decollar), vidrio (en forma de pulseras y cuentas)...que pudieron formar parte de su ropajey adornos. Debido al tipo de enterramiento yal número de individuos hallados, la primerahipótesis barajaba que podía ser muerte porepidemia. En 1997 se encontraron monedaspertenecientes al siglo XIX de nueve, ocho ycuatro reales correspondientes al reinado deCarlos IV. Se consultaron las actas de cabildodel siglo XIX, los libros de defunciones, entradasy salidas de enfermos del hospital, conellos se llego a la conclusión que la poblaciónexistente en tales aljibes eran individuos quehabían muerto por la epidemia del cólera queazoto a la comarca entre junio y septiembrede 1834”.+ InformaciónPágina web de “Tu Historia”en la que se puede encontrartoda la información necesariapara visitar la Fortaleza deLa Mota.http://tienda.tuhistoria.org/index.php/inicio/alcala-la-real/visita-a-la-fortaleza-de-lamota-y-museo-palacioabacial-de-alcala-la-real-256.htmldescubierto unos pocos privilegiados.Si tiene ocasión, acérquese a Alcalá laReal, al sur de Jaén. En su ubicación,a un paso de las provincias deGranada y Córdoba, a unos pocoskilómetros de la de Málaga, están yalas claves de la importancia históricade una “noble y leal ciudad” –esodice su escudo- que durante siglosfue mucho más que un simple lugarde paso. En su denominación, queimplica historia regia y presencia deun castillo (al-calá) hay ya un mundoevocaciones. Ese castillo, la Fortalezade la Mota, que está en el cerro delmismo nombre, debería fi gurar en elcatálogo de visitas imprescindiblesde Andalucía. Figura ya, de hecho, enel de muchas de las personas quevisitan esta ciudad por la que no pasanautovías, pero sí muchos caminoshistóricos.Quien tuvo retuvo. El aroma delpasado sigue en sus calles empinadas,de trazado árabe, en las casasseñoriales, las iglesias y los palacios.Imprescindible subir al mirador delbarrio de Las cruces, para tener unavista completa de la ciudad y de sucastillo. Cuando la contemples, recuerdaque desde Málaga venían hasta hace50 o 60 años los arrieros, atravesandola Sierra por Zafaraya o el Puerto deCompeta, con las mulas cargadas depescado fresco que luego regresaban ala costa cargadas de grano.No es casualidad que numerososextranjeros procedentes del norte deEuropa, ingleses y holandeses sobretodo, hayan echado el ancla en estacomarca. Aquí están las esencias dela Andalucía Penibética y están, sobretodo, las esencias del sur. Hubo untiempo, mucho antes de que llegaranlas reservas de internet y los vueloslow cost, en el que los escritores deviajes buscaban siempre el sur: en elsur está la luz, para quienes viven eninviernos interminables, en el sur estála autenticidad, para quienes vivenen la uniformidad urbana, y en el surestán las raíces de toda civilización. Noson poco los que en los últimos sigloshan descubierto que el sur empiezanada más atravesar Despeñaperros,en el momento mismo de entraren la provincia de Jaén. Algunossiguieron camino de África, la costao la Alpujarra, donde Gerald Brenanescribió su imprescindible Al sur deGranada. Otros de quedaron al Sur deJaén. El caso del hispanista MichaelJacobs, que eligió Frailes, un pueblovecino de Alcalá.Aunque usted no llegue a sentirla tentación de quedarse, déjesellevar por la tentación de visitar estacomarca, de sierra media, pueblosacogedores y mucho sabor. Ademásdel aceite se produce vino, buenesparrago y quesos muy apreciadoscomo los de Ermita Nueva. En la Aldeade Santa Ana fabrican una cervezaartesana llamada Tierra de Frontera.Aunque esta cerveza sea reciente,no lo es la tradición cervecera deesta tierra, a medio camino entre lahistórica El Alcázar de Jaén, dondehoy se fabrica además la CruzcampoEspecial, y la Alhambra, de Granada,muy apreciada actualmente en todaEspaña.En la calle Isabel la Católicahay una tienda de productosgastronómicos, La Despensa, dondese puede comprar el aceite, el vino,la cerveza, el queso y todo lo demás.Si prefi eres que los productos te lospongan directamente en la mesa o enla barra, hay dos concurridas zonas debares, en los alrededores del parque yen los del ayuntamiento. Para comersentado, en las inmediaciones deAlcalá hay locales muy interesantes,como El Chiringuito de Mures yrestaurantes con ambiciones, como ElRey de Copas, en Ribera Alta, dondela tradición se aborda con imaginacióny donde asoman con naturalidad lossabores de esta tierra, al Sur de Jaén.número 113 • a d iós • 15


TANATOCUENTOSMarina Bolaños UruelaCosas que hacerdespués de morirElla había hecho una lista.Porque ella amaba las listas.Hacía listas de libros, películas,lugares, personas que quería ver. Listas de lacompra, del equipaje, de propósitos de añonuevo, de regalos de cumpleaños.Ella había hecho una lista porque ellahabía hecho todas las listas importantes desdeque se conocieron.La lista de ciudades a visitar durante aquelverano que pasaron en Italia y que sería elprimero de su vida juntos, la lista de la compradel primer piso que compartieron, la lista decosas que debía devolverle tras la primeraruptura, la lista de defectos que cambiaríandespués de la segunda reconciliación, la listade invitados a la boda. La lista de nombrespara el niño. La lista de nombres para laniña. La lista de invitados a cada uno de suscumpleaños.La lista de cosas que hacer antes demorir.Había hecho la lista una tarde lluviosade Noviembre, con un café caliente entre lasmanos y los pies apoyados en el radiador. Élla miraba de reojo desde el sofá y ella escribíainclinada sobre el papel, con la punta de lalengua entre los dientes.Recuerda ese momento porque fueentonces cuando se dio cuenta de que laquería más que a nada que hubiera queridonunca en el mundo. Recuerda ese momentoporque ahora es el más triste de todos susinstantes.Había hecho una lista y se la había leídomientras se ponía el sol. Él acariciaba su narizy sus orejas y ella intentaba hablar sin reírse. Yno lo conseguía, y eso les hacía tan felices.Era una lista larga, así que aquella mismanoche habían empezado a cumplirla.Y nunca el universo conoció dos personasmás perseverantes. Tan solo dos añosdespués habían conseguido tachar casi lamitad de los puntos de la lista. Claro quetambién habían añadido nuevos, y habíanborrado algunos que con el tiempo habíandejado de parecerles tan importantes. Yhabían dejado unos pocos por imposibles.Lo estaban haciendo bastante bien. Hastaque ella tuvo que dejar de tachar propósitosde la lista para empezar a escribir una nueva.Cosas que hacer después de morir.El no la vio escribir esa lista. La escribiósola, en una mañana de verano, pocodespués de amanecer. El dormía a su lado, yella empezó a rellenar un pequeño cuadernogris de cuadrícula con palabras que nuncatacharía.Tampoco se la leyó nunca.La metió en un sobre y la dejó en elarmario, escondida entre su ropa. Esperandoel momento adecuado. Las cosas pequeñassiempre saben cuándo es su momento.El día que él encontró la lista llovía.Era diciembre, la Navidad se acercaba tandeprisa como se acercan esas cosas que noqueremos que lleguen. Hacía frío fuera, habíapreparado café y lo bebía a sorbos sin esperara que se enfriara lo sufi ciente. Nadie escribíacon los pies apoyados en el radiador y lalengua entre los dientes.Buscó entre sus jerséis viejos y encontróuno que aún olía a ella. Al ponérselo la listase cayó al suelo. Estaba metida en un sobremarrón. En el remite decía “Para el frío”.Él rompió a llover. El café se enfrió.Anochecía.la mañana siguiente la lista seguíaA en el suelo del salón. Las cosaspequeñas no suelen moverse de sitio solas.La abrió sentado en el suelo, con laespalda apoyada en el radiador.Era una lista larga, escrita con esaletra apretada y torcida que nunca habíaconseguido entender sin entrecerrar los ojos ytorcer el gesto. Esa letra que ella usaba paralas cosas sencillas. Esa letra que solía decircompra papel higiénico, Lidia se queda encasa de los primos, te quiero.Esa letra que ahora decía Cosas quehacer después de morir. Dos puntos.Pensó por un pequeño momento enlo curioso que es que la misma letra y lasmismas letras se combinen de formas tandistintas. Que la misma persona que antes lehacía reír bajo la manta ahora le hiciera tiritarde lluvia junto al radiador.Después pensó que no quería abrir lacarta. Que no leería la lista. Porque si la leíatendría que cumplirla. Y no se veía capaz deno conseguirlo.Pensó que si nunca sabía lo que tenía quehacer, nunca fallaría intentándolo. A veces laspersonas somos tremendamente retorcidas.Pensó todo aquello durante un periodode tiempo tan pequeño que no se dio cuentade que lo estaba pensando. Así que abrió elsobre. Y sacó la lista.Y entonces, justo entonces, comprendióque había pensado que no quería leer la lista.Pero ya era demasiado tarde. Porque la estabaleyendo.La estaba leyendo sólo, con un cafétemplado en la mano y la espalda en elradiador. Pocos días antes de una Navidadque temía cada segundo un poco más, pocosmeses después de que la vida se llevara laúnica Navidad en la que había creído nunca.La estaba leyendo y estaba viéndola a ellaescribir. Sonreír con la lengua entre los dientesy el lápiz enredado en el pelo rizado negro. Y laluz del amanecer en las pestañas.La estaba leyendo, mientras el inviernocrecía fuera y la noche se comía el día, y podíasentirla sonreír a su lado entrecerrando losojos al escribir “cielo aféitate, debes de estartepisando la barba ya”.La estaba leyendo y no quería hacerlo,porque la sentía llorar en silencio alescribir “Sergio quiere un dinosaurio por sucumple”. Y no podía abrazarla, y no podíadecirle que hacía una semana del cumpleañosde Sergio, y que le había regalado undiplodocus que movía el cuello de lado a lado.Y qué él había sonreído precioso.Pero podía tacharlo. Y podía afeitarse. Ypodía hacer casi todo lo que ella había escritopara él. Podía enviar un verso de Nerudaa cada persona que estuvo en su funeral,aunque le parecía una broma de mal gusto.Pero podía hacerlo.Podía pedirle perdón a su cuñado porno haber ido a la última barbacoa, por haberinventado esa excusa tan estúpida que nadiehabía creído. Podía incluso invitarle a casa yhacer la barbacoa allí.Desde luego que podía grabar un discocon las veintisiete mejores canciones paradormir (las sabía, estaban en una lista queella había escrito durante un viaje en coche)y dejarlo en su tumba “por si tengo pesadillasy no estás para que te abrace”. Le doleríahacerlo, pero podía.Y podía tirar la camisa azul vieja y rota quesiempre le pedía que tirara, y podía plantartulipanes en la maceta del balcón. Y podía ir almar y gritar su nombre. “Siempre he queridohacerlo pero se me antojaba egocéntrico, yaves”Pero no sabía si quería hacerlo.Porque cumplir las cosas de la listade cosas que hacer después de morir erahorrible.Porque era admitir fi nalmente que habíallegado ese momento. Que estaba endespués de morir. Que ahora, que hoy, quesiempre a partir de que él empezara a tacharcosas de la lista, era después de morir ella.Y era tan duro aquello que le rompía pordentro sólo pensarlo. Le dolía imaginarseaceptando el futuro sólo, porque esosignifi caba que estaba dispuesto a olvidar elque habían planifi cado juntos.16 • a d iós • número 113


