II - CCA Monatsblatt

La meta: Turista culto, servicio confiable
También en Chile se entiende por ecoturismo un turismo que no sea invasivo o
depredador. El turista debería pasar casi imperceptible, caminando estrictamente
en los senderos indicados, admirando la naturaleza y la cultura desarrollada en
este hábitat. "Nuestro propósito es servir a un ecoturista culto e informado. Por
lo tanto, el servicio debe ser muy confiable, cálido y nada improvisado. La idea
es que haya códigos escritos" afirma Adolfo Alvial de la Fundación EuroChile.
En los estacionamientos nunca faltan los letreros “Lleve su basura”. En cuanto a
infraestructura, uno siempre encuentra un hotelito o un camping decente. Las
áreas de camping normalmente tienen duchas ecológicas (bolsas negras),
parrillas, sombrillas, servicio de basura y de agua. En fines de semana largos,
feriados, vacaciones o fiestas nacionales, los servicios están garantizados, pero
en temporadas bajas, es mejor llamar a las administraciones respectivas antes de
viajar. Sino, puede pasar que uno, agotado, se encuentre al anochecer en un
lugar remoto sin agua ni cama. ¡Esto vale sobre todo para ciclistas!
Tip:
El ciclismo turístico es relativamente incipiente en Chile. En pocas ciudades se
encuentran ciclovías y los conductores de autos y buses no están acostumbrados
a respetar estos seres delgados en la carretera. Más vale vestirse con colores
llamativos y armarse de signos vistosos como una banderita color naranja. Está
prohibido pasar por túneles en bicicleta, pero después de llamar al SOS en los
postes de la entrada, llegarán las vagonetas de emergencia para transportar
personas y bicis al otro lado del cerro.
Las áreas protegidas
Un rol destacado en la conservación del patrimonio silvestre juega la
Corporación Nacional Forestal, CONAF que tiene la responsabilidad de
contribuir al desarrollo del país a través del uso sostenible de los ecosistemas
forestales. Un 21 por ciento del territorio nacional, es decir 17 millones de
hectáreas están cubiertos de bosque, pero la cantidad de las especies nativas en
fauna y flora no puede compararse con la exuberancia en Bolivia. Sin embargo,
las plantaciones forestales, principalmente de Pinus radiata y especies del género
Eucalyptus, abarcan una superficie cercana a los 2,1 millones de hectáreas
equivalentes al sólo 2,8% de la superficie.
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