Vol. XXXVIII / 1 - Studia Moralia
Vol. XXXVIII / 1 - Studia Moralia
Vol. XXXVIII / 1 - Studia Moralia
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
100 MARCIANO VIDAL<br />
Santo para gloria de Dios Padre” 131 .<br />
De hecho, el Catecismo de la Iglesia Católica, al inicio de la<br />
parte dedicada a la Moral, propone una estructura trinitaria<br />
para exponer el contenido de la moral cristiana 132 , si bien en el<br />
ulterior desarrollo de la materia no es tan patente su opción por<br />
ese esquema, prefiriendo el del Decálogo y el de las Virtudes 133 .<br />
El reciente Directorio General para la Catequesis tiene un interés<br />
especial en resaltar la estructura del “cristocentrismo trinitario”<br />
en la propuesta del mensaje cristiano. El hondo “cristocentrismo”<br />
134 del mensaje cristiano ha de interpretarse desde el misterio<br />
fontal de la Trinidad y convertirse, así, en “cristocentrismo<br />
trinitario” 135 .<br />
La moral cristiana tiene una estructura ontológica trinitaria,<br />
ya que toda la vida cristiana tiene idéntica configuración. Es ésta<br />
una perspectiva que tiene su origen en la misma Revelación y que<br />
ha sido mantenida fielmente por la Tradición. El Papa Juan<br />
Pablo la ha vuelto a explicitar con ocasión de la preparación al<br />
Gran Jubileo del Año 2000, proponiendo el Misterio trinitario<br />
como contenido y estructura de esta magna celebración cristiana<br />
136 . San Ireneo lo expresó con esta densa fórmula: “Por el<br />
Espíritu subirán al Hijo, después por el Hijo subirán al Padre” 137 .<br />
Manuel Silvela 14<br />
28010 Madrid<br />
Spain.<br />
MARCIANO VIDAL<br />
131<br />
Catecismo de la Iglesia Católica, n. 2558: “La Iglesia lo (el Misterio de<br />
la Fe) profesa en el Símbolo de los Apóstoles (Primera parte del Catecismo)<br />
y lo celebra en la Liturgia sacramental (Segunda parte), para que la vida de<br />
los fieles se conforme con Cristo en el Espíritu Santo para gloria de Dios<br />
Padre (Tercera parte)”.<br />
132<br />
Ibid., nn. 1693 (Padre), 1694 (Cristo), 1695 (Espíritu Santo).<br />
133<br />
Cf. M. VIDAL, La Moral cristiana en el nuevo Catecismo (Madrid, 1993)<br />
37-43.<br />
134 CONGREGACIÓN PARA EL CLERO, Directorio General para la Catequesis<br />
(Vaticano, 1997) n. 98 (pp. 107-108).<br />
135<br />
Ibid., n. 99 (pp. 108-110).<br />
136 JUAN PABLO II, Tertio millennio adveniente (Vaticano, 1994), passim<br />
(ver, por ejemplo, n. 8).<br />
137 SAN IRENEO, Adversus haereses, V, 36, 2: PG, 7, 1223: “Per Spiritum<br />
quidem ad Filium, per Filium autem ascendere ad Patrem”.