➟TANATOCUENTOSCuentoganador del XVConcurso de TanatocuentosEl cuento “Cosasque hacer despuésde morir” fue elganador de la XVedición del Concursode Tanatocuentosque organizala revista AdiósCultural. Comofi nalista, el juradoque se reunió enla tarde del día 29de abril en Madrid,decidió otorgarloal texto fi rmadopor Álvaro BermejoMarcos y cuyo títuloes “Regreso a lasemilla”.Este es su bloghttp://www.gregatrey.blogspot.com.es/(…) Y podía tirar la camisa azul vieja y rota que siempre le pedía que tirara, y podía plantartulipanes en la maceta del balcón. Y podía ir al mar y gritar su nombre. (…)Y no lo estaba.A veces somos así de estúpidos loshumanos. A veces pensamos que si noaceptamos que algo ocurre, dejará deocurrir. A veces somos insoportablementeegocéntricos.Suspiró y se levantó. Era de noche,caminó tres pasos y encendió la luz. Esperóa que la habitación se iluminara del todoobservando el vacío. El desorden. La nada.Los niños llegarían al día siguiente porla mañana. Y con ellos la rutina. Si es que esposible la rutina con una lista como esa en lamano.Escondió las manos dentro del jerseyy se dejó caer bocarriba en lacama. Había un punto en la lista que decía“Pega estrellas en el techo, así no tendrásque esperar hasta el verano para dormirmirando constelaciones”. La verdad es queeso era buena idea.Había otro muy bueno también “Quiere aquien te quiere, yo lo hice y me fue bien”Y había uno tachado, el número 15 “Vea un concierto de los Rolling y llora cuandocanten Angie”. Al lado ella había escrito “Yalo hicimos eso, te vi. Llorabas. Cursi, que eresun cursi”No pudo evitar sonreír.número 113 • a d iós • 17


ARTEUnos cuantosPIQUETITOS“Unos cuantos piquetitos”, de Frida Khalo, es el resultadográfi co de su reacción ante la relación amorosa de su marido,Diego Rivera, con su hermana. La herida más profunda de la mujerasesinada es la del corazón aludiendo de manera tremendamentesimbólica a su propio dolor personal.Autorretrato dedicado a León Trotsky.Ana ValtierraDoctora en Historiay Teoría del ArteUniversidadAutónoma de MadridEl maltrato femenino es un lastreque, desgraciadamente, arrastranuestra sociedad desde hacesiglos. Aunque afortunadamente cada vezestamos más concienciados para luchar ensu contra, todavía queda mucho trabajo porhacer. Una de las primeras personas quedenunció estos delitos fue la mexicana FridaKahlo (1907-1954). En 1935 pintó “Unoscuantos piquetitos”, una sorprendente obraen la que nos muestra el cuerpo maltratadoy sangrante de una mujer muerta sobreuna cama. Detrás, un hombre también manchadode sangre, sostiene un cuchillo en lamano derecha. En la parte alta una palomablanca y una negra sujetan una cinta quelleva escrito “unos cuantos piquetitos”. Sontremendamente simbólicas: blanca de purezay paz; negra de mal augurio. La sangre,refl ejo de la brutalidad del hecho, inunda todala escena, incluido el marco. Kahlo denunciaen esta obra la situación de la mujer, perotambién la suya propia. Efectivamente, estapintura no es más que la proyección de supropio dolor y rabia. Hacía poco que se habíaenterado de que su marido, el famoso muralistaDiego Rivera, le era infi el con su propiahermana pequeña, de nombre Cristina.Fue Frida quien convenció a su maridopara que retratara a su hermana Cristina.Se convirtió así en una de las modelospredilectas de Diego, cuyo cuerpo adornóalgunas de las pinturas tanto de uno comode otro. El descubrir que su marido, que parecíaenemistado con la monogamia, y suhermana le habían traicionado fue un durogolpe para ella y supuso un giro determinanteen su vida.Por esta época leyó en el periódico queuna mujer había sido asesinada por su parejapor medio de veinte puñaladas. El dementetuvo la desfachatez de decir cuando fue acusado,que “solo le di unos cuantos piquetitos”.A Kahlo le impactó semejante noticia, y lorepresentó poniendo en evidencia el que nohay ninguna justifi cación para ese crimen. Lohace pintando el momento inmediatamenteposterior al apuñalamiento, cuya herida másprofunda está en el corazón. Al lado de lamujer brutalmente asesinada, coloca la frasedel delincuente. Frida escenifi ca el crimen, loconstruye por medio de la imaginación y suspinceles, añadiendo la frase famosa. De estamanera, al colocar todo junto, elimina la másmínima posibilidad de justifi car o quitar importanciaa semejante violencia.Insisto en que Kahlo no elige este tema alazar. Ella mismo confesó que empatizaba conla víctima de este crimen porque ella tambiénse sentía “asesinada por la vida”. Contrajopoliomielitis en 1913, dando inicio a una seriede sucesivas enfermedades, lesiones diversas,accidentes y operaciones. La primerasecuela fue que la pierna derecha se le quedómucho más delgada que la izquierda. Por sifuera poco, sufrió un grave accidente el 17 deseptiembre de 1925, cuando el autobús en elque ella viajaba fue arrollado por un tranvía.Quedó aplastado contra un muro y totalmentedestruido. Aunque sobrevivió, la medicinade entonces la sometió a múltiples torturas:treinta y dos operaciones quirúrgicas, corsésde yeso y diversos mecanismos de “estiramiento”.Ella diría con respecto a este momentode su vida que “perdí mi virginidad”.Pero sobre todo fue “asesinada en vida”por su marido y hermana. Diego Rivera fuesu gran amor y con él se casó ¡dos veces!La primera, el 21 de agosto de 1929 cuandoella tenía 22 años y él 42. La familia de FridaFrida y CristinaKhalo pintadaspor Diego Riveraen un mural.Unos cuantospiquetitos.Un elefante(Diego) y unapaloma (Frida).18 • a d iós • número 113


➟ARTEdesaprobó ese matrimonio y la madre decíaque era gordo, feo, comunista, ateo, vividor…Con los años Frida contaría en sus memoriasque “me enamoré de Diego y eso desagradóa mis padres porque Diego era comunistay se parecía, decían, a un gordo, gordísimoBreughel. Decían que era una boda entre unelefante y una paloma”. Sólo fue el padre ala boda y le dijo a Diego: “No olvide que mihija es una persona enferma y que lo será todasu vida: es inteligente, pero no guapa”. Lamadre estuvo acertada: este matrimonio conFrida era el tercero del muralista, y todavía lequedarían dos más. A pesar de ser un hombrepoco atractivo, tuvo un número muy grandede amantes y con su esposa tenía amor y disputasa partes iguales.A Frida, igual quelos indígenasque cuyasraíces tantoreivindicaba, lahabían arrancadoel corazón. Laexpresión dela escena nose limita allienzo si no quese extiendeal marco quetiene marcas depuñaladas y estárociadode sangreLa bodaLa boda causó sorpresa en la sociedad mexicana.Les resultaba extraño que la pequeñay frágil Kahlo estuviera con un Rivera que yaera un hombre maduro; que pesaba más deciento veinte kilos y que se bañaba poco. Elladecía “Yo lo bañaré y lo lavaré”. Como si setratara de un niño lo atraía a la bañera conjuguetes, con los que se entretenía el pintorporque por su propio pie poco tocaba el agua.Se divorciaron en enero de 1940 pero el 8de diciembre de ese mismo año se volvieron acasar. Eso sí, ella puso como condición que nomantendrían relaciones sexuales. Entre esto,y que empeoró notablemente de la espalda,su relación con Diego se había vuelto “platónica”y sus relaciones más íntimas eran ahoracasi exclusivamente con mujeres. Más extrañoresulta que un hombre con tan dudosascualidades fuera punto de confl icto entre lasdos hermanas.A partir de este momento, y visto que eracomplicado que su marido le fuera fi el, decidióimitar su ejemplo. Frida recomendaba “escogeun amante que te mire como si fuerasmagia”, y eso fue exactamente lo que hizo.Entre sus relaciones más famosas están LeonTrotsky, que perseguido por Stalin llegó a Méxicocon su mujer. Se alojó en la casa del matrimonio,y quizá fruto de la admiración a susideas tuvo un apasionado idilio con la pintora.En 1937, Frida le regaló al revolucionario rusoun autorretrato con motivo de su cumpleañosy el cuadro fue colocado por Trotsky en suestudio. Se trata de “Autorretrato dedicadoa León Trotsky”, pintado en 1937, donde serepresenta entre un cortinaje, perfectamentemaquillada y arreglada con una falda bordada,mantón de fl ecos y joyas de oro. Adorna sularga melena con fl ores. En una mano sostieneunas fl ores y en otra una nota que dice“con todo mi amor”. El idilio terminó prontoy con ella diciendo despectivamente “acabécon el viejo”.También son muchas las voces que hablande que pudo ser amante de ChabelaVargas, que vivió con el matrimonio duranteun año en su residencia de Coyoacán. Fridasiempre dijo de la cantante que “no dudaríaun segundo en desnudarme ante ella.Cuantas veces no se te antoja un acostón yya. Ella repito es erótica”.La pintura“Unos cuantos piquetitos” es por tanto el resultadográfi co de la reacción de Frida antela relación amorosa de su marido con suhermana. La herida más profunda de la mujerasesinada es la del corazón, aludiendo demanera tremendamente simbólica su propiodolor personal. También a los sacrifi cios a losdioses precolombinos en los que, en lo alto dela pirámide, se abría el pecho de las víctimasy se les extraía el órgano.A Frida, igual que los indígenas que cuyasraíces tanto reivindicaba, la habían arrancadoel corazón. La expresión de la escena no selimita al lienzo si no que se extiende al marcoque tiene marcas de puñaladas y está rociadode sangre también. De esta manera, el límiteentre la fi cción de la pintura y la realidadde nosotros mismos, como espectadores delcrimen, se difumina. El que sólo mira y lo permite,se convierte en cómplice de asesinato.Kahlo provoca y logra sacar del estado pasivoal espectador y hacerle partícipe de la escena.Maltratada por la vida y por su propio marido,fue una mujer inteligente que siempre se suposobreponer al destino, que usó el arte y la pinturacomo expresión de su interior. Como espectadoresde ese atroz crimen que pinta Frida,hemos sido alcanzados por las manchasde sangre. Ahora sólo tenemos que elegir sinos convertimos en cómplices, o en jueces.número 113 • a d iós • 19


LA MUERTE EN LA ANTIGÜEDAD CLÁSICAEDIPO,primer detectivede la historiaJavier del HoyoEdipo criado porel pastor Forbante(Antoine Chaudet,1812)El mito de Edipose hizo célebreen la antigüedadgracias a dos obrasde teatro de Sófocles(496-406 a.C.): “Ediporey”, puesta en escena enel teatro de Atenas el año431 a.C., y en menor medida “Edipo en Colono”,representada en el 401 a.C., muerto ya su autor.La recepción de la primera siempre fue extraordinaria,de modo que Aristóteles (385-322 a.C.)la consideró en su “Poética” la obra más perfectade todo el teatro clásico. A lo largo de lossiglos el argumento fue recogido por numerososdramaturgos, conservándose entre los antiguos“Edipo” de Séneca. Desde el renacimiento hanhecho versiones del mito, entre otros muchosautores, P. Corneille (1659) o Voltaire (1718).A comienzos del siglo XX los estudios de S.Freud sobre “La interpretación de los sueños”(1900) llevarían a poner de relieve de nuevoel mito y a crear el concepto de “complejode Edipo”, el de aquel niño y adolescente quetiene aversión a la fi gura paterna y desmedidoafecto hacia la materna. Ello infl uyó en toda la<strong>literatura</strong> posterior. Así “Edipo rey” de J. Cocteau(1927), que adaptó musicalmente I. Stravinski; o“La máquina infernal” (1932) del mismo autor;pero también “Edipo” de A. Gide (1930). Ya enpostguerra T. S. Elliot trivializa el mito en “Fin decarrera” (1959). En España S. Martín Bermúdezescribió en los últimos años del franquismo “Tiresiasaunque ciego”, obra que nunca se llegó arepresentar.Hoy, sin embargo, no vamos a hacer tantohincapié en el mito en sí mismo, conocidoprobablemente por nuestros lectores; ni en sucomplejo y el método llevado a cabo por el psicoanálisispara llegar al fondo de uno mismo,sino en la fi gura de Edipo como detective, comobuscador de la verdad. Y es que “Edipo rey”puede considerarse como la primera gran obrade suspense de la historia. El núcleo de la obraes el siguiente: años atrás ocurrió un asesinato;Años atrásocurrió unasesinato; ahoraEdipo emprendela investigaciónsobre el asesino,sin saber queel asesino es élmismo y que,por ello, cuantomás avanza en elesclarecimientode los hechosmás nudosva poniendoen torno a sugarganta…20 • a d iós • número 113


➟LA MUERTE EN LA ANTIGÜEDAD CLÁSICAEdipomata a Layo(sarcófago, s. III a.C.)ahora Edipo emprende la investigaciónsobre el asesino, sin saber que el asesinoes él mismo y que, por ello, cuantomás avanza en el esclarecimiento delos hechos más nudos va poniendoen torno a su garganta… Tal y comoquería A. Hitchcock (1899-1980),punto fundamental en la trama es eltema de la ignorancia del protagonista.Es decir, el público, que ya conoceel argumento, se coloca por encimade los protagonistas, que desconocenquién es el autor del asesinato. Y le gustaríaintervenir y gritarle al actor principalpara que no siga investigando…El Destino como protagonistaUna ciudad y un tiempo. Los mitos no son cuentospopulares, donde la acción transcurre en untiempo indeterminado (“érase una vez que seera”), en un vago lugar que nunca existió. Unaciudad: Tebas. Un tiempo: mediados del II milenioa.C. Layo, heredero de la corona pero aúnniño, debe salir de la ciudad hasta que llegue asu mayoría de edad. Acude a la corte de Pélope,rey de la Élide, donde es bien recibido por losreyes. Y allí queda prendado del joven Crisipo,hijo del rey, con quien comienza a tener relacionesa escondidas. Un día es sorprendido porPélope, que maldice a su huésped Layo: “ojaláno tengas hijos y, si los tienes, que uno te mate”.El deseo, como vemos, es condicionado. En primerainstancia, desea la esterilidad, verdaderocastigo de los dioses. En efecto, en una familiareal, la descendencia, especialmente masculina,aseguraba la continuidad dinástica. Los diosesbendicen con la fertilidad (tierras, animales,hombres), y castigan con la esterilidad. Así pues,sólo en el caso de tener un hijo, sufriría la penade perder la vida.El mito muestra gran antigüedad, ya que lahomosexualidad de Layo y Crisipo es el puntoinicial desde donde se desenvuelve la trama,hecho que se condena y castiga como prontoveremos, si bien en la Grecia clásica su prácticaEdipo antela Esfinge (kylix,470 a.C., M. Vaticano)Edipo se exiliacon Antígonade Lazarillo(A. StanislawBrodowski)estaba ya perfectamente armonizadaen el entorno social.Al morir el rey de Tebas, Layoregresa a su ciudad, asume elgobierno y se casa con Yocasta.Consulta su futuro ante el oráculode Delfos, que le da una respuestaclara y precisa: “Escritoestá: no tengas hijos, porque silos tienes, uno te matará y yacerácon su madre”. Para evitar que secumpla este terrible oráculo, queseñala las dos transgresiones másviolentas a la ley natural, como son elparricidio y el incesto (las dos que quedabanpenadas en el Más Allá, de formaque quienes las cometían no podían ir a laisla de los Bienaventurados, sino al oscuro Tártaro),durante un considerable tiempo se abstienede tener relaciones con su esposa, hasta quetras un banquete en que los dos han bebido másde lo habitual, consuman el matrimonio. De esarelación nacerá Edipo. Al nacer, Layo se lo entregaa un criado para que se deshaga de él enel campo, ya que supone una amenaza para supadre y para la propia ciudad. El criado le perforalos tobillos, por lo que sus pies se hinchan. Esoes lo que signifi ca precisamente Edipo, “el de lospies hinchados”.Abandonado en el monte Citerón, sus agudosvagidos al aire son escuchados por un pastordel rey de Corinto, que andaba cuidando elrebaño por esas tierras. Pólibo, rey de Corinto,no tenía hijos. El pastor se lo lleva al rey, que locriará con su esposa, la reina Mérope, como sifuera hijo suyo. De este modo, la sucesión dinásticade la ciudad quedaba resuelta.Llegada la mayoría de edad de Edipo, diecisieteaños, celebran una gran fi esta con competicionesatléticas. Edipo vence en ellas, y alatardecer lo festejan con un suntuoso banquete.En medio de la celebración y de la algarabía, yaal término de la fi esta, un mendigo situado alfondo de la sala, le grita a Edipo: “Tú eres hijode la Fortuna”. Preocupado este por aquellasnúmero 113 • a d iós • 21


LA MUERTE EN LA ANTIGÜEDAD CLÁSICA ➟palabras, pregunta a los reyes de Corinto por sunacimiento y sus padres. Ellos guardan un misteriososilencio, por lo que determina salir al díasiguiente hacia Delfos para preguntar al oráculoqué fue de su infancia. El oráculo le dice queescrito está: “matará a su padre y yacerá consu madre”.Deseando evitar el cumplimiento del angustiosovaticinio, se desvía de la ruta que había traídoy se encamina hacia un nuevo lugar: Tebas.Subía ese día a Delfos el rey Layo en su carrozapara saber qué fue de aquel hijo que tuvo diecisieteaños antes y fue enviado al campo. Enuna encrucijada de caminos en la que los dosquieren atravesar por el mismo paso, Edipo vamatando uno a uno a todos los sirvientes del rey,menos a uno, que a tiempo huye, por interponerseen su camino; fi nalmente se deshace del rey.Se acaba de cumplir en ese momento la primeraparte de la predicción.En su camino hacia Tebas se encuentra conla Esfi nge. Este ser con cuerpo de mujer, alas deave y garras de león, era un castigo enviado porla diosa Hera a la ciudad a causa de la homosexualidadde Layo. La Esfi nge proponía enigmasa quienes entraban o salían de la ciudad; el másconocido: “¿qué animal anda a cuatro patas alamanecer, a dos a plena luz del día, y con tresal atardecer?” El castigo para quienes no lo sabíanera morir estrangulados, que eso signifi caEsfi nge (‘la estranguladora’). Edipo contesta inmediatamente:“el hombre”. El destino le teníareservado a la Esfi nge el fi nal de su vida vinculadoa la resolución del enigma, por ello se arrojaal abismo y muere.Entra, pues, Edipo triunfante en Tebas trashaber liberado al pueblo de esta plaga. El regenteCreonte había prometido la mano de la reinaYocasta, viuda, a quien venciera a la Esfi nge. Porello Edipo se casa con su madre Yocasta, sinsaber que lo es, y se cumple en ese momentola segunda parte del oráculo. Queda, pues, bienpatente al espectador que el destino siempre secumple, y que cuanto más intenta el hombreapartarse de la voluntad que los dioses le tienenmarcada, más se está acercando a lo que eldestino, por mano de las Parcas, le había tejido.Asesino sin saberloEdipo gobierna la ciudad con acierto y equidad;con Yocasta tiene cuatro hijos, que son a la vezsus hermanos. Pero tras varios años de prosperidaden la ciudad, comienza a extenderse unafunesta peste. Los campos se vuelven yermos.Se ha producido años antes una doble transgresióncontra las leyes de la naturaleza, comoson el parricidio y el incesto. La respuesta de lanaturaleza, como expresa el mitógrafo Higino,se traduce en esterilidad y pobreza de frutos.En este punto es donde comienza la obra “Ediporey” de Sófocles, que mediante una acertadacombinación de fl ashbacks con el presente vaavanzándonos qué es lo que ocurrió años antes,y anticipándonos el trágico fi nal.Para atajar la peste, Creonte acude a Delfos,donde el oráculo le asegura que hace añosfue asesinado el rey de Tebas. El asesino estápresente en la ciudad y, mientras siga en ella, lapeste no cederá. Edipo promete investigar paraaveriguar quién cometió tal crimen. Cuando elasesino sea descubierto, deberá exiliarse ciego.La luz. Comienza aquí un interesante juegoque tiene la luz como protagonista. Edipo ve elpresente, pero es incapaz de ver el pasado ni elfuturo. Se enfrenta al adivino Tiresias, que comotantos videntes en la antigüedad, paradoja casinecesaria para ejercer su ofi cio, es invidente. Tiresiasno ve el presente, pero es capaz de saberqué ocurrió y de prever, adivinar lo que ha devenir. El enfrentamiento en escena entre los doses colosal. Casi doscientos versos magistralesen que Tiresias terminará diciéndole: “no sigasinvestigando porque el asesino eres tú”, y Edipole gritará: “Oh tú, que eres ciego en cuantoa la vista, a los oídos y a la mente”. A medidaque se vaya haciendo la luz en la conciencia deEdipo, se irá acercando a la ceguera absoluta, ycuando descubra que él es realmente el culpable,cumplirá lo que había prometido sacándoselos ojos con la fíbula que sostenía el peplo de sumadre y esposa Yocasta, que acaba de suicidarseahorcándose. Termina la obra, cae el telón. Eldetective ha logrado encontrar al asesino, queera él mismo. Él, que había adivinado el enigmaque nadie era capaz de descubrir, noera capaz de ver la realidad. Cuandopor fi n, la ha visto, se ha quitado lavista, y ha salido de la ciudad.Hace años tuve la suerte dever “Edipo rey” en el teatro romanode Mérida, donde comometáfora de la obra yde la vida, comenzabacon muy poca luz, unospocos focos encendidos,simbolizando la tiniebla en elconocimiento y en la concienciade Edipo. A medida quela obra transcurría y se ibanencendiendo los interlocutoresde Edipo que le proporcionabanluz para saber, iban“El corazón del ángel“(Alan Parker, 1987)Edipo en Colono(J.-B. Hughes, 1985,M. Orsay, París).iluminándose los focos. La escena fi nal, conla resolución del confl icto, se llevó a cabo contodos los focos; Edipo ya estaba ciego, peroahora veía con el alma, en su mente, lo quesucedió en su niñez y juventud. Noche inolvidablecon luna llena en el teatro de Mérida yel público en pie aplaudiendo. Ahora entendíamoslos puntos llevados a cabo por Freud ensu método para dar luz a la persona que desdejoven tiene un confl icto interno.El ostracismoEn el fondo la obra, escrita y representadaen plena época dorada de Atenas (430 a.C.),bajo el gobierno de Pericles, aquel de quienTucídides dice: “Y era aquello ofi cialmenteuna democracia, pero en realidad el gobiernodel primer ciudadano” (“Historia de la Guerradel Peloponeso” II, 65), está poniendo sobreel tapete el valor político del ostracismo. Losatenienses se habían acostumbrado a este tipode moción de censura, por la que cualquierciudadano podía escribir en un óstrakon (trozode cerámica) su nombre y el del político al quequería enviar fuera de la ciudad.El procedimiento: cada año entre enero yfebrero los ciudadanos se reunían y votaban siquerían expulsar a alguien de la ciudad. Votabana mano alzada; si el resultado era positivo,volvían a tener una votación pública dos mesesmás tarde, donde debían tener un quórum sobre6000 votantes. El ciudadano que deseabavotar, inscribía sobre un fragmento de cerámicasu nombre y el del político cuyo destierro leparecía necesario para el bien público. Cuandohabía mayoría absoluta de votos, el gobernantecuyo nombre aparecía debía abandonar laciudad en un plazo de diez días y permanecerexiliado durante diez años, aunque muchospolíticos fueron llamados antes de que secumplieran los diez años, lo que guarda ciertoparalelismo con la reducción de penas denuestros días.Fortuna de un mitoLa historia de Edipo ha sido el nudo argumentalde multitud de fi lmes y de obras que —como la ópera de Carl Orff, “Edipo el tirano”(1959)— han llenado el panorama cultural delsiglo XX. Y no hay que acudir necesariamenteal género péplum, donde destaca “Edipo re” deP. P. Pasolini (1967), o “Edipo rey” de Ph. Saville(1968), sino que fi lmes aparentementeajenos como “Recuerda” de AlfredHitchcock (1945), “El corazón del ángel”de Alan Parker (1987), “Edipo alcalde”,de Jorge Alí Triana con guiónde G. García Márquez (1996), la magistral“Poderosa Afrodita” de W. Allen(1995), o la más reciente “Incendies”(D. Villeneuve, 2010) nos muestrandistintos mitemas de la obra, comopueden ser la investigación sobreuno mismo, el incesto, el gobernanteque ha de exiliarse, etc. Y si ustedesquieren disfrutar y reír un buen rato,no dejen de ver (o simplementeescuchar) la humorística “Edipo deTebas, cantar bastante de gesta” deLes Luthiers.22 • a d iós • número 113


1. ObjetivosReconocer el interés histórico, social,artístico y patrimonial de los cementeriosespañoles.Reivindicar como lugares llenos de vida yde recuerdo de la gente que los habitó.Siendo una parte muy importante de laciudad que debe ser conservada y puestaen valor.Concienciar a la ciudadanía del importantepatrimonio que albergan estos recintos.Velar para que estos espacios no caigan enel olvido, fomentando su potencial comorecurso turístico.2.ParticipantesPodrán participar todas las empresas oinstituciones públicas y privadas quegestionen cementerios en el territorioespañol.Los ganadores de la edición anterior nopodrán presentarse con la candidaturapremiada.3.CategoríasEl concurso consta de cinco categorías. Sepuede participar en todas o cada una deellas:Mejor cementerio en su conjunto.Mejor iniciativa medioambiental.Mejor monumento arquitectónico.Mejor escultura instalada en el recinto.Mejor historia documentada ocurrida en elrecinto.4.InscripciónLos candidatos deberán rellenar elcuestionario que se puede obtener en larevista Adiós Cultural edición impresa, através de la web revistaadios.es oaportando los siguientes datos al correoelectrónico info@revistaadios.es :● Nombre del cementerio y persona decontacto.● Categoría/s a la que se presenta.● Motivos por los que considera interesantela candidatura/s.● Documentación gráfica (fotografíasen formato JPG. en color o blanco/negro). Máximo de 5 fotografías conuna resolución de 3000x4000 px para lacategoría de Cementerios. Para el resto decategorías máximo de 2 fotografías.● Documentación textual, para la categoríade mejor historia ocurrida en el recinto,será un máximo de 2 folios y acompañadade documentación o informaciónacreditativa de la veracidad de la misma.5.Criterios de valoraciónSe estimarán fundamentalmente los valoresartístico, histórico, social, así como susingularidad y su grado de conservación.En el caso del premio a la Mejor iniciativamedioambiental, ésta deberá estar enmarcha en el momento de presentar lacandidatura al concurso.6.Calendarioy proceso de selecciónDel 1 marzo al 30 de abril:Publicación de las bases del concursoen la web de la revista Adiós. Recepciónde las inscripciones junto con sudocumentación y confirmación de laparticipación por parte de la revista.Del 1 al 30 de mayo:Composición del jurado técnico conexpertos en arquitectura, arte, sociología,historia y medio ambiente. Selecciónde los 10 finalistas de cada categoría ypublicación de la misma en la web de larevista Adiós Cultural.Del 1 de junio al 30 de Septiembre:Votación abierta al público a través de laweb www.revistaadios.es en la que losusuarios podrán elegir entre la selecciónprevia del jurado.Por su especial característica, lacategoría de “mejor iniciativamedioambiental” (que se excluiráde la votación pública pero se podrávisualizar los finalistas) será elegidapor un jurado especializado y presididopor el naturalista y premio Global500 de la ONU, Joaquín Araújo, cuyoresultado se dará a conocer con el restode ganadores.Del 1 de octubre al 10 octubre:Publicación de los resultados ycomunicación a los ganadores.Última semana de octubre:Entrega de los premios.7.Premios3.000€ al mejor cementerio en su conjunto.2.000€ a la mejor iniciativamedioambiental.1.000 € al mejor monumento arquitectónico.1.000€ a la mejor escultura.1.000€ a la mejor historia documentadaocurrida en el recinto.Placa de reconocimiento a los clasificadosen 2º y 3º puesto de cada categoría.La cuantía del premio será abonada alorganismo, asociación o persona queostente la titularidad del recinto u obrapremiada.Las candidaturas presentadas seincorporarán a la “Ruta de Cementeriosde España”, ubicada enwww.revistaadios.es.8.Aceptaciónde las bases del concursoLa participación en este concurso supone laaceptación de las bases.Funespaña se reserva el derecho demodificación de las fechas o de cualquierotro contenido de estas bases, que estaránsiempre actualizadas en laweb: www.revistaadios.es.


VERSOS PARA EL ADIÓSLarga EsquinaDE VERANOSección coordinada por Javier Gil Martínyo terminal”,“El nos diceTamara Kamenszain en elprólogo a la obra completade Héctor Viel Temperley(Buenos Aires, 1933-1987).Con ello se refi ere al hablantedel último poemario del bonaerense, HospitalBritánico (1986), un libro que ha hecho desu autor, que vivió apartado voluntariamente delos círculos literarios de Argentina, un referentede la poesía en nuestra lengua, especialmente deuna modalidad poco transitada en el siglo XX aambos lados del Atlántico, el de la poesía mística.Las circunstancias que rodeaban al poetacuando surgió Hospital Británico eran las de unhombre internado en un hospital para ser operadode la cabeza, “ser trepanado”, que ademástenía a su madre en el lecho de muerte: “Mimadre es la risa, la libertad, el verano. / A veintecuadras de aquí yace muriéndose.”. Pero, paradójicamente,el hablante ese -yo terminal- seencuentra en paz, como “sacado del mundo”.Por ello, Hospital Británico (el lugar y el poema)supone en sí mismo un estado de excepción, ellugar y el tiempo en el que poder respirar. En suspropias palabras: “Tengo la cabeza vendada. Permanezcoen el pecho de la Luz horas y horas. Soyfeliz. Me han sacado del mundo”.Y además, ahí se encuentra enfrentado a suescritura pasada, que va apareciendo segmentadaen partes del libro (desde 1969 hasta 1986),fechadas para asignar un contexto anterior alde la experiencia hospitalaria y que funciona dealguna manera como premoniciones de esta,como pasos hacia este estado beatífi co (“Soy ellugar donde el Señor tiende la Luz que Él es”) enque se encuentra el sujeto terminal. Este vislumbrasu fi n terrenal y suponemos que también (ymás importante) su principio en “una vida másalta”, suspendido del mundo (“No quiero que metoque la muchacha, ni el rufi án, ni el ojo del poder,ni la ciencia del mundo”), pero también dependientede un contexto espaciotemporal preciso:“Yo estuve en el Británico. Caí enfermo cuando via mamá que quería morirse, y murió cuatro díasdespués de que a mí me trepanaran”.En la única entrevista que dio en vida, dela que procede esta última cita y que se llamailustrativamente “Viel Temperley: Estado de comunión”,dijo sobre el libro: “¿Quién carajo armótodo eso? No tengo idea. (...) No soy el autor deHOSPITAL BRITÁNICO (fragmentos)MES DE MARZO DE 1986Pabellón Rosetto, larga esquina de verano, armadura de mariposas:Mi madre vino al cielo a visitarme.Tengo la cabeza vendada. Permanezco en el pecho de la Luzhoras y horas. Soy feliz. Me han sacado del mundo.Mi madre es la risa, la libertad, el verano.A veinte cuadras de aquí yace muriéndose.Aquí besa mi paz, ve a su hijo cambiado, se prepara —en Tullanto— para comenzar todo de nuevo.(...)HOSPITAL BRITÁNICOVoy hacia lo que menos conocí en mi vida: voy hacia mi cuerpo.(1984)(...)ME HAN SACADO DEL MUNDOMe cubre una armadura de mariposas y estoy en la camisa demariposas que es el Señor —adentro, en mí.El Reino de los Cielos me rodea. El Reino de los Cielos es elCuerpo de Cristo —y cada mediodía toco a Cristo.Cristo es Cristo madre, y en Él viene mi madre a visitarme.(...)ME HAN SACADO DEL MUNDOManos de María, sienes de mármol de mi playa en el cielo:La muerte es el comienzo de una guerra donde jamás otrohombre podrá ver mi esqueleto.(...)PARA COMENZAR TODO DE NUEVOEl verano en que resucitemos tendrá un molino cerca con unchorro blanquísimo sepultado en la vena. (1969)Héctor Viel Temperley (Buenos Aires, 1933-1987)De Hospital Británico (Buenos Aires, Par-Avi-Cygno, 1986)En Obra completa(Madrid, Ediciones Amargord,Colección Transatlántica/Portbou, 2013)eso... (...) Hospital Británico es algo que estabaen el aire. Yo no hice más que encontrarlo”; comosi el poema hubiera sido un dictado en general,algo venido no se sabe de dónde, y también poresa condición de collage de su obra anterior ydel primer fragmento del propio libro, reproducidoaquí, que salta en pedazos y reaparece segmentadoa lo largo de todo el libro en forma de títulosde los fragmentos que lo van formando: “Largaesquina de verano”, “Tu Rostro”, “Tengo la cabezavendada”, “Me han sacado del mundo”, “Lalibertad, el verano”... El propio Viel Temperley lasllamó “esquirlas” en esa misma entrevista: “Seme ocurrió la solución de las esquirlas, lo ordené,escribí lo que habla de la muerte de mamá...”.Y aunque el “relato” comienza con una imagenmás o menos “beatífi ca”, ese sujeto en paz;progresivamente se va enturbiando, adensando,oscureciendo..., como si toda esa claridad (“elpecho de la luz” que lo alberga) llegase a serinsoportable: “¿Toda la arena de esta playa quierellenar mi boca?”. E incluso la violencia físicase hace presente en muchos puntos del libro:“Tengo las toses de los viejos fusiles de un TiroFederal en los ojos. Mi vida es un desierto entredos guerras. Necesito estar a oscuras. Necesitodormir, pero el sol me despierta”. Poética místicay también profundamente carnal, del cuerpodoliente: “Voy hacia lo que menos conocí en mivida: voy hacia mi cuerpo”. En su tesis doctoralinédita Poesía en exilio: en los límites de la comunicación,Arturo Borra habla de “erosión” al referirseal tratamiento dado por Viel Temperley a losmateriales con los que compuso el libro; tanto denueva creación como reutilizados y reubicadosde sus obras anteriores.Escritura excéntrica donde las haya, fuerade los círculos literarios, como decíamos, y lejos,muy lejos de la desacralización característica deldiscurso artístico y poético de la segunda mitaddel siglo XX, es excéntrica también, en el caso deHospital Británico, en su condición de testimoniode un enfermo hospitalizado, sacado del mundo.Es así una escritura liminar, fronteriza, al límite dela vida, casi ya del otro lado: “Mi madre vino alcielo a visitarme”.Gracias a la labor de escritores como RodolfoFogwill, en Argentina, o Eduardo Milán, en México,la obra de Héctor Viel Temperley salió del círculo reducidoen el que se encontraba por su escasa difusión.En 2013, la Colección Transatlántica/Portbou,de Ediciones Amargord, tuvo el valor y el acierto depublicar su Obra completa, siguiendo para ello la24 • a d iós • número 113


➟VERSOS PARA EL ADIÓSedición argentina de Ediciones del Dock, de 2003.Así, el lector español puede acceder, entre otrospoemarios del argentino, a ese turbador testimonio“casi del más allá”, esa “intuición de lo Absoluto”que representa Hospital Británico, en palabras deEnrique Molina, un libro que ha ido creciendo enlectores entusiastas con los años.Junto a Viel Temperley, nos acompaña eneste número Benito del Pliego con un fragmentode su Dietario (2015) que es un testimonio deuna voluntad de permanencia: “Queríamos quealguna nada quedase del yo”, una obstinadaquerencia por la existencia frente a “esta muerteasegurada a cada instante” que nos lleva a quererperdurar “inscritos de algún modo” más alláde nosotros mismos.Primera edición de “Hospital Británico”FRIDAY, MAY 8TH, 2009“Queríamos que quedase algo de nosotros”. Queríamosque nos tomase aparte, nos dijese sí, tu nombreno es en vano, tu nombre lápida en el tiempo, tu afánse salva por la fama, tú permanecerás. Tú escribe,déjanos saber lo que has sufrido, lo que has cedido,lo que ya no queda de ti.Queríamos saber que de nosotros quedaba un algo,queríamos saber que alguien algún día abre la botellaen la ceniza y nos encuentra ausentes, hallazgosde las llagas llenas de yo, pero yo ya ido, pero ya fueego que se fue.Queríamos que algo nuestro permaneciese así fueraenterrado como nuestros huesos, pero más allá, peroinscrito de algún modo. Mapas en nosotros, más quenosotros son, esa desposesión, esa continua destituciónque nos da esa señal que viene de afuera.Queríamos que alguna nada quedase del yo, queríamosdejar trazo de este destrozo, de este tráfago.Queríamos que alguna letra nos lastrase, queríamosque algún adiós, queríamos que algún grano, que ungarabato, que un después, una persona; queríamosque una persona, luego queríamos que alguien, alguno,alguna cosa nos sacase de aquí, de esta muerteasegurada a cada instante.Benito del Pliego (Madrid, 1970)En Dietario (Madrid, Ediciones Amargord,Colección Transatlántica/Portbou, 2015)Patrocinado por:12345Los poemas deben ser inéditos yescritos en español. Su tema ha de serla muerte o tener presencia en ellos.Todos los poemas irán acompañadosdel nombre y apellidos reales delautor, aunque se pueden presentarbajo seudónimo. En ambos casos,se debe adjuntar en sobre cerradonombre, dirección y teléfono.Los poemas no podrán tener másde 14 versos, a menos que seanen prosa, en cuyo caso no podránsuperar las 6 líneas/60 espacios.Cada autor deberá enviar un solooriginal a “Revista Adiós. IV Concurso‘Versos para el Adiós’. Funespaña,S.A.”. C/ Doctor Esquerdo nº 138, 5ªplanta.28007 Madrid.Se pueden enviar poemas porcorreo electrónico a la dirección67Inquietarte@inquietarte.es oprensa@funespana.es en dosdocumentos adjuntos, uno conel poema y otro con los datosseñalados en el punto 3.El plazo de admisión de originalesfinalizará el 1 de agosto de 2015.El resultado del concurso se dará aconocer en la revista de noviembrediciembrede 2015.El poema ganador será publicado enla revista Adiós y enwww.revistaadios.es. Unaselección realizada por el juradode los mejores poemas (incluido elganador) será publicada en la formaque el editor considere oportuno. Elautor que desee concursar deberáenviar junto con el original unadeclaración cediendo los derechospara su publicación, si resultanseleccionados. Esta cesión solo89101112será válida para su publicaciónen la revista Adiós y para suposible publicación en alguna obraantológica derivada de esta. Despuésde aparecer en la revista, los poemaspodrán aparecer donde sus autores locrean oportuno.Aquellos originales que no fueranseleccionados serán destruidos unavez finalizado el concurso.El jurado se dará a conocer cuandose produzca el fallo.Habrá un solo premio de 500 euros.La decisión del jurado seráinapelable y no podrá declarar elconcurso desierto.La participación en este certamensupone la aceptación de estasbases.número 113 • a d iós • 25


TANATOVERBOFrançois Chengy su visión de la vida abiertaInfantil y juvenil Libros recomendadosPilar EstopiñánJavier FonsecaLa obra ‘Cinco meditacionessobre la muerte’de Francoise Chengtiene como cualidad principalque no trata de llevarnos a unaconclusión predeterminada. Nadade prospecciones sobre lo quehay más allá de la muerte ya que,como el mismo autor afi rma, nadielo sabe. El autor no pretendedirigir nuestro pensamiento hacianingún tipo de certeza, salvo laevidente: La muerte forma partede la vida, de nuestra vida. Lavida abierta a todo, incluida, porqué no, la muerte. “Es nuestraconciencia de la muerte la quenos hace ver la vida como un bienabsoluto, y el acontecimiento dela vida como una aventura únicaque nada podría reemplazar”.François Cheng, nacido enChina en 1929, es calígrafo,novelista, traductor y poeta. Estambién profesor del Instituto Nacionalde Lenguas y CivilizacionesOrientales de la Universidad ParísIII. Es miembro de la Academiafrancesa desde 2002. Traductor yEdad:+3Edad:+6poeta, es un conocido especialistaen poesía y pintura chinas. Ha publicado,entre otros libros, ‘Vacíoy Plenitud’ y ‘Cinco meditacionessobre la belleza’.Con más de 90 años,François Chang escribe su obra‘Cinco Meditaciones sobre lamuerte’, y lo hace desde laexperiencia de su vida entredos culturas muy distintas y lavisión que le aportó su origeny circunstancias: “Vengo de loLa abuela durmienteRoberto Parmeggiani/Joao Vaz de Carvalho Kalandraka. 2015La relación entre nietos y abuelossuele ser un lugar de amor gratuito,admiración, generosidad… donde lasdos partes aprenden a mirar con otrosojos el mundo. Un espacio donde elasombro del primer descubrimiento yla madurez de la experiencia conviven.La abuela durmiente es la historia deeste encuentro contada por el nieto querecorre ese tiempo compartido.Conocemos a una abuela que¿Qué viene después de mil?Anette Bley Takatuka 2009OOtto y Lisa son amigos. Vivenen el campo y, entre los dos,suman cuatro piernas y un bastón.Otto conoce muchos secretos: quéviene después de mil, de dóndevienen los números o por qué losindios colocaban a sus muertossobre los árboles. Sabe, además, larespuesta a multitud de preguntasy está dispuesto a descubrir (oinventarse) otras tantas junta a lainquieta y curiosa Lisa. A Otto y aque antaño se llamaba el «Tercermundo». Entonces formábamosla tribu de los condenados, de loseternos cuerpo y corazón rotos,portadores de sufrimiento y deduelos, tan poco consentidosque la menor migaja de vidaera recibida por nosotros comoun don inesperado.(…) Debíamorir joven y, al fi nal, mi vida estásiendo muy larga”.El autor indaga en la muertedesde su dualidad con la vida, laobserva sin temor, la acepta comoparte de un ciclo que al fi nal esun ciclo vital. En palabras deleditor de la obra, “a la edad denoventa y cuatro años, el poetasintió una imperiosa necesidadde hablar sobre la muerte. Sobrela muerte, es decir sobre la vida,puesto que su propósito, en elcruce entre el pensamiento chinoy el occidental, se inspira en unavisión ardiente de la ‘vida abierta”.Las cinco meditaciones surgende un intercambio del autorcon interlocutores en una salade Yoga. El lector es el invitadoduerme todo el día desde hace un mes,pero que antes no era así. A través de susrecuerdos, el niño nos habla de lo quehacía con ella antes de que se durmiera.Lo hace con sencillez y una voz infantilque destaca las cosas que cualquier niñorecordaría: las meriendas, los regalos y,cuando comienza su declive, los despistesy excentricidades de la abuela. Unavez dibujado todo el proceso, basta uncambio de tiempo verbal para devolver-Lisa les une las ganas de conocer,las cerezas, las galletas y bizcochosde Olga y, por supuesto, la mismaOlga. Solo les separa la edad puesOtto, aunque en ningún momento lomencione el libro, bien podría ser elabuelo de la pequeña Lisa.Viven felices en un entorno alegrey despreocupado, siempre verde y azulen las ilustraciones hasta que el otoñollega a la historia y a la vida de Otto almismo tiempo en forma de tonos ma-invisible a ese encuentro en elque el autor ofrece abiertamentesus meditaciones sobre la muertedesde la humildad de quien nopretende tener la verdad sino unbuen número de buenas e interesantespreguntas que muchasveces son respuestas.Desde la perspectiva deCheng, cada instante es unimpulso hacia la vida y no lamuerte: “En lugar de mirar a lamuerte desde este lado de la vidacon espanto, podríamos integrarla muerte en nuestra visión dela vida (…) En esta posición,mientras estamos en vida, nuestraorientación y nuestros actosserían siempre impulsos haciala vida”.Título: Cinco meditacionessobre la muerteAutor: François ChengEditorial: : SiruelaColección El Árbol del ParaísoEdición: 2015nos a la realidad: la abuela ya no“duerme”, la abuela “dormía”, porqueahora ya no está.El nieto convive con la abuelahasta el último momento, permanecea su lado leyendo su librofavorito mientras con su imaginaciónbusca respuestas a por qué la abueladuerme. Y su lógica infantil le lleva aconcluir que, como el personaje delcuento clásico, la abuela duerme enespera de un príncipe que venga allevársela a hacer las cosas que másle gustan.rrones, blancos y grises. Entonces,Otto se acerca a la muerte consosiego. Le vemos despedirse dejandomuy claro que él, como buenjardinero, quiere volver a la tierra,nada de subirlo a un árbol. ‘Eso selo dejamos a los indios’, dirá antela pregunta de Lisa. Esa sensaciónde calma y naturalidad se transmitetanto a Lisa como al lector. La niñamantiene vivo al anciano en surecuerdo y no entiende por quélos mayores susurran y están muyserios. También llora, pero espera aestar sola con Olga. Entonces, las26 • a d iós • número 113


Lugar común la muerte➟TANATOVERBOya tiempo“Hacedescubrí, nosin sorpresa,que los azares del periodismo meacercaban con persistencia al temade la muerte. Hacia 1965 advertí, enHiroshima y Nagasaki, que un hombrepuede morir indefi nidamente, yque la muerte es una sucesión, noun fi n”. Así se expresaba el periodistay escritor argentino, Tomás EloyMartínez, en el prólogo a la primeraedición del libro de relatos ‘Lugarcomún la muerte’. Treinta añosdespués, en la última revisión quepudo hacer de la obra, entre otroscambios, incluye cuatro elegías a lasque ya había escrito en la primeraedición, entre ellas, una dedicada aJosé Lezama Lima y otra que narralos últimos momentos de AugustoRoa Bastos, “el primer amigo quetuve en mi vida de escritor”.Tomás Eloy Martínez nos llevaa los últimos instantes de los protagonistasde sus relatos. Algunosde ellos son fi guras relevantes de la<strong>literatura</strong>, pero también se acercaa las historias de personas que seguiríansiendo anónimas de no serporque quedaron atrapados parasiempre en algunas de las terriblesmasacres que pueblan la Historia,como es el caso de Hiroshima yNagasaki.El libro se estructura en Eclipses,Destrucciones y Addendas. Loseclipses comienzan con la fi gurade Juan Domingo Perón y el relatode sus últimos momentos - “Perónsueña con la muerte”- y sigue con13 relatos más en los que describelos últimos instantes vitales de, entreotros, el poeta venezolano José AntonioRamos Sucre. Bajo el epígrafeDestrucciones encontramos tres relatos,entre ellos “Los sobrevivientesde la bomba atómica”. Con un estiloque combina el rigor periodístico deldocumento y la destreza literaria,el autor advierte en el prólogo que,además de la investigación de datosy fuentes, encontraremos en losrelatos la emoción y los sentimientosque puso en ellos que, de algunaforma, componen una realidad que“no es sólo la de los hechos”.Tomás Eloy Martínez nació enTucumán, Argentina, en julio de1934. Licenciado en LiteraturaEspañola e Hispanoamericana en laUniversidad nacional de Tucumán,su vida profesional discurrió en loscauces del periodismo en diversosmedios de su país. Entre otrasactividades, fue crítico de cine, jefede redacción del semanario PrimeraPlana y director del suplementocultural del Diario La Opiniónhasta 1975. En esa fecha se exilióa Caracas (Venezuela) debido a lasamenazas de la Triple A.Escribió y publicó ‘Lugar comúnla muerte’ en su exilio en Caracas,en 1979. En Venezuela continuó consu labor periodística y entre sus numerosasactividades fue fundadorde El Diario de Caracas, del que fuedirector de Redacción. Tomás EloyMartínez pudo regresar a Argentinaen 1998 donde continuó con suintensa vida profesional. PremioAlfaguara de Novela 2002 por ‘Elvuelo de la reina’. El jurado destacó“la descripción de los mecanismosdel poder político y de los mediosque componen un mundo decorrupción y se extiende a todoslos ámbitos de la vida. Y al mismotiempo el relato de los misterios dela obsesión sentimental y eróticaque a su vez se pueden interpretarcomo una metáfora de la realidad enla que transcurre la acción”.Tomás Eloy Martínez ha sidoy es a través de su obra un referenteen las escuelas de periodismoy considerado por la mayoríade sus coetáneos uno de losmejores escritores de Latinoamérica,precisamente por eludir loslugares comunes para adentrarse,de la mano de la <strong>literatura</strong>, en losterritorios que debe explorar elbuen periodismo.Título: Lugar común la muerteAutor: Tomás Eloy MartínezEditorial: AlfaguaraEdición: 1979Son muchos los libros que acercan alos niños al tema de la muerte a través delfallecimiento del abuelo o la abuela. No esextraño que esta sea la primera pérdida en lafamilia que viva el niño. ‘La abuela durmiente’es una historia escrita con sencillez, dondeno sobran palabras, y con unas ilustracionescálidas, sin apenas detalles donde perderse,sostenidas por los personajes que transmitenlas emociones de cada escena. Una cuentodentro de otro cuento porque una abuela puedeser también una fantástica bella durmientey, como tal, acabar rescatada por su príncipeazul, ser feliz y beber limonada. Aunque esosignifi que que ya no la volvamos a ver.dos, descubrirán que Otto no se ha idodel todo.‘Qué viene después de mil’ es uncuento ilustrado, que no un álbum, idealpara leer en familia. Además de las ilustraciones,el libro está lleno de dibujos ygarabatos en los márgenes que permitenuna segunda lectura a través de lo quepasa por la cabeza de Lisa en cadamomento. Una historia tierna y cercana,con tintes poéticos, que habla de lamuerte, de la compañía en el duelo y delconsuelo que puede traernos compartirrecuerdos sobre un ser querido. Porquelos muertos quieren que la vida siga.GenocidioEl término ‘genocidio’, que surgió enpleno siglo XX, se utiliza cada vezmás en los medios de comunicación, y ellono parece que sea una señal positiva de losavances de la Humanidad. El verano pasadolo hemos oído varias veces hablando de lasacciones llevadas a cabo contra el pueblopalestino por parte de las tropas israelíes.En abril de 2015 se ha conmemorado elcentenario del genocidio armenio, el primerodesde el punto de vista cronológico. Desdelos años cuarenta se habla del que sufrió elpueblo judío por parte de los nazis, conocidomás generalmente con el término ‘holocausto’.No podemos olvidar el de Ruanda en ladécada de los noventa del siglo pasado. Veanla película “Shotting dogs” (Disparando aperros), por ejemplo.Pero, ¿qué es realmente el genocidio? Eltérmino fue acuñado y defi nido por primeravez por Raphael Lemkin, jurista judío denacionalidad polaca, que en 1939 había huidode la persecución nazi y había encontradoasilo en Estados Unidos. En su libro ‘El poderdel Eje en la Europa ocupada’, publicado en1944, defi nió el genocidio como “la puesta enpráctica de acciones coordinadas que tiendena la destrucción de los elementos decisivos dela vida de los grupos nacionales, con el fi n deaniquilarlos”.Se trata de un delito internacionalque comprende “cualquiera de los actosperpetrados con la intención de destruir, totalo parcialmente, a un grupo nacional, étnico,racial o religioso como tal”. Estos actoscomprenden la “matanza y lesión grave a laintegridad física o mental de los miembros delgrupo, el sometimiento intencional del grupoa condiciones de existencia que hayan deacarrear su destrucción física, total o parcial,medidas destinadas a impedir nacimientos enel seno del grupo, el traslado por la fuerza deniños del grupo a otro grupo”.Según el sociólogo e historiadorbritánico Michael Mann (Manchester 1942),el genocidio es el grado más extremo deviolencia ejercida hacia toda una sociedady el más extremo de todos los actos delimpieza étnica. Para este autor el impactode los genocidios durante el siglo XX ha sidodevastador, no sólo por el número de víctimasque se han cobrado, que podría llegar aunos sesenta millones de personas, sinopor la extrema crueldad de las agresiones,incluyendo refi nadas torturas y poniendo derelieve los bajos fondos del ser humano.Javier del HoyoDiccionario funerarionúmero 113 • a d iós • 27


MUERTOS DE CINEYolanda CruzFunespaña premia al corto‘Teatro’ de Iván Ruiz en la quintaedición de VisualízameIván Ruiz, con “Teatro”, ha resultadoganador del premio especialFunespaña en el V festival Visualízamede Fundación Inquietarte. El juradodestacó tanto el modo de refl exionarsobre el duelo desde las distintasperspectivas planteadas por los dospersonajes protagonistas, com o elcorrecto uso de la fotografía y de susposibilidades semióticas para hacer dela iluminación un elemento más de latrama.Los claroscuros, luces y sombrasque marcan los límites, físico y emotivos,en los que vive la protagonista. Su casa,un espacio silencioso, vacío desde lamuerte del esposo, un canario quenunca canta, los visillos que no dejanpasar la luz y que protegen el mundointerior de la viuda; sus recuerdos, susoledad, del exterior. Un frigorífi co cuyapuerta, blanca y vacía, se muestra a losojos de la protagonista como una pizarrapara colorear, imanes con formas depájaros de colores, tan silenciosos comoel canario, único interlocutor de unamujer sola que busca en la peluqueradel barrio, la mirada de la escucha y elcalor de una caricia, lavado y corte; yla caricia deja de ser automática en elmomento en el que la historia de amorrememorada para ser superada escompartida. Una nueva amistad, pagaday agradecida, como esperanza.“Se trata de un homenaje para laleyenda de los amantes de Teruel, unahistoria de amor, muerte y vida”, asípresentaba Ruiz su corto, “Teatro”, enel transcurso de la entrega de premiosdel V Visualízame, una historia de lucesy sombres, de realidad y fantasía, derecuerdos que adquieren carácter deleyenda al ser contados, dos escenarios,simbólicos, la intimidad y lo público,separados y distinguidos por el telón deuna soberbia fotografía.FinalistasLos cortos “Origen de una leyenda”de Rocío Montes, “Gotas de fumaça”de Anne Siderman, Brasil; “Would yourun?”de Margot Zervellis, Francia;“Réplica” de Lucien Burckel de Tell;“Teratoma” de Óscar Díaz; “Firmeusted aquí” de Rodrigo Zarza; “Aúnno estoy muerto” de Alain Lefevre;En directo, Wenceslao Scyzoyk;“Rosalinda” de Milagros Campos; “Atiempo” de Sara Bibiana; “Una gallina”El director del cortometraje “Teatro”, Iván Ruiz, en el centro de la foto el pasado 27 de junio durante la gala del FestivalVisualízame junto a Yolanda Cruz (a su derecha) y otros cortometrajistas, después de recibir el premio de Funespaña.Dos secuenciasy el cartel promocionaldel corto “Teatro”.de Alejandra Arboledo y “Honorio”dosminutos de sol, Paco Gisbert y PaquiRamírez, resultaron fi nalistas al premioespecial Funespaña en la V edición deVisualízame.<strong>Cine</strong> en FunermostraPor otra parte, con motivo deFunermostra 2015, la feriainternacional de productos y serviciosfunerarios, Visualízame, el festivalde cortometrajes de FundaciónInquietarte, en colaboración conFunespaña, organizó dos proyeccionesde cortometrajes para público infantil yadulto, respectivamente, con trabajosganadores y fi nalistas de las dosprimeras ediciones del premio especialFunespaña al corto que mejor refl exiónsobre la muerte y el duelo que estaempresa patrocina y con una selecciónde cortos valencianos.La primera de las proyecciones “Loscuentos, la magia y el ciclo de la vida enel cine” se desarrolló en dos sesiones,con alumnado de 4º y 5º de Primaria, encada caso, en el colegio público Lluis deSantangel de El Saler y tuvo como puntode partida, para la refl exión sobre el ciclode la vida, el cortometraje O’Xigante deLuis Da Matta y Julio Valenzer.La proyección para público adultose organizó en colaboración conCulturArts, Filmoteca valenciana, el Aulade <strong>Cine</strong> de la Universidad Politécnicay el Palau Cerveró; tres horas para lasjornadas <strong>Cine</strong>, Muerte y Duelo, en lasque se proyectaron una selección decortometrajes valencianos: “18 vidas,18 silencios”, Rafael Solaz; “Algoqueda”, Ana Lorenz; “3/105” DiegoOpazo y Avelina Prat y “El edén deKiko”, Paco Gisbert, Ramón Alós y PaquiRamírez, los tres últimos, fi nalistasdel premio especial Funespaña, ylos ganadores de las dos primerasediciones de dicho premio: “Ojos queno ven”, de Natalia Mateo y “Epitafi os”de María Ballesteros, además de“Democracia” de Borja Cobeaga(2013), fi nalista y premio al mejor guionoriginal del IV Visualízame.28 • a d iós • número 113


➟MUERTOS DE CINEMARGARITA LOZANO,la cómica que durmió en elcolchón de UnamunoGinés García AgüeraLa abuela Olvido, en “La mitad del cielo”, deManuel Gutiérrez Aragón, no muere del todocuando muere, porque suele aparecerse a susnietas y bisnietas para consolarlas con una miradairrepetible y llena de ternura, y a veces pararecitarles los resultados de la próxima quinielade fútbol. La abuela Olvido salta como una niñajugando a la rayuela, transmite su olor a travésde la pantalla y se deja abrazar por Ángela Molinacomo nadie ha sabido dejarse abrazar nunca.La actriz Margarita Lozano, cada mañana,abre los ojos al despertar y seencuentra, cerca, un Mediterráneoluminoso que observa desde la ventana de suhabitación, desde una casa pintada de un azulcontundente, y plantada solitaria en la belleza delpaisaje de la costa murciana, muy cerca del pobladolorquino de Puntas de Calnegre. Abre losojos al despertar y, rodeada de algunos perrosque ha ido adoptando con el tiempo, deja pasarlas horas enredada en recuerdos y evocacionessobre el milagro de vivir. Mientras observa el vaivéncontinuo del mar, ese sonido de olas incansablesque parecen acompañarla solidarias consu mundo interior, quizás recuerde los espaciosocupados durante ochenta y tantos años de vidapor todo el mundo, especialmente África, Italia ysu Lorca adoptiva. Y quizás, a ratos, enumere atantos personajes a los que, en alguna ocasión,en cine, teatro y televisión, les ha entregado sualma para que cobren vida y aliento en las pantallasy los escenarios.La madre de don Giulio yace muerta en “La misa haterminado”, de Nanni Moretti. El director, al verla enel plató, con los ojos cerrados, inmóvil, siente deseosde pedirle: “por favor, levántate y háblame”. YMariagrazzia, en “Kaos”, de Paolo y Vittorio Taviani,desde el borde del camino, mira el rostro esquivode su hijo, vivo retrato del hombre que la violó añosatrás. Ahora abre los ojos la madre que se niega areconocer, a amar a ese ser.Margarita Lozano, actriz de una raza de esasque hace que cada uno de sus trabajos perdureen la memoria de cualquier espectador, fueinvestida recientemente Doctora Honoris Causapor la Universidad de Murcia. Fue esa investiduraotro abordaje glorioso de los cómicos hastalas “alturas” antes prohibidas de las academias,los foros universitarios, la creación literaria, comosi esos magos que interpretan y hacen suyospersonajes que antes no poseían más que vacío,necesitaran penetrar otras estancias que no fueranlas de otorgarnos el milagro de la fabricaciónde seres que anteriormente eran frascos sincontenido hasta la llegada y apropiación venturosadel actor. Del actor-creador.Ramona, la criada silenciosa de “Viridiana”, de LuisBuñuel, no mira a los ojos a sus señores. Un gato saltasobre la inocencia en el trastero de la vieja casona.Hay un suicidio que se vale de una comba infantil. Aúncon la mirada en el suelo la inocente sirvienta juegauna partida de tute con Silvia Pinal y Paco Rabal. Ydoña Vicenta recibe la noticia de la muerte de su hijoFederico en “Lorca, muerte de un poeta”, de JuanAntonio Bardem, mientras se agarra el corazón quese encoge de dolor bajo las luces de la Huerta de SanVicente. Luego, años más tarde, sobre el serrín de lastablas de un teatro, una imponente Bernarda Alba sehizo con el alma de una actriz en estado de gracia.Margarita Lozano, nacida en Tetuán, de profesióncómica, ahora retirada y feliz en su refugioazul de Puntas de Calnegre, dijo en cierta ocasiónque “fi ngir en la vida es decir mentiras; fi n-gir en el teatro (y el cine) es contar verdades”. EnMargarita Lozano (derecha)en su papel de la criadaRamona en “Viridiana”,un personaje clave perosiempre en la discreción delsegundo plano.su discurso de investidura como Doctora HonorisCausa, le pasó los honores del reconocimiento alteatro. “El teatro hay que estudiarlo, pero sobretodo hay que amarlo y respetarlo”, leyó. Ha trabajadoa las órdenes de Pasolini, Buñuel, Taviani,Camus, Leone, Isasi, Risi, Gutiérrez Aragón o Bologninien el cine. En teatro, son incontables suscreaciones de la mano de gentes como Narros,Alonso, Luca de Tena, Tamayo, González Vergel…tantos otros.La doctora Blanche indaga en la mente de Anna, o leofrece una manzana a su paciente en “Diario de unaesquizofrénica”, de Nelo Risi. La mirada ahora es directa,hacia los ojos. Y todo su cuerpo es el instrumentode Tina la pobre actricilla en “Los farsantes”, de MarioCamus, mientras se despoja de su ropa, y arropa almismo tiempo la dignidad de un ofi cio necesario.“Desde que llega a mis manos la obra, pocoa poco me va contando sus secretos, me contagiasus pasiones; y yo le doy mi alma”. MargaritaLozano dijo esto en un discurso en el que tambiénno pudo dejar pasar inadvertida su pasiónpor Miguel de Unamuno. Hubo un tiempo en quela actriz se vestía como él, camisa blanca, corbata,pantalones… “es que lo quiero, me hacecosquillas en la tripa, me maleduca”. En ciertaocasión, esta cómica irrepetible pasó una temporadaen Salamanca, en casa de la hija de Unamuno.Durmió en el colchón que había usado elescritor. Y fue entonces cuando tuvo que producirsecierto traspaso de almas de aquí y allá. Oel milagro de la creación mágica de una cómicaque nos ha regalado parte de sus entrañas.número 113 • a d iós • 29


MIS QUERIDOS CADÁVERESSin noticias deMURILLO y ZURBARÁNNieves ConcostrinaDecía el periodistazaragozanoMarianode Cavia (1855-1920) que no hay en estedesgraciado país profesiónmás intranquila, insegurae incómoda que lade difunto ilustre. Tenía razón.He aquí un repaso rápido al paradero delos huesos de algunos de nuestros grandesmaestros pintores. Goya, enterrado sin cabeza;Velázquez, en algún lugar bajo la plaza deRamales de Madrid, pero vaya usted a saberdónde (un monolito recuerda que por allí anda,y un rimbombante epitafi o dice que “su gloriano fue sepultada con él”); El Greco dicen quepara por una iglesia de Toledo, pero hay quehacerse el tonto para creerlo; Zurbarán, posiblementeen algún lugar debajo de la BibliotecaNacional de Madrid; Murillo, bajo los adoquinesde una plaza de Sevilla... Ese es el panorama.Por dar una buena noticia, de José deRibera, más conocido como El Espagnoletto,sí tenemos localizado el enterramiento. Estásepultado en la iglesia Santa María del Parto,en Nápoles, de dónde se podría deducir queRibera disfruta de tumba porque tuvo la buenaidea de morirse en Italia. Si hubiera regresado aEspaña a terminar aquí su carrera artística estaríaen el mismo limbo que Velázquez, Murilloy Zurbarán. Y de estos dos últimos vamos a seguirlas pistas que nos llevarán a ninguna parte.Bartolomé Esteban Murillo. Gran tipo. Unpedazo de artista sevillano del siglo XVII especialistaen plasmar vírgenes y vidas de santos.Pero cometió una imprudencia artística cuandoya no estaba para demasiados trotes: aceptóun encargo para pintar el retablo de la iglesiadel convento de los capuchinos de Santa Catalina,en Cádiz. Cuando daba unas pinceladitasen la parte de arriba del cuadro principal, dio untraspiés en el andamio y besó el suelo.Las heridas de la caída le precipitaron lamuerte unos meses después. No contaba élcon morirse de una forma tan tonta y en accidentelaboral, y por eso no le dio tiempo aterminar de dictar su testamento. Sí pudo, almenos, dejar claro dónde quería ser enterrado:en la parroquia de Santa Cruz de Sevilla. Y asíse hizo. Murillo, que tuvo el honor de ser llevadohasta su enterramiento a hombros de dosmarqueses y cuatro caballeros, disfrutó de sudescanso casi siglo y medio, hasta que llegaronlos pelmazos de los franceses a invadirnos yFotografía de la Plaza de la Santa Cruz de Sevilla donde, quizás, esté Bartolomé Estaban Murillo.el templo del barrio de Santa Cruz acabó enescombros.Cierto que las tropas napoleónicas ocuparonSevilla y ordenaron la expropiación y elderribo de la iglesia donde estaba enterradoMurillo, pero alguna autoridad sevillana de laépoca podría haber levantado el dedo para decir,oigan, señores gabachos, ¿podemos sacara Murillo y luego ustedes tiran el templo? Puesno. Todos callados. Es exactamente la mismacircunstancia que se dio con Velázquez. Qué innecesariacoincidencia: dos pintores sevillanosy los dos bajo sendas plazas.Ahora, sólo una placa recuerda que enalgún lugar bajo la plaza de Santa Cruz, paranlos restos de Murillo, el pintor que muriópor subirse a un andamio cuando la artrosis leaconsejaba lo contrario.Grabado del conventode los agustinosrecoletos de Madriddonde fue enterradoFrancisco deZurbarán.Y al otro pintor barroco, a Francisco de Zurbarán,no le fue mejor.Zurbarán, quién sabe, puede estar debajode la Biblioteca Nacional de Madrid, al ladito dela plaza de Colón, que no es que sea mal sitio,pero mejor sería que hubiéramos conservadosu tumba. Esta vez no le podemos echar la culpaa los franceses. Zurbarán se murió a mediadosdel XVII y lo enterraron donde él pidió, enel convento de los agustinos recoletos, en Madrid...y ya es fácil deducir dónde está el origendel nombre del famoso Paseo de Recoletos.El caso es que Zurbarán estaba tan tranquiloél, enterrado en su convento, cuando llegóMendizábal con su famosa desamortizacióndel siglo XIX. Echó a los frailes, derribó el conventosin reparar en los huesos del gran Zurbarány allí quedó un magnífi co solar que luegofue adjudicado en pública subasta. ¿Quién se loquedó? Mendizábal. Huele fatal este trapicheo.Ese solar luego tuvo distintos usos, entreellos, un taller de carruajes, hasta que se decidióconstruir la Biblioteca Nacional. Si Zurbaránquedó confundido entre los cimientos o si saliócon los escombros del derribo, difícil saberlo, perocolorín colorado, otro pintor a hacer gárgaras.Aprovechando que el Museo Thyssen deMadrid ofrece la exposición temporal “Zurbarán:una nueva mirada” hasta el 13 deseptiembre, convendría ir a verla. Es lo únicoque queda del artista: su obra. Que ya esbastante.30 • a d iós • número 113

